Capítulo 12

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Viernes

Viernes

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Engfa: - Creo que es muy linda ¿Cómo dices que se llama? - Preguntó Engfa realmente interesada mirando las fotos en el celular de Meena

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Engfa: - Creo que es muy linda ¿Cómo dices que se llama? - Preguntó Engfa realmente interesada mirando las fotos en el celular de Meena.

Meena: -¿En serio lo crees? - contestó Meena mientras  le quitaba de las manos el teléfono a su amiga, evitando darle el nombre de Aoom.

Engfa: -Sus labios son tan lindos y besables, ¿No? ¿Por qué nunca la había visto antes?, una chica así de bella es imposible no notarla.

Meena: - Tal vez porque es de segundo año - dijo la palida rodando los ojos - tiene toda la semana mandándome mensajes de buenos días y deseándome lindos sueños por la noche- dijo Meena burlona mientras se reía.

Engfa: -Eso suena muy lindo - señaló Engfa.

Meena: - No le he contestado ninguno - dijo Meena mientras seguia riéndose de la situación y casi escupe el té que estaba tomando.

Engfa: - Eso es muy cruel – la regañó su amiga.

Meena: - ¡Yo no soy lesbiana! No sé por qué insiste tanto.

Engfa: - Yo decía lo mismo ¡y mírame chatamontai! - bromeó Engfa.

Engfa era una de las compañeras de Meena, declarada abiertamente lesbiana desde que tenía 12 años, era realmente hermosa, si había alguien en el instituto capaz de dejar con la boca abierta a cualquiera era ella, claro después de Meena.

Ambas tenían una especie de relación amigas-rivales pues las dos tenían el ego muy elevado y eso no siempre se lleva bien, además el hecho de que Engfa no tuviera ningún tipo de complejo al expresar libremente su sexualidad le incomodaba a la palida. No es que Meena fuera homofóbica, no tenía nada que ver con eso. Simplemente le molestaba como todo parecía tan fácil para ella, salir con un montón de chicas, presentarlas como "sus novias" y después deshacerse de ellas como si nada. A veces pensaba que la chica no tenía corazón. Una chica no se merece ser botada así como Engfa lo hacia.

Meena: -Bueno yo no soy como tú - dijo Meena con un toque de veneno en la voz.

Engfa: - No, no lo eres – contestó Engfa de la misma manera mientras le guiñaba un ojo lo que le causo gracia a Meena.

Engfa: -Vamos, dame su número, si no eres lesbiana y no piensas responderle, deja que otras aprovechemos a esa belleza - le pidió haciendo un puchero.

Meena: -Consíguelo tú misma, yo tengo que irme, tengo clase ahora- finalizó la conversación Meena con cierta molestia en la voz mientras tomaba su mochila y salía de la cafetería con un paso apresurado.

Cuando llego a su clase de Historia del Arte se sentó hasta la parte de atrás, le aburría realmente aquella asignatura, o más bien le aburría la profesora Phon, su voz era tan tediosa que podría poner a dormir a cualquiera en cuestión de minutos, para entretenerse un poco reviso discretamente su celular, leyó una vez más todos los mensajes de Aoom, vaya que esa chica no se rendía. La palida sabía que la imagen hot y la conversación que tuvieron aquel día solo motivaría a la pequeña chica morena a insistir más, pues para Meena estaba claro que esa chica tenía alguna clase de "obsesión" con ella, como tantas veces le había ocurrido, solo que jamás había tenido un admirador que fuese una chica y menos aquella  perdeora de la biblioteca. Sintió un remordimiento al recordar que ya no trabajaba más ahí por su culpa, aunque todo había sido un mal entendido.

Cuando finalmente terminaron las clases, con algo de fastidio, fue hasta su casillero para recoger sus cosas e ir a casa, pero en su camino vio como Engfa le hablaba muy de cerca a Aoom. No habían pasado ni tres horas desde que le mostró su foto ¡Y ya la había encontrado!

Quiso ignorar la escena y pasar de largo, pero algo se lo impidió, cerró sus ojos con fuerza sabiendo que lo que estaba a punto de hacer la hundiría más en aquello que tanto trataba de evitar.

Meena: - ¡Hola Aoom! ¿Lista para irnos? - Dijo al momento en que se colocaba entre las dos a Aoom le causo ilusión que Meena le hablara en la escuela, pero estaba confundida ¿irse a dónde? Ella no recordaba haber quedado de ir a algún lado con Menna, Meena nisiquiera contestaba sus mensajes.

Engfa: - ¡Oye! Aoom estaba a punto de responderme algo... - exclamó Engfa en modo de reclamo por la interrupción y tomó tiernamente la mano de la más pequeña quien se puso nerviosa ante el contacto de sus manos, le agradaba esa sensación le hacía sentir cosquillas en el estómago

Engfa:  - Entonces preciosa ¿Saldrías conmigo? - le propuso coquetamente ignorando por completo la presencia de Meena que se encontraba con el ceño fruncido.

Aoom: -Amh... yo... - quiso contestar Aoom, pero Menna la interrumpió.

Meena: - Búscala luego Waraha, nosotras tenemos que irnos - dijo Meena tirando de la mano de Aoom para alejarla de su amiga.

Aoom quería preguntar que había pasado, pero no se atrevió, le gustaba mucho como se sentían los dedos de Meena presionando ligeramente los suyos y no quería interrumpir el contacto. Cuando llegaron al auto la mayor abrió la puerta del copiloto, y Aoom entro dedicándole una sonrisa tonta que Meena decidió ignorar. No hablaron durante el camino, tan solo escuchaban el radio. El corazón de Aoom latía irremediablemente rápido, jamás imaginó que esto pasaría, claro que lo había deseado mucho, pero después de los últimos días en que la Mayor la había ignorado estaba perdiendo la fe.

Meena: - Bueno... - dijo Meena mientras aclaraba su garganta al notar que Aoom no bajaba del auto, ya tenían 5 minutos estacionadas frente a la casa de la pequeña tailandesa y esta no parecía tener intenciones de abandonar el coche.

Aoom: -¿Cómo sabes dónde vivo? - le preguntó de pronto la más joven y la tailandesa mayor desvió la mirada no sabiendo que responder.

Meena: - Engfa no tiene buenas intenciones, piénsalo bien antes de aceptar salir con ella- dijo cambiando el tema - me tengo que ir Aoom, cuidate.

Aoom: -Esta bien, Meen-meen - Meena frunció el ceño al escuchar aquel apodo, pero no dijo nada - gracias por traerme y tomaré en cuenta tu consejo – Aoom se acercó para despedirse con un beso en la mejilla, Meena quiso apartarse, pero prefirió no ser tan idiota y le permitió hacer aquello – Adiós, nos vemos luego - dijo la pequeña con una linda sonrisa bajando finalmente del auto.

Meena pisó el acelerador a fondo y golpeo varias veces el volante mientras se alejaba.

Aoom estaba recargada contra la puerta de entrada de su casa tocando sus labios, recordando la sensación de aquel inocente beso y suspirando ¡Meena era tan hermosa!






























Holi, comenten si les está gustando la historia subiré el siguiente capítulo cuando todos los que he subido tengan 5 votos 😊😚.
Bye 😎.

"Soy Aoom"                                               (Meenbabe)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora