¿Casualidad o destino? - Juani Caruso y Blas Polidori

Y de pronto llegaste a mi vida

Juan (o como prefiere que lo llamen, Juani), es un chico que desde pequeño se mudaba de ciudad muy seguido, por lo tanto, siempre cambiaba de escuela, gracias a que sus padres viajan por trabajo. A sus 16 años, cuando por fin decidieron establecer un hogar más duradero, decidieron mudarse a Moreno, una ciudad en Buenos Aires, Argentina. Allí, a Juan lo anotaron en una escuela tecnica, segun su padre "para tener un buen futuro trabajando de albañil", algo con lo que no estaba tan de acuerdo, ya que desde muy chico, siempre habia querido ser cantante y tal vez actor, pero termino yendo de todos modos a ese colegio por que no queria tener nuevamente la charla de sus padres sobre como "se moriria de hambre" o de como eso no estaba en sus principios. Ya estaba harto de que no puedan aceptar sus deciciones y apoyarlo, supuso que si ahora hace lo que su padre quiere, tal vez en un futuro podria apoyarlo.

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Para su primer día en el nuevo colegio, se tuvo que levantar a las 6:00 am, ya que sus clases comenzaban a las 7:30, y entre que se arregla, desayuna, y que aparte el colegio le queda bastante lejos de su casa, se le hace tarde. Asi que apenas sono la alarma, se levanto, con ganas de pegarse un tiro, pero se levanto. Fue a hacerse un cafe para acompañar a unas galletitas de agua que encontro en una alacena. Cuando termino de desayunar, se fue a lavar sus dientes y luego se puso un bloqueador solar para el rostro que se lo habia robado a su mamá por que leyo que era bueno para la piel, se cambio, agarro sus cosas y se dirigio hacia la parada de colectivo.

Cuando llego el colectivo que se tenia que tomar, pago su pasaje y se sento en la parte de atras. Iba escuchando música, y mientras iban de parada en parada, se dio cuenta que se iban subiendo muchos chicos y algunas chicas que tenian su mismo uniforme, asi que ya fue analizando a los chicos que parecian de su edad, y, por lo tanto, serian sus compañeros de curso.

Luego de un tranquilo pero largo viaje, llego a su nuevo colegio. Al bajarse del colectivo, sintio unos nervios que nunca en su vida habia sentido, se le hizo demasiado extraño, ya que se habia acostumbrado a ser el nuevo a principio o a mitad de año, y no entendia por que ahora seria diferente. "Debe ser por que solo faltan dos meses para que termine el ciclo lectivo y yo me uno recien" penso, y logro convenserce a si mismo de que esa era la razón, pero en verdad no estaba seguro. Se dispuso a ir en busca de su salón, ya que solo faltaban 5 minutos para que empiece la clase, asi que se apresuro a buscarlo.

La escuela se dividia en dos pisos, asi que empezo por los salones de abajo. "Cuarto c, cuarto c..." repetia en susurros mientras recorria los pasillos repletos de salónes.

Y como estaba tan concentrado leyendo los carteles, no se dio cuenta de que un chico alto y de rulos, se acercaba a el desde la dirección contraria. "Segundo a, segundo b..." repetia el chico a medida que se iba encontrando con los carteles de los salones sin prestar atención a su alrededor. Y como era de esperar, ambos chocaron.

-¡Uy, perdoname, no te vi!- se disculpo el más alto al ver que cuando choco, termino tirando al de ojos claros.

-No, esta bien, tambien fue mi culpa.- respondio.

-¿Te ayudo?- pregunto el de rulos oscuros mientras le extendia una mano para ayudarlo. Juan, con ayuda del chico desconocido, se levanto del piso y alzo sus audifonos que estaban a su lado.

-Gracias.- dijo el de ojos claros con una sonrisa timida en los labios.

-No, de nada. Oye, ¿sabes donde esta cuarto c?

-Justo ese salón estoy buscando.

-Oh, que casualidad. Entonces, ¿lo buscamos juntos? Total estamos en la misma.

-Si, dale.- y entonces, ambos se pusieron a buscar el maldito salón.

Cuando por fin lo encontraron, tocaron la puerta, claramente la clase ya habia comenzado.

-Adelante.- se escucho desde el interior de la habitación.

-Permiso.- dijieron al unisono, mientras entraban avergonzadamente al salón.

-¡Ah, ustedes deben ser los nuevos!- dijo el señor que aparentemente seria su profesor mientras los miraba con los ojos entrecerrados, tratando de recordar sus nombres.

-Yo soy Juan, Juan Caruso.

-Yo soy Blas Polidori.- "Blas, hasta su nombre es lindo..." penso, no entendia por que de repente tenia esos pensamientos, pero le gustaba como se sentian.

El profesor chasqueo los dedos.- Eso, Blas y Juan seran sus nuevos compañeros, por favor, tratenlos bien.- los demas alumnos asintieron.- Bueno chicos, yo soy el profesor Ivan Ramos, pueden tomar asiento.

Se dirigieron hacia las dos mesas libres, y Blas le hizo un gesto para que se sienten juntos, a lo que Juan acepto.

-Un gusto, Juan Caruso.- dijo "formalmente" Blas, dandole un apreton de manos.

-Un gusto, Blas Polidori.- le acepto el apreton.

La clase paso rapida y ligera, para cuando pudieron darse cuenta, ya habia sonado el timbre del recreo.

-¿Me acompañas a comprarme algo para comer?, es que no llegue a desayunar.- dijo el más alto mientras sacaba algo de plata del bolsillo de su mochila.

-Claro, vamos.- entonces, los dos se fueron hacia la cantina, (cuando salieron del salón, cayeron en que ambos eran nuevos, asi que le tuvieron que preguntar a una profesora donde quedaba la cantina).

Luego de que Blas se haya comprado un paquete de galletitas, fueron al lugar donde creyeron que se hacia educación fisica, ya que era un patio grande en donde habian varias pelotas y cosas para entrenar, asi que se sentaron en una esquina para poder charlar.

-Es muy loco que ambos somos nuevos y nos terminamos chocando por no saber donde quedaba nuestro salón y ademas los dos somos de cuarto c, tipo ¡cual era la probabilidad!- exclamo el de ojos claros generando risas por parte del más alto.

-Muy loco, pero me alegra haberme chocado contigo, Juan.- de repente, ante este comentario, el corazón del contrario empezo a latir demasiado rapido, sentia como si pudiera salirse de su lugar.

-Por favor, decime Juani.- dijo tratando de disimular lo rojo que estaba.

-Esta bien, Juani.

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HOLAAAA, queria aclarar que en este fanfic tanto Blas como Juani tienen 16 años, y tambien que esta historia la voy a ir subiendo junto a la otra, asi que tal vez no la actualice seguido, pero voy a intentar hacerlo. Y tambien una disculpa por las faltas de ortografia, una paja me da eso.

Y nada, eso, espero que les guste esta historia por que me voy a esforzar para que sea buena y entretenida.

BUENO, ESO NOMAS, GRACIAS POR BANCARME, BYEEE <3