El Lobo y la Mamba

Cambio

Me desperté y lo primero que vi fue a Mamba preparandose para la escuela, cuando se da cuenta qué me desperté me da una pequeña sonrisa
y me saluda.

"buenos días Lobo, deberías de comenzar a despertarte si quieres llegar a clases hoy"

Mierda, era cierto que tenía que ir a clases, anoche Mamba me presto un poco de su ropa para dormir y puso mi uniforme en la lavadora, así que supongo que ya esta listo para empezar a arreglarme.

Me arreglo rápido y me despido de Mamba con un beso antes de salir por la puerta y dirigirme a la escuela.

Hoy después de la escuela tenía que amenazar a un tipo que ni siquiera conocía qué seguramente estaba metido en algún negocio con Donald, estaba comenzando a cansarse de ser "el perro de Donald", de tener que seguir sus ordenes, había entrado a la Unión para tener libertad, pero sentía que mientras más dentro estaba más libertad perdía, no le interesaba la mierda de negocios o cosas turbias en las que estuvieran metidos Donald o la Unión, solo seguía las órdenes porque aunque no le gustara, sabía que Donald era más fuerte que él y de alguna manera podía entrar en peleas y descargar su adrenalina y odio contra los demás sin salir perjudicado.

Talvez el estilo de Mamba sea mejor, sin estar dentro de la Unión o cualquier otra pandilla, él y todos esos idiotas buenos en peleas en Eujang que nunca se unieron. No tiene que seguir reglas como la de no meterse con los demás miembros de la Unión, ni estár por debajo de nadie, si entra en una pelea o no lo decide él, no alguien que lo mande o que sea su jefe, no tiene que seguir a nadie más que a él mismo, eso era lo que siempre a buscado y busca Lobo.

La libertad, ser el mejor entre todos, el solo serle fiel a él mismo. Sigue siendo su objetivo, pero talves ahora hay alguien en su vida al que si quiere seguir, alguien con el que quiere caminar y luchar codo a codo, alguien por el que podría rebajarse y seguir esas estúpidas cosas como reglas o instrucciones.

Esa persona era Mamba, el chico que en tan poco tiempo le estaba dando una vuelta a su mundo, sus pensamientos y sus ideales.

Un cambio en su vida que nunca pensó que llegaría, porque ¿como él llegaría a estar tan perdidamente enamorado de ese idiota? Ni siquiera el mismo lo sabía.

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Cambio.

La palabra que ahora mismo describía su vida.

Transferirse a una nueva escuela, interactuar con nuevas personas, comenzar a meterse en peleas, ganarse una reputación y la gota que derramó el vaso, ahora salía con un chico, y no cualquier chico, salía con Lobo Keum, alguien que no hace mucho tiempo no cruzó jamás de esa manera en su mente.

Su vida daba vueltas en muchas direcciones, y ni siquiera sabía si quería que siguiera así o no.

Antes solo tenía una cosa en mente, sus estudios, sacar buenas notas y ser el mejor. Algo que sigue estando muy presente en su cabeza, pero ahora habían más cosas que pensar, muchas más de las que creía.

Sus nuevos amigos, su nueva relación, sus técnicas de pelea, ese hijo de puta
de Donald, la Unión, mierda, la Unión, una de las cosas que últimamente más ocupaba su mente.

La Unión, con la que ahora mismo estaban prácticamente en guerra. Lo peor de todo, Lobo estaba dentro de ella.

Hasta este momento nunca fue algo que pensé demasiado, ambos lo sabíamos, pero ninguno hablo de eso por alguna razón.

Quizá simplemente estaban demasiado concentrados en su relación, en que funcionarán juntos por más raro que parecieran, en ir encerio el uno con el otro, como para que eso les importara.

Después de todo, así fue como se conocieron, peleando contra el otro, Lobo como parte de la Unión y él como parte de Eugang.

Y así fue como iniciaron una relación juntos y como aún la mantienen.

Quería acabar con la Unión, con Donald, era su objetivo ahora. Se sentía bien, se sentia con la libertad de hacerlo, con la libertad de tomar decisiones por su cuenta y no solo seguir la corriente de lo que sucediera.

No dejaría que sus amigos volvieran a salir lastimados, mucho menos Eugene que ni siquiera sabía pelear, y estaba metido en esta mierda por su culpa.

No velveria a cometer los mismos errores del pasado, no otra vez.

Quizás la próxima vez hable de esto con Lobo, pero realmente no sabía si quería hacerlo, estaban bien hasta ahora a pesar de ese tema. Y sabía que Lobo se sentía bien en la Unión, o almenos era lo que suponía. Sabía como pensaba Lobo, alguien que quería libertad y lealtad a él mismo y parecía que en este momento la tenía. Quizá fuera de la Unión no sería igual.

Y por muy loco que sonara incluso para él mismo, talves no le importaba tanto si Lobo era parte de la Unión con tal de seguir juntos y con tal de que Lobo siguiera siendo Lobo. El chico del que ahora mismo estaba completamente enamorado y loco por él.

Un chico obsesionado con las peleas y la adrenalina.

Así lo describiría Gray en pocas palabras, pero ahora había una palabra más a esa descripción "su novio". Y de toda la descripción, definitivamente era su parte favorita.

Lobo tenía muchas partes y capas, y quería entenderlas todas, conocerlo completamente, desde la parte en el que su único interés era meterse en peleas, hasta la parte de él que podía ser totalmente dulce y comprencibo. Y por supuesto mostrarle también sus propias capas.