Capítulo 23

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—¿Deseaba verme?— Cedric entró a la choza, después de que la madre de Lelie lo hiciera.

El padre de Lelie observó a Cedric y liberó un poco de su temperamento, uno que puso a temblar al temperamento de Cedric —Entonces, ¿Tu eres el alfa de Alexi?

—Así es— Cedric no dejó que aquel alfa lo intimidara y, en su lugar, se mantuvo firme en todo momento —Rey Cedric de Wood— estiró su mano y trató de estrecharla con la de aquel alfa.

—Alanía, líder de la tribu red sky— el padre de Lelie estrechó la mano de Cedric. —¿Llevará de vuelta a Alexi?

—Si, por supuesto. Alexi debe volver a casa, pero primero debe recuperarse por completo antes de partir.

—Está consciente que la niña omega que acompaña al heredero es su hija también, ¿Verdad?

—Lo se, Lelie lo dijo. Voy a llevarlos a todos de vuelta a casa.

—¿Si me rehúso a dejarlos partir? ¿Cómo estaré seguro de que ellos estarán bien contigo?

—Estaran mejor allá que aquí. Lo siento, pero mi primogénito, mi hija y mi omega deben estar a mi lado. He estado buscándolos por años, ahora que los encontré no los soltaré fácilmente— Cedric se acercó un poco más a dónde el padre de Lelie se encontraba —Si quiere una guerra, le daré una guerra.

Alanía comenzó a reír —No me atrevería a tanto. Sé que perdería en el primer momento, solo quiero que sepa que si Alexi se rehúsa a partir estaré de su lado y tomaré cualquier consecuencia.

—Convenceré a Alexi sobre esto, no debe preocuparse por las posibles consecuencias, estoy seguro que no existirán— Cedric sonrió —Pero en cambio, quisiera hacer una alianza que nos beneficiará a ambos.

—Interesante— Alanía prestó atención —Continúe.

—Hay problemas avecinandose en la capital y Alexi corre peligro, una reina que abandona su posición y huye no es una buena acción frente a la corte. Ellos no deben enterarse sobre esto o inmediatamente mandarán a mi omega a la orca, así que la alianza constara de un trato, usted me entregará a Alexi en matrimonio y yo lo protegeré de su enemigo, es un buen trato, ¿No?

—Eso es interesante, pero, ¿Cómo aseguraré a mi tribu?

—Mi ejército es confiable, si quisiera matarlos, ya lo habría hecho, pero estoy pagando su buena acción con protección.

—Si acepto su trato, ¿Que pasará en el futuro?

—Buena fortuna para usted y para mí, claro.

—Es una difícil decisión, arriesgo a mi tribu entera.

—No se preocupe, líder de tribu. Yo mismo me encargaré de asegurar a su tribu. Nada malo les sucederá mientras estén en alianza conmigo.

—Si acepto pondré condiciones. Una alianza no se toma a la ligera y, ¿Un matrimonio? Alexi ya es su reina de todos modos.

—Aceptaré cualquier condición, solo porque usted fue benevolente con mi omega— Cedric se puso de pie —Dejaré que piense minuciosamente su respuesta— comenzó a caminar hacia la puerta —Si me disculpa, regresaré con mi omega ahora— salió sin dar otra palabra.

En seguida comenzó a caminar hasta encontrarse con Alexi. Entró a la choza y se acercó a dónde el Omega reposaba —¿Cómo te encuentras ahora, cariño?— Cedric preguntó.

—Estoy mejor— Alexi sonrió —Todo es gracias a ti— en seguida se puso de pie y se acerca a dónde Cedric se encontraba. Rápidamente se abalanzó hacia él y lo abrazó —Perdoname— susurró.

Cedric correspondió al abrazo de Alexi y liberó su aroma —Tranquilo. No hay nada que perdonar— besó su frente y luego tomó su mentón.

—Volvamos a casa— Alexi susurró —Quiero estar a tu lado, ya no quiero huir más, quiero ser feliz a tu lado y al lado de nuestros hijos.

Cedric mostró una sonrisa —Para poder volver a casa primero tienes que recuperarte— Cedric tomó a Alexi y lo levantó del suelo, lo cargó hasta la cama, lo recostó y lo arropó —Descansa, cariño— se acercó a su frente y le depositó un beso.

—Pero, me siento mejor— Alexi trato de ponerse de pie —Debo ver a nuestros hijos.

—No es necesario, Lelie y su hermana cuidan de ellos, Lucius también está cuidandolos.

El bullicio comenzó a formarse fuera de la choza, una mujer desesperada caminaba rápidamente hacia donde Cedric y Alexi se encontraban. Cuando llego a la choza entró y miró al omega que reposaba en la cama.

—Gracias a los dioses— la mujer se acercó —No creí que fuera cierto, mi hermano menor ¿En este lugar? ¿Sabes cuánto te busque? ¿Creí que esa banda de criminales te había vendido a algún reino enemigo ¿Sabes lo preocupados que nos encontrábamos?

Alexi miró a Cedric, esperando una explicación. No entendía lo que su hermana quería decir —Eh...— trató de hablar, pero la chica no se lo permitió.

—¿Estás bien?— comenzó a revisar el cuerpo de su hermano —¿Estos salvajes no te lastimaron?— concluyó su revisión, aliviada de ver a su hermano en buenas condiciones. Miró a Cedric —Fue un martirio poder llegar aquí, me alarme cuando ví que tomamos la ruta por dónde los bandidos nos emboscaron la última vez, creí que volvería a pasar, pero me alegro de llegar con vida hasta este horrible lugar.

Alexi miró hacia la puerta, en dónde su madre y padre se encontraban estáticos. Se puso de pie y corrió hacia donde se encontraban, se abalanzó y los abrazo —Mi amado hijo— su madre susurró, con el llanto a punto de salir.

—Los extrañe tanto— Alexi dejó salir sus lágrimas.

Sus dos hermanos mayores también entraron a la choza y se unieron al abrazo. —Hey— Nora caminó a donde los cinco se encontraban —No me excluyan, también quiero abrazar a mi querido Alexi.

—Mamá— Yulia y Christoph llegaron a la choza —¿Estás mejor?— la niña preguntó.

Alexi se soltó del abrazo y miró a la pequeña —Por supuesto, la planta de Gullu que le diste a Lelie funcionó.

—Me alegra mucho saberlo, mañana por la mañana iré con Lelie a recoger más.

—Muy bien.

El pequeño Christoph se acercó a Alexi y lo abrazó —No vuelvas a preocuparnos de este modo, Dukum y Lelie no me dejaron ir a buscarte, así que Yulia y yo estabamos  muy preocupados por ti.

—No lo haré— Alexi se rebajó a la altura del pequeño y besó su frente —Nunca más lo haré— susurró.

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