I⃨I⃨I⃨

13 4 1
                                    

Pase la noche con Cliff. Ambos nos quedamos dormidos en el cobijo que el árbol nos ofrecía. En realidad me costó un poco conciliar el sueño, no podía sacar de mi mente a ese rubio; lo sé, no lo voy a volver a ver en la vida, pero es que ese contacto visual fue algo que no tengo manera de explicar, simplemente es como si me hubiera amarrado a él con ese simple hecho.

Seguí pensando en él durante un rato, pero de una manera más a broma, solo como cuando haces eso de imaginarte con alguien con quien no tienes ni la misma posibilidad, ya sabes, tu y esa persona en una casa, como se verían tus hijos, estupideces.... Supongo. Caí dormida de tanto imaginarme con ese chico hasta que comencé a sentir los rayos de sol en mis ojos y fue entonces cuando reaccioné.

-CLIFF!! CLIFF!! CLIFFORD! DESPIERTA!- Le insistía, mientras lo movía desesperadamente.

-Que? Qué te pasa? Por qué me despiertas... ah?

-Cómo que por qué? Date cuenta, deben de ser como las seis de la mañana y seguimos fuera. No creo que a nuestros padres les agrade saber que es nuestra primera noche aquí y ya nos embriagamos.- El seguía tallándose los ojos mientras trataba de enfocar su vista.

-En verdad crees que se enojen tanto? Digo, el árbol es bastante cómodo, además podríamos decir que madrugamos para salir a explorar o una estupidez así.

-Cliff, necesitamos descansar, seguro hoy vamos a desempacar y comenzar a acomodar todo, anda, hay que entrar.- Me paré y le ofrecí mi mano para ayudarlo a levantarse.

Nos levantamos y recogimos las latas que yacían en el césped vacías. Abrimos sigilosamente la puerta de la casa, era un poco ruidosa por lo vieja. Caminamos hasta subir las escaleras; pero notamos una pequeña sombra corriendo en dirección al fondo del pasillo, estaba amaneciendo pero la casa aún era algo oscura. Cliff frenó en seco después de haber visto esa sombra.

-Val... viste eso?

-Ver qué Cliff, ver qué?- Lo admito, también pasó por mi mente que no era algo normal ver eso a estas horas, no quería pensar en actividad paranormal, quiero decir, trate de mantenerme al margen para que no empezáramos a darle tantas vueltas al asunto y no poder descansar por la curiosidad y la intriga.

-Vamos, estoy seguro de que viste esa mierda, vamos a ver que es, no puedo dormir aquí sin asegurarme de que eso sea inofensivo.- Me tomó por la muñeca y me jaló hasta el fondo de la casa.

No habia nada, eso era más que obvio.

-Cliff, vámonos, solo nos estamos sugestionando, quizás estamos demasiado ebrios y eso ni siquiera es real, solo piénsalo es casi... AAAAH!.- Sentí una manita tomando mi meñique, y al mismo tiempo hice que Cliff se asustara por eso y soltó un grito parecido al mío.

Ambos volteamos a todos lados, buscando que carajo había sido eso, y a mí se me empezaba a revolver el estómago, no acostumbro tomar pero esta vez lo sentí casi como algo necesario. Hasta que con un poco de trabajo logré ver que era Dean. Cliff se acercó a él y lo cargó.

-Que se supone que haces a estas horas? Deberías de estar dormido pequeño.- Le dijo Cliff mientras lo miraba a los ojos.

-Yo solo quería un poco de agua, pero creo que no hay. Puedo dormir con ustedes? Me da miedo estar en ese cuarto feo, trate de dormir con mamá pero solo me volvió a arropar en mi cama.

Le hice una seña a Cliff de que yo me encargaba de nuestro hermanito, ya que él estaba más borracho que yo, y no creo que sería buena idea que él lo tuviera al lado, además era más probable que hiciera alguna estupidez y Dean nos delatara.

Subimos las escaleras, Cliff fue a su habitación y yo me dirigí junto con Dean a la mía, l nos acostamos en la cama y estaba a punto de dormir hasta que escuché un:

-Hermanita

-Eh? Ocurre algo Dean?

-Que estaban haciendo? Por qué no me llevaron? Ya no me quieren?.- Pude escuchar como empezaba a lloriquear.

-No! Noo! Que dices mini, estábamos haciendo... eh... algo importante, eh... teníamos que supervisar que... que... eh.. Que Jason Vorhees no estuviera cerca de la casa, ya sabes... PERO NO LE DIGAS A NUESTROS PADRES! Es una misión súper secreta, ellos no lo pueden saber.
Es un secreto de hermanos, lo entiendes no?

-Am... si! Y lo encontraron??

-Claro, lo pusimos en un autobús y ahora está en... Rusia! Muy lejos de aquí, lo suficiente como para que puedas dormir tranquilo.

-Está bien, buenas noches Vali.- Si, tener un hermano menor es entender que a veces ni siquiera se va a esmerar en pronunciar bien mi nombre.. como sea, lo quiero.

Estaba a punto de conciliar el sueño, pero de repente llegó a mi nariz otra vez ese olor, no sabía si estaba dormida, o era el alcohol, pero era como si tuviera a ese chico enfrente de mí de nuevo, me estaba empezando a hartar, toda la noche pensando en un desconocido? Ni siquiera tiene sentido esto, quiero pensar que simplemente es el efecto del alcohol sobre mi. Pero es que en verdad, esa belleza tan particular, no tengo manera de resistirme.

Debo de descansar de estos pensamientos, tratar de dejar esto de lado, si, lo vi y que, en ningún momento va a ser algo de mi... a menos de que... tal vez no sea tan mala idea proponerme el reencuentro con el. O tal vez es mejor idea dejarlo en el olvido de una vez por todas, que más da, solo es un hombre más, de que me estoy perdiendo? Además, que tal que lo estoy idealizando y ni siquiera me cae bien. Tonterías y más tonterías, ya es hora de descansar un poco por hoy.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jul 25 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Die, Die, My Darling [James Hetfield]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora