Marta Oliver
Acabo de vestirme y me escribe Jude.
—————————————————————————
judeya estoy abajo
okey
bajo ya—————————————————————————
Cojo el bolso, donde están guardados mi móvil, las llaves y mi cartera.
Salgo del portal y veo a Jude vestido con ropa mucho más elegante de la que le vi en el hotel fuera de un coche con la puerta de atrás abierta.
Al verme levanta las cejas con un gesto sorprendido.
"Y yo que pensaba que ya estabas guapa en pijama". Dice cuando me acerco lo suficiente para oírle.Sonrío y me meto en el coche mediante la puerta que me está abriendo.
Llevo un conjunto de un top negro de tirantes y una falda corta del mismo color. Me he hecho un moño mucho más arreglado que esta mañana y he acabado el outfit con unos aros grandes en las orejas.
Jude abre la puerta del asiento de mi lado y se sienta.
"Pensaba que conducías tú". Comento mientras me abrocho el cinturón.
"No me gusta conducir". Responde.
"Estás loco? Conducir es lo mejor que me ha pasado". Replico nada más oigo esas 4 palabras.
"Pues a mi un coche es lo peor que me ha pasado". Dice y la conversación coge un tono mucho más serio.
"Lo siento". Digo susurrando.
"Pero esta noche no estamos para penas, estamos para pasarlo bien, no?". Dice y fuerza una sonrisa mientras apoya su mano en mi muslo.
No se porque este contacto no me parece nada incómodo. Normalmente si me parece incómodo pero con él no."Te voy a presentar unas amigas". Dice tras unos minutos de silencio.
"En el sitio al que vayamos?". Pregunto.
"Si. Creo que necesitas amigas". Comenta.
"Perdona? Te estás oyendo? Me bajo ahora mismo". Digo.
"Algún problema?". Pregunta.
"No necesito que me buscas amigas". Digo.
"Yo creo que si. Ayer te subiste a la habitación a las 23:00. Una chica de 20 años no se tendría que subir a la habitación de su hotel a las 23:00". Responde.
"O sea estamos ahora aquí porque te doy pena". Aclaro.
"Nono, ni de coña. Estamos aquí en los asientos de detrás de mi coche porque me pareces súper guapa y me caíste muy bien". Dice mirándome y sonriendo.
"Bueno, hablaré con esas amigas tuyas". Acabo sin solución.
"Cuéntame algo tuyo". Dice tras otros minutos de silencio.