Sobrevivir como mago en una academia de magia

Capítulo 10

"¿Es así, profesor?" Yi-Han no dejó que sus emociones se reflejaran en su rostro. Habiendo tratado con profesores excéntricos más de una vez, no era tan ingenuo como para dejarse influenciar fácilmente. Pero lo que salió de su boca fue: "Creo que con pasión y afecto, uno puede obtener buenas calificaciones en las clases de alquimia".

"Debo asegurarme de no volver a asistir a esta conferencia una vez que termine".

"¿De verdad piensas eso?"

El profesor Uregor se acarició el bigote con expresión complacida.

"Entonces toma este curso".

"...todavía no he asistido a otras conferencias..."

"Ah, no importa. Sólo toma este curso. Otras conferencias no serán mejores que ésta".

"No, necesito atender a otros y..."

"¡No! ¡Debes tomar este curso!"

Yi-Han empezó a sentir que había cometido un error.

Otros estudiantes cercanos miraron a Yi-Han con envidia.

-'La familia Wardanaz en efecto...'-

-'Qué talento tan inmenso...'-

"Esto realmente me está poniendo de los nervios".

El profesor Uregor miró a su alrededor y anunció:

"La conferencia de hoy termina aquí. Desafortunadamente, el grupo que fue a otra parte no pudo encontrarse con el cerdo".

"..."

"...Profesor, ¿intencionalmente nos hizo encontrar al cerdo?" Uno de los estudiantes preguntó con voz mezclada con asombro.

Aunque se llamaba cerdo, era prácticamente un monstruo. Si hubieran tenido mala suerte, podrían haber terminado con huesos rotos u órganos rotos.

El profesor Uregor respondió con naturalidad:

"¿Pensaste que te envié sólo a recolectar hierbas? Por supuesto, también debes enfrentar situaciones que surgen mientras las recolectas".

"Eso... eso es..."

"De hecho. Piénselo. ¿Crees que el profesor nos enviaría sin ninguna preparación? Debe habernos estado siguiendo".

"Ah..."

Al escuchar esto, los estudiantes parecieron convencidos. Ciertamente...

"De ninguna manera. ¿Por qué debería seguirte?"

El profesor enano los miró como si estuvieran diciendo tonterías.

"Vine aquí porque el cerdo se desplomó".

"¡¿Pero y si hubiera un accidente grave ?!"

"Entonces te falta talento para la alquimia."

"..."

"..."

Yi-Han sintió como si pudiera escuchar los pensamientos de los otros estudiantes.

'¡Ese hijo de...!'

"Ya sea que lo atrapes, lo evites, huyas o te escondas, manejar todas estas situaciones inesperadas es el talento de un alquimista. ¿Entendido, cabezas de hierro?"

"¡Sí!"

"¿Entonces no necesitamos la Hierba Purificadora?" Yonaire levantó la mano con cautela para preguntar. El profesor Uregor pareció sorprendido.