Capitulo 4

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Jadier

Me desperté temprano para ir a solucionar el dichoso problema de Sheila, que ya bastante harto me tiene con sus problemas.

Pero la bella durmiente de Victoria no se despertaba y ya quería salir de ese tema, no tenía ni idea de que zapatos hablaban solo se que cada que ellas salen siempre llegan con bolsas y cosas nuevas así que no me sorprende.

Entre a la habitación y fui directo a la cama y me acerque al oído de Vick.

-Ya levántate o si no no te acompaño.

Se despertó de golpe y tenía una sonrisa.

-Perfecto hablaré con Math el no me va a poner peros.

Me sorprendió que dijera eso ya que claramente es una arma de doble filo.

Math y yo jamás, jamás nos hemos llevado bien nunca quisimos ser amigos ni nada ya que el siempre quería estar con Victoria y eso me fastidiaba, y no sabía porque.

-Mejor cállate, quieres.

Me volteo los ojos y se levantó de la cama llendo al armario y en eso.

-Shittt!!!

Tremenda palabrotas aunque me gustaba más cuando la decía en español, me causaba risa oírla decir eso.

-Ahora que tienes.

- Dónde está mi ropa?

Marina había estado buscando sus zapatos y en eso ordenó que sacarán todo de todos los armarios y que de paso los mandarán a la lavandería.

-En la lavandería.

-Y tu cómo tienes ropa, ah?

-Porque yo si madrugue.

Era verdad me había despertado por la bulla de Marina y por eso alcance a tomar una sudadera y otras cosas más para el día y la dichosa cena. Ya que la ropa llegaría el día de mañana en la tarde.

En esa cena estaría la familia de el tarado de Math.

-Y ahora que voy a usar no tengo nada para la noche.

-Odio hacer esto pero...-Me saque la sudadera que traía puesta y se la di.-Pontela.

La miró por un rato y me volteo a ver.

-Y mi ropa interior?

-Vick, ponte la sudadera y mientras vamos buscando esos dichosos zapatos compramos lo tuyo.

Y con eso entro al baño y se tardó medio hora en arreglarse mientras yo veía unos papeles.

Salió de el baño y me volteo a ver algo nerviosa.

-Te la devolveré.

Me quedé callado por un minuto, ví que traía unos shorts mi sudadera el pelo recogido y un maquillaje no tan cargado y sus ojos azules resaltaban con la sudadera.

-No te preocupes, puedes usarla cuando quieras.

No dijo nada y salimos de la habitación, pasamos por el pasillos y bajamos las escaleras.

Ví de reojo a Sheila y no dije nada solo seguí a Vick.

Nos subimos al auto y salimos de el garaje.

-¿A dónde vamos a ir?

Se quedó pensando un momento y dijo:

-A la plaza ay creo... Creo que puede haber algo.

Acelere el auto y en todo el camino no dijimos nada.

VERDADES PIADOSAS Where stories live. Discover now