Un joven humano llamado Arthur, perteneciente a la Inglaterra de los 1900's, después de una ajetreada tarde conviviendo con la alta sociedad de su vecindario, decide descansar un poco en el bosque donde se encuentra un misterioso libro de hechicería...
A la entrada de la mansión del anciano Frederick, había llegado una extraña figura encapuchada de pies a cabeza.
Al abrir la puerta y entrar a la casa, pudo ver cómo todo estaba desordenado y fuera de lugar.
El ente, sin tocar nada de lo que estaba en el suelo, para no alertar a nadie de su presencia, subió las escaleras hasta llegar a la biblioteca del anciano.
Al entrar a la habitación, a un costado vió a la criatura que atacó a Arthur, Valki y Chellsy hacia rato, tendida sobre el suelo con quemaduras, resultantes de la red que lo secó.
Pasaron unos minutos, y el encapuchado regreso con un recipiente lleno de agua, que derramó en la boca del monstruo, haciendo que solo la cabeza regresará a la vida, rehidratandola.
El monstruo al recobrar la conciencia, miro a todos lados con la esperanza de encontrar a sus enemigos, pero en su lugar se encontró con el encapuchado al que dijo:
Haaa, ya veo, llegaste pronto got!, pero ¿por qué no rehidrataste el resto de mi cuerpo?- pregunto el monstruo mirando al encapuchado a los ojos.
Por qué no vine a revivirte, la orden ha hablado, tú dejaste de importarles hace ya varios años, solo que esperaron el momento perfecto para deshacerse de tí- dijo mientras de su espalda sacaba un cuchillo muy peculiar.
¿Qué?- dijo el monstruo confundido y sorprendido.
Así es, solo querían que cumplieras un último trabajo por ellos, no fue un gusto, ahora que mi mano te libere de tu labor- dijo el encapuchado clavando el cuchillo sobre la cabeza del monstruo.
Incinerandolo, convirtiéndolo en cenizas sin darle el tiempo de pedir ayuda.
El encapuchado guardo el cuchillo de nuevo en su lugar, para después dar media vuelta y salir de la habitación, rumbo a la entrada, antes de girar la perilla, se percató de qué ahí había restos de algún hechizo así que dijo:
Akswr balakui haugentum saliseu viles- mientras colocaba un sello en la perilla.
Al terminar su hechizo, giró la perilla y al abrir la puerta del otro lado se encontró con el mismo bosque al que Arthur, Valki y Chellsy habían cruzado para llegar a la espada.
El encapuchado, descubrió su cabeza, revelando ser un hombre lobo de complexión delgada, pelaje negro con gris, cabellera abundante aparte de salvaje, de manos y garras grandes y ojos azules.
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El lobo sobre su mano encendió una esfera de fuego blanco, posteriormente cerró su puño para después colocar su mano sobre la tierra, al hacer esto una esfera de luz blanca se expandió a gran velocidad, y pasados unos segundos, detrás de él salieron tres siluetas luminosas pertenecientes al joven Arthur, Valki y Chellsy, el hechizo era una ilusión que permitía ver el pasado.
