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Después de la reunión regresaron a casa, a katsuki lo vio un doctor y el menor se quedo más tranquilo; Después de haber dormido apropiadamente y haber comido como era debido, Katsuro repasaba su comportamiento de esa mañana y...digamos que no la estaba pasando bien

—mierda...¿por qué dije eso? ¿Explotarle la cara al héroe deku? Kami, si el hubiera querido pudo haberme reiniciado la existencia con un smash—dijo avergonzado
—ya deja de preocuparte por lo que dijiste e hiciste, estoy segura de que no fue tan malo—intentó tranquilizarlo su abuela
—le dije a Sanemi Shinazugawa, el jodido jefe de la policía, que me gustaba su hermano...¡su hermano! Quiero morirme, me gustaría morirme ahora mismo—

Escuchó a sus abuelos reírse y solo pudo encogerse más en su asiento, había estado tan agotado esa mañana que realmente no había sido consciente de su comportamiento, su hilo de pensamientos se cortó al escuchar una campana en el segundo piso

—ugh, el terco de tu padre, debió aceptar que lo regresáramos al hospital— se quejó mitsuki
—déjame ayudarlos, abuela, estuvieron toda la tarde pendientes de ambos, también deben descansar— dijo el menor mientras se levantaba
—¿estás seguro? Nosotros podemos hacerlo, fueron muchas emociones para ambos—
—puedo hacerlo, no te preocupes—

El menor besó la mejilla de mitsuki para tranquilizarla y se dirigió a la habitación de su padre, quien se encontraba en cama leyendo un libro

—al fin, vieja bruja, te estás haciendo lenta— dijo sin desviar la mirada de su libro
—¡oi! ¡La abuela hace lo que puede, tu eres quien debería ser más cuidadoso, viejo!— regañó el menor

Katsuki soltó una risita y extendió sus brazos al menor quien rápidamente olvidó su enojo y abrazó a su padre

—...¿cómo te sientes?—preguntó después de un rato
—mejor, sabes que esto de estar en cama no es lo mío pero no me duele nada así que no me quejo—

El menor asintió y se alejó un poco, quedando sentado a un lado de katsuki

—¿que necesitabas?—
—tengo hambre pero ya que estás aquí, necesitamos hablar de algo importante—
—¿mmh? ¿Que pasa?—
—tu examen de ingreso está cerca y no quiero que tu entrenamiento se vea interrumpido por mi estado—dijo mientras agarraba su celular
—viejo, está bien, puedo hacerlo solo, no te preocupes por eso—le restó importancia
—solo quiero asegurar tu lugar lo más posible, por eso quería preguntarte algo...¿te gustaría que le pida a endeavor que te entrene? ¿O tal vez aizawa-sensei? Se que no tendrán problem—katsuki fue interrumpido por el grito de un muy avergonzado Katsuro
—¡NO! E-es decir...e-estoy bien así, viejo, de verdad—

Katsuki no insistió más y permitió que su hijo se retirará, después de unos minutos fue su madre quien entró a la habitación, dejó una bandeja con su cena en la mesita de noche y se sentó junto a él, le pareció extraño que no hablara, pasaban los minutos y mitsuki solo lo miraba, hasta que llegaron a un momento en el que el rubio no pudo más con la presión y el silencio incomodo

—¿que quieres, vieja bruja?— dijo dejando su libro a un lado
—nada ¿no puedo solo contemplar a mi hijo un momento? Se que tú haces lo mismo—habló inocente
—no me estás contemplando, quieres decirme algo que me va a hacer enojar ¿no es así?—gruñó
—solo...¿no crees que es hora?—dijo mientras se levantaba y caminaba hacia la ventana del cuarto
—¿hora de que?—preguntó confundido
—tu e izuku tenían el sueño de hacer una agencia y-y—katsuki la interrumpió sabiendo a donde iba la conversación
—no— negó firmemente
—pero— volvió a interrumpirla
—ese sueño lo enterré con todos los que tenía junto a izuku, solo me concentraré en mi carrera como héroe y en mi hijo, fin.de.la.historia—sentenció con el ceño fruncido

The Next Heroes Donde viven las historias. Descúbrelo ahora