Capítulo 4

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" Mierda! ", maldijo Jisung cayendo al suelo.

"¡Eres un cochino pervertido!", lo regañó Félix.

"¿Qué?", Preguntó, tratando de razonar con claridad.

"Tienes exactamente...", miró su reloj de pulso, "15 minutos para prepararte", dijo el pecoso, saliendo de la habitación dando un portazo.

Han, todavía en el suelo, trató de pensar con claridad, después de todo el sueño que había tenido con ese Dionisio lo había dejado absolutamente acalorado y sin aliento.

“¡HAN JISUNG ME PARECE BUENO QUE YA TE ESTÉS DUCHANDO!”, gritó el amigo desde la sala.

Han se levantó rápidamente y corrió al baño, desnudándose lo más rápido que pudo, sin siquiera detenerse a notar las marcas en su cuello y clavícula. Tomó un baño rapido y salió rápidamente del baño.

Se vistió apropiadamente, agarró sus cosas, se arregló los mechones platinados con la mano y salió de la habitación.

“¿Vamos?”, le preguntó a su amigo.

"Tu merienda", dijo Félix, entregándole un sándwich.

Han lo aceptó y pronto ambos comenzaron a salir del apartamento, Jisung pasó por la tienda de su padre, dándole un abrazo al hombre mayor y deseándole un bien día.

"Ahora estoy más seguro que nunca de que necesitas un novio urgentemente", comenzó el moreno.

“¿De qué estás hablando?”, fingió no entender.

"Hannie amor, sabes que eso no funciona conmigo. ¡Además, te vi! Estabas teniendo un sueño erótico", comenzó a reír.

"¡Ya! ¡No te burles!", Hizo un lindo puchero. "Al menos era atractivo"

Félix, que se reía, se detuvo de repente con una expresión de miedo en su rostro. Pues escuchar a Han decir que alguien era atractivo fue algo extremadamente nuevo.

"Ah sí?, dime que lo conozco?", volvió a sonreír.

"No, no lo conoces", habló en voz baja.

Llegaron a la parada de buses, y en medio minuto llegó el de ellos.

"Sabes, Changbin debe tener un amigo, tal vez él te lo apresente"

"Lix, agradezco tu preocupación, pero no quiero a nadie"

"¿Ni siquiera el chico de tus sueños?"

Han permaneció en silencio, no había manera de negar que este Dionisio realmente lo había atraído, para los dioses era ardiente, hermoso, atrevido y... Él no existe, pensó para sí mismo, tal vez fue el fruto de tu fértil imaginación y de unas hormonas descontroladas que.......

"Ji, ¿qué es eso en tu cuello?", Preguntó Félix aproximándose.

" ¿Qué? "

"¡Han Jisung! ¡Estoy preocupado por ti aquí, pero ya tienes un pretendiente y no me lo dijiste!", gruñó el pelinegro.

"¡No sé de qué estás hablando Lix!"

Félix, rojo de ira, abrió su mochila, sacó un pequeño espejo y se lo entregó a su amigo.

"¡Mira, cínico!"

Han tomó el espejo y se miró, asustándose de inmediato. ¡¿Qué carajos era eso?!

" ¡¡Dios mio!! "

"¡Ni siquiera vengas con la excusa de que es una reacción alérgica! ¡Porque no eres alérgico a nada que yo sepa!", Entrecerró la mirada hacia su amigo.

Han Jisung y El Hijo De La LunaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora