I FOUND A LOVE, FOR ME (CHAESOO)

CAPÍTULO 13: EL RECHAZO DUELE

Cuando la noticia de la relación de Jennie Kim y Lisa Manobal se había dispersado como pólvora por todos los medios, la gente se volvió loca y constantemente se preguntaban... "¿Cómo alguien tan bueno y puro como lo era Lisa, salía con el mismísimo diablo?"

Todos conocían a Lalisa Manobal por ser la guapa y perfecta cantante de pop, con un rostro angelical que poseía una belleza increíble, un corazón enorme, embajadora de marcas de lujo y la chica más amada de Sur Corea.

Cada que se escuchaba el nombre de la cantante, se sabía que vendrían cosas buenas como: "Lisa hizo un donativo a la fundación para niños con cáncer" "Lalisa, la nueva embajadora de Celine" "Lisa Manobal alcanza el puesto número uno junto a Im Nayeon en el listado de las mejores canciones del mes" ... Era en todo el sentido de la palabra, la definición de perfección y nobleza.

Por otro lado, estaba Jennie Kim; el antagónico de la relación...

"JENNIE KIM, ¿LA DESHONRA DE 'KIM'S ENTERTAINMENT'?" Ese era el titular de una de las noticias más recientes en los foros de espectáculos. Y sí, era bien sabido que Jennie no era una santa como lo era Lisa...

La neozelandesa, es una chica que vive como la típica ricachona y egocéntrica que desparrama el dinero de papi en fiestas o cosas sin sentido, es voluble: en algunos momentos esta irradiaba luz y en otros tiraba humo por las orejas; las constantes peleas con los paparazzis y lo más destacable, se le veía a un chico diferente cada semana, pero en sorpresa de todos, ninguno de ellos era pareja oficial.

Ciertamente, Jennie era una persona que vivía y gozaba de su juventud como se le daba la gana, su vida se dividía en: de viernes a domingo, ir a un buen club, embriagarse con las mejores botellas hasta perder la conciencia y buscar a su próxima presa para pasar la noche juntos. Y de lunes a jueves, hacerle la vida imposible a su manager, quien trataba de que la imagen y popularidad de Jennie se mantuviera intactas.

Pero, fuera de todo eso; Lisa realmente amaba a Jennie, se desvivía por ella y la surcoreana cada que podía le hacía saber a la pobre tailandesa cuanto la odiaba y detestaba.

Cada día, el corazón de la tailandesa se llenaba de esperanza, solo para ser aplastado por la realidad de que Jennie no sentía lo mismo por ella. Cada interacción con Jennie se volvía una tortura emocional, ya que Lisa se sentía constantemente humillada por su falta de interés.

La forma en que Jennie trataba a Lisa sólo aumentaba su dolor. Jennie parecía disfrutar de hacer comentarios sarcásticos y burlarse de Lisa en público, dejándola sintiéndose avergonzada y humillada. Cada vez que Jennie hacía una broma a su costa, Lisa sentía que su corazón se rompía un poco más.

A pesar de todo, Lisa no podía evitar aferrarse a la esperanza de que algún día Jennie cambiaría de opinión y correspondería a sus sentimientos. Se torturaba a sí misma, buscando cualquier señal de que Jennie pudiera sentir algo más por ella. Pero cada vez que intentaba acercarse emocionalmente, Jennie se alejaba aún más, dejando a Lisa sintiéndose rechazada y despreciada, pero como dicen, todo llega a su limite...

|3 días atrás; Seúl, Corea del Sur|

Lisa, esperando fortalecer su relación con Jennie, la invito a una importante fiesta de una de las fundaciones que ayudaba. La neozelandesa, como no queriendo la cosa termino aceptando porque su padre le estaba pisando los talones para que lo hiciera, y conociendo a Jennie era alguien que no se iba a quedar callada y haría saber cuan disgustada estaba por pasar su sábado con Lisa.

-¡Esto es ridículo! No puedo soportar estar aquí- Refunfuñó haciendo que la tailandesa la observara -No entiendo por qué estamos haciendo esto. Me estoy volviendo loca, jamás imagine estar un sábado con la "Madre Teresa de Calcuta" cuando bien puedo estar con algún guapo extranjero en el mejor club de la ciudad- Manifiesta una vez más, la pelicorto se quedó observándola en silencio por un momento.