En Otro Mundo. (kuroshitsuji)

Capitulo 3.

No podía ni describir mi cara en ese momento, me quede congelada por lo que estaba viendo.

-Definitivamente me drogaron- Quede congelada por lo que estaba viendo, de inmediato volteo a ver nuevamente la mansión y ¡Bingo! Ya se de donde había visto esa mansión, pero esto tenia que ser una maldita broma.

Vi como el me miraba con una sonrisa, acto seguido me vio de arriba y abajo como si me estuviera criticando.

Esa persona...o si así puedo llamarlo, esa persona el que pensé que era alguien de seguridad terminó siendo uno de los personas más famosos de una serie que venía de niña. Sebastian Michaelis.

Hiba a decir algo más, pero en ese momento una voz en mi mente me decía; ¡Huye y no digas nada!.

Sin pensarlo dos veces, paso de lado a ese ser, no volteo atrás y me empiezo a desesperar por todo esto pues...¿Qué estaba pasando? ¿Por qué el está aquí...? ¿Qué es lo que realmente busca esa persona que me trajo aquí?.

Todas esas preguntas estaba en mi mente, corría demasiado y sin voltear atrás, pero al momento de reaccionar y que mi miraba se centrara enfrente, lo vi ahí parado.

-Veo que tiene demasiada prisa...Señorita...- Me miró con su típica sonrisa, aunque ya sabemos que esa sonrisa es más falsa que los mensajes de tu ex.

Tome mi bolsa con mis dos manos, mientras retrocedia un poco, pues si esto no era una pesadilla ni un sueño, entonces significa que el fácilmente me atraparia, lo cual no tendría escapatoria.

-Lo siento...tengo que irme...- Mi voz se quebró un poco, pues aun no me acostumbraba a nada de esto, pero algo que si sabia es que no me tenía que topar con el, la carta que tenia especificaba que este no era mi mundo por así decirlo, si realmente eso era verdad, eso significa que no me tengo que confiar en nadie, ni aunque fuera este tipo de personajes.

Me di la vuelta para correr nuevamente pero al momento de hacerlo siento un golpe en la parte de mi cabeza, haciendo que me desmayara por completo, ni siquiera me pude reaccionar, pero se esperaba mucho la verdad.

---Pov: Sebastian----

Al dejar inconsciente aquella señorita, la cargo en mis brazos, la miro detalladamente, sabía bien que ella era alguien especial, su aura es muy diferente a la de un ser mortal, pero no es un demonio, ni un ángel, o un Shinigami...lo cual se me hizo un poco raro, pero a la vez interesante....

La cargo hasta la mansión, mientras entro sin que me vieran los sirvientes, por el momento no quería fastidiarme con sus preguntas tontas. Entro a una habitación de huéspedes y la dejo delicadamente en esa cama, se veía tan agusto durmiendo. Me preguntó que cosas interesante tendrá esa niña para mi.

Ella era un poco...¿Como decirlo?, llevaba prendas muy extrañas. Específicamente una camisa con unos logos un poco extraños, con unos pantalones negros, los zapatos...era algo raros por así decirlo.

-Definitivamente así no se viste una pequeña Dama...- Suspire con un poco de fastidio al escuchar aquella voz. Se bien quien se acercaba. Con brusquedad el abrió la puerta mientras miraba serio.

-Oye Sebastian, te estoy llamando des- No termino de decir aquella palabra cuando vio a una chica profundamente dormida en ese momento.

-¿Quién es ella? ¿Acaso era una intrusa?- Vi como mi joven amo se acercaba aquella chica mientras yo le explicaba la situación. -No Joven amo, ella estaba ahí rondando...- Lo miré seriamente. -¿Entonces por que esta aquí? ¿Acaso te dio lastima?- Contesto con sarcasmo.

-Claro que no, pero esa chica se veía tan confundida que quise ayudarla un poco...- La volteo a ver nuevamente, pero un momento note como ella empezó a moverse un poco, parecía que tenía una pequeña pesadilla.

-La traje aquí por una razón Joven amo, ella no parece normal, desde acá sentí un aura diferente, y es ella a la que pertenece eso, pero...- Me quedé un poco pensativo. -Pero ella es una simple humana, o eso es lo que creo-.

-Ya veo...entonces era eso...- Se quedó mirando aquella persona fijamente. -Cuando ella me vio, se vio tan sorprendida, como si ya me conociera, al momento quiso escapar, así que, se me ocurrió la gran idea de traerla para acá.. - Conteste con una sonrisa.

-Mientras no nos cause problema la podemos tener por el momento, pero si crees que es buena idea tenerla aquí, entonces trae información de ella, por lo que veo ella no es de aqui...- Vi que se refería a la vestimenta, y tenía razón.

-Como usted lo ordene...- Me incline, y salí de ahí para buscar información, no será tan difícil, este tipo de cosas eran fáciles para uno.

----Pov:Isabella---

Estaba corriendo por todos lados, me encontraba en un laberinto sin fin, mis pies ya no aguantaban correr, caí al duro piso mientras intentaba agarrar aire.

Al voltear enfrente veo al mismo hombre, el mismo que me ah tenido con desesperación en mis sueños, pero a diferencia de las otras veces, el solamente se me queda viendo, no dice ni una sola palabra. Así que como pude, yo decidí hablar.

-¿P-por que...h-haces esto...?- Fue lo primero que me salio de mi boca, pero el no me contestó al momento, solo soltó una pequeña risa mientras se agachaba para estar a mi altura.

No quise ni mirarlo, pues a decir verdad...yo tenía miedo de el. Con brusquedad agarro mi mentón y me obligó a mirarlo a los ojos, solamente eso podía ver. -Eres muy divertida...no por algo el destino te escogio a ti- Contesto algo serio. Se acerco bastante a mi y me susurro algo en mi oido -Te diré una cosa antes que despiertes querida, no digas ni una sola palabra de ti- Ante esas palabra me despierto de un brinco mientras respiro agitadamente.

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Me senté, mientras recuperaba mi aliento, todo esto era un dolor de cabeza Definitivamente. Note que estaba en una suave cama, ahora ya no estaba afuera, ahora de nuevo estaba en un lugar desconocido. Al estar un poco más tranquila pienso en las cosas ya con más claridad y recuerdo un poco que paso antes de caer inconsciente. Ante eso tomo mi bolso que estaba a lado de mi, y me intento parar para irme de este lugar pues esto no me causaba buena impresión, pero antes de salie de aquella habitación escucho una voz un poco infantil atrás de mi.

-Veo que ya despertó...- Dijo aquella voz, volteo lentamente mientras me doy cuenta quien era. -Ya me jodi...- Susurre al ver quien era.

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Chan Chan Chaaaan, bueno ojalá les guste este capitulo, poco a poco estaré subiendo los demás, para que se den cuenta ya un poco de las cosas.

Realmente aún me falta algunas cosas que complementar pero poco a poco iré resolviendo.

Bueno me despido y gracias por leer este Capítulo!