El es tu hijo/He is your son

capitulo 4

Día xx del mes xx del año xx.

Kartein/Yujeong sostenía en brazos a su hermoso bebé reciénnacido. No podía creer que 12 horas de doloroso parto pudieran crear algo tanperfecto. Este niño nació antes de lo esperado, dos meses antes para serexactos. Solo verlo...

El pequeño bebé era una total ternura. Pesaba entre 1.5 y2.5 kilogramos (3.3 a 5.5 libras) y medía aproximadamente 30 a 40 centímetros(12 a 16 pulgadas) de longitud. Aunque nació sano, tuvo que permanecer enobservación en la incubadora. Kartein/Yujeong ayudaría con su habilidad paraasistir a su hijo. Aún no tenía ningún parecido, no sabía si se parecería aella o a su padre, pero no le importaba; su hijo estaba en este mundo y por finlo tenía en sus brazos.

De repente, una voz sonó en la sala."¡Felicidades!" Era el médico, quien sacó al niño un momento y loenvolvió en una suave manta azul, entregándoselo a su madre para que tuviera laoportunidad de cargarlo. "¿Ya has pensado en un nombre para él?"preguntó una enfermera que admiraba al bebé.

"Curtis Kian," respondió Kartein/Yujeong, perosolo en su mente, ya que ese sería su nombre cuando lo presentara al mundo.Mientras tanto, viviría bajo el nombre de Seo Jiwoo. Al ver a los médicos,pronunció: "Seo Jiwoo", besando la frente de su hijo. "Ese es unnombre hermoso", dijo el médico con una sonrisa. "Le puse el nombrede su difunto padre", explicó Kartein/Yujeong, aunque eso era mentira. Noquería que el mundo conociera a su hijo recién nacido.

"Maravilloso. Haré que firmen este certificado denacimiento y los liberaré a ambos cuando estemos seguros de que el bebé nocorre ningún riesgo." El médico le entregó un trozo de papel.Kartein/Yujeong anotó su nombre y se detuvo cuando llegó al campo del padrebiológico. Ya tenía todo preparado: papeles falsificados de un hombreinexistente llamado Seo Jiwoo, que supuestamente murió en un accidente. Aunquetentada a dejar esa parte en blanco, la llenó para evitar futuros problemas.

Mientras pensaba en el hombre de aquella noche, se dijo a símisma: "No lo necesitamos, ¿verdad, Jiwoo?" El bebé respondióenvolviendo su manita alrededor de su dedo. Kartein/Yujeong no durmió esanoche. Mucho después de que Jiwoo se hubiera quedado dormido en sus brazos,ella lo abrazó, tarareando suavemente y observando el constante subir y bajarde su pecho. Su corazón se llenaba de amor y se sentía completa ahora que teníaa alguien que la necesitaba.

"Mi pequeño Jiwoo. Te prometo que siempre estaré ahípara ti. Podemos lograrlo, tú y yo, no importa quién nos amenace, yo meencargaré de ello." -susurró Kartein/Yujeong-. El bebé se retorcíamientras dormía y Kartein/Yujeong leyó en silencio su libro de cuentos de hadasen voz alta, como solía hacer cuando estaba embarazada de él.

Tiempo después, Kartein/Yujeong estaba luchando mucho por sucuenta. No era fácil cuidar un bebé sola. Tuvo que contratar una niñeramientras salía de compras o trabajaba. Jiwoo lloró desde su cuna, y aunqueKartein/Yujeong cantaba y lo balanceaba, nada lo calmaba. "Jiwoo, cariño,está bien." Kartein/Yujeong lo acunó mientras sostenía una taza de café ensus manos.

¿En qué estaba pensando al quedarse con este bebé? Tenía 21años y apenas estaba comenzando a destacarse como una gran sanadora. Aún noestaba en el top 50 y tenía mucho por qué luchar. Si no fuera por esa noche decelebración tras terminar una gran investigación, no estaría en esta situación.Había salido a celebrar y los tragos se acumularon, terminando con esa noche yaquí estaba. Esto no era justo para Jiwoo. La peliblanca pensó en laposibilidad de dar al niño en adopción, pero se dio una cachetada parareaccionar. Si hiciera eso, mejor lo hubiera abortado, pero no podía; solo conmirarlo, sabía que no podía hacerlo. Saldría de esto, encontraría el modo paraque tanto ella como su hijo pudieran vivir una vida feliz o lo más cercanaposible a la felicidad.