Capítulo 14

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10 de junio (Día 3) 

Me levanté temprano, tomé una ducha y me preparé para el día de hoy, sin embargo mi compañero de habitación no estaba. Me preocupó un poco. y aunque dudaba un poco de él, al igual que de todos los demás, seguía siendo mi amigo y no lo dejaría atrás.

Me dirigí al centro de operaciones esperando encontrarlo ahí, pero no estaba, regresé a los dormitorios y no estaba ahí. Corrí hasta el área deportiva y seguía sin encontrarlo. Fui hacia donde estaban las tumbas y ahí estaba. Mirando fijamente la tumba de Sebastián.

Se que inmediatamente notó mi presencia, pero no volteó a verme y solo me dirigió unas palabras:

-¿Qué nos espera a nosotros?

-No se- dije- pero espero que nadie más termine aquí. Ahora estamos divididos y Mr. E se puede aprovechar de eso.

-Tienes razón- dijo- hay que preparar una nueva estrategia. Vamos al centro de operaciones.

Nos dirigimos al centro de operaciones y seguía vacío, al parecer el otro equipo no había tomado posesión de este. Y eso era relativamente bueno, pues ahí teníamos toda la información de lo que había estado sucediendo a lo largo de estos cinco días, de estos cinco largos días.

Nos quedamos ahí esperando a que los demás llegaran, nadie del otro equipo se asomó y comenzaron a llegar los demás, a excepción de Denis.

Platicamos acerca de la situación y nos dimos cuenta que lo más importante por ahora era evitar que tomaran la cafetería, ahí había las provisiones necesarias y si no teníamos eso era muy probable que muriéramos de hambre.

Ya era algo tarde cuándo repentinamente llegó Denis. Estábamos planeando una visita a la cafetería, no sabíamos qué nos depararía al llegar allá. Improvisamos unas armas con cosas que encontramos en los laboratorios, teníamos que estar preparados para lo que viniera.

Nos dirigimos inmediatamente hacia la cafetería y todo estaba muy silencioso, bastante silencioso diría yo. Entramos y estaba vacía, todo estaba perfectamente en su lugar. Decidimos tomar un poco para comer y nos sentamos a comer, sin embargo no quitábamos el ojo de la puerta, en cualquier momento alguien podría entrar y causar una catástrofe.

Ninguno de los del otro equipo se presentó durante el desayuno o al menos eso creíamos, ya que al salir de la cafetería se encontraban afuera esperándonos. Al parecer tuvieron la misma idea de fabricar unas armas y nos estaban apuntando con ellas, sin embargo ellos se habían dirigido al cuarto de vigilancia y tomaron las armas de ahí, por lo que tenían ventaja. Todos sabíamos de la existencia del cuarto de armas, pero acordamos no acercarnos ahí, solamente en caso de extrema necesidad.

Tenían en armas una escopeta, dos pistolas de choques eléctricos, un revolver y una calibre 45, además de varios toletes y chalecos. Éramos más en número, podíamos vencerlos fácilmente, pero decidimos no movernos. Alex nos miraba y tenía sus ojos bastante rojos, al igual que todos sus compañeros, pero él parecía ser el que más rojos los tenía; Mr. E atacó de nuevo.


Alex fue el primero en hablar, él era el que tenía en sus manos la escopeta y por obvias razones era el líder. Sin embargo su voz sonaba a la de Mr. E y eso era una muy mala señal.

-Como verán- dijo tétricamente- ya poseo el control de las armas que tenían en el campus, las cuales servirán para mantenerme con vida cuando los infectados lleguen aquí, para lo cual no falta mucho tiempo.

-Hay algo que no entiendo- dijo Lesly- ¿Cómo es que pudieron abrir el cuarto de armas si solamente nosotros teníamos llaves?

-Es mejor que se lo preguntes a quien nos abrió la puerta- dijo Valeria.

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