Capítulo 17

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11 de Junio (Día 4)

Rayos, creo que tengo un problema con quedarme dormido en varios lugares que no son mi cama. La verdad es que rara vez en ella desde que empezó todo esto logro conciliar el sueño. Despierto y me encuentro mis manos y mis pies atados con una cuerda. Y todos los miembros  del otro equipo apuntandome con armas. Al parecer eran las 7:00 AM.

-¿Fue una mala noche Esdras?- preguntó Estefany.

-Bastante- contesté yo.

-¿Qué sería de un equipo sin su supuesto líder?- preguntó Denis.

-No hay un lider con nosotros- contesté- las cosas funcionan bien entre todos porque todos cooperamos y nadie se impone.

-Lo que digas-contestó con poco interés ella mientras me apuntaba directo a la cabeza con un arma- pero todos aquí sabemos que tu eres el que trata de mandar entre todos y sin ti estan perdidos.

-Adelante, hazlo, solo los motivarás para que hagan las cosas mejor. ¡Adelante, dispara!

-No tengo problema en hacerlo- dijo ella un poco nerviosa.

-Ni yo- contesté-

Cargó el arma y apuntó a mi cabeza, quitó el seguro y yo solo podía ver las frías miradas de cada uno de mis compañeros siendo controlados por Mr. E. Esperaba yo recibir el disparo, cuando alguien repentinamente entró golpeando la puerta de la entrada del gimnasio. Eran mis amigos. Gracias al cielo.

-¡Esdras!- gritó Yolanda e inmediatamente todas las miradas se dirigieron hacia ella al igual que todas las armas apuntándole.

Todos los demás entraron tras de ella cuidando cada movimiento de las armas. Caminaron hasta que estuvieron lo suficientemente cerca de mi y de los demás.

-¿¡Qué hacen aquí!?- preguntó efusivamente Alex.

-Despertamos y había una nota en la puerta- contestó Mario.

"Los espero a las 7:00 en el gimnasio y no lleguen tarde"

Mr. E

-Inmediatamente corrimos hacia acá- dijo Mauricio- pero no esperábamos encontrar a nadie más.

-Que bueno que llegaron- dije.

-Es algo curioso- dijo Arturo- el encontrarnos todos aquí.

Las armas seguían apuntando hacia ellos y tal parecía  que cualquier movimiento en falso que hicieran les costaría la vida. Creo que se distrajeron lo suficiente entre acusaciones y especulaciones acerca de lo ocurrido que pude desamarrarme los pies y correr hacia donde estaban mis amigos, eso provocó demasiada tensión. Gritos entre cada uno de los que estábamos en la habitación, seguíamos en desventaja nosotros, ya que ellos tenían las armas y nos apuntaban directamente a cada uno de nosotros. La tensión en el ambiente era demasiada.

En esos momentos se encendió la pantalla que estaba en la cancha, todos la volteamos a ver y tenía un contador, que marcaba 5 minutos. Se escuchó la voz de Mr. E por los varios megáfonos que se encontraban en el estadio.

-Otra vez juntos- dijo- y como podrán ver no les queda mucho tiempo. Cuando ese contador llegue a cero uno de ustedes morirá. Todos ustedes recordarán el sueño que tuvieron anoche, mas bien eso no fue un sueño, fue una serie de recuerdos compartidos a través de sus neurotransmisores. Cada uno de ustedes recuerda su versión del sueño, pero todos tienen el mismo final y se unen en uno solo. Eso solamente sirve para observar su capacidad de reacción ante el miedo y fue una respuesta "buena".

-¿Qué es lo que quieres esta vez?- dijo Alex quien parecía ya no estar controlado por Mr. E, al igual que todos los demás, porque había dejado de apuntarnos y dejó su arma en el suelo.

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