CAP.3

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Un golpe de cubiertos azoto sobre la mesa sacando a todos de sus pensamientos 

—Ya basta me dan ganas de vomitar sus falsas muestras de cariño— con comida en la boca y una mueca de enojo y asco hablo casi gritando

—Puedes no gritar y hablar mientras comemos y aun con la boca llena por favor hermana— con una mirada sin mas ni mas se levanto y se fue enojada a su habitación 

La cena termino en paz o al menos eso percibió ella, junto a su hermana ayudo a su madre recogiendo la mesa su padre llego junto a ella y tomo su hombro

—Ven conmigo hay algo de lo que tenemos que hablar —

Con una mirada volteo a ver a su madre con preocupación a lo que ella con tranquilidad asintió con la cabeza a lo que ella volteo siguiendo a su padre llegando a su oficina o a eso que ella llamaba oficina ya que era una habitación llena de libros y archivos del clan

—Siéntate hija tenemos que hablar— tomo asiento enfrente de el — hija como sabrás yo ya estoy viejo tus hermanas ya están comprometidas o casadas, tu hermana mayor ya tiene 24 años y tan solo vive aquí por que su marido esta en un viaje de exploración en otras aldeas, tu hermana de en medio tiene 20 esta comprometida con el hijo de la familia Watanabe y se casaran en 3 meses por lo que solo quedas tu mi dulce flor con 16 años, por lo tanto me di la tarea de buscar a un marido apropiado, se que nunca a sido tu sueño casarte por obligación así que hagamos esto—

El padre se levanto de su asiento para ir a el escritorio por unos documentos 

—La mejor opción es el hijo mayor de los Uchiha, el  joven tiene 17 años es solo un año mayor que tu es el líder de su familia y de su clan, mi oferta es convive con el 1 año y si después de todo sigue sin provocar alguna reacción que no sea mas que estima serás libre de no casarte con el y podremos buscar a alguien mejor. ¿Aceptas hija?— Extendió su mano hacia ella a lo que ella acepto aun con dudas pero la oferta era buena 

—Entonces por favor padre dame sus archivos y todos su datos para poder prepararme para cuando nos presentes... cuando será eso— pregunto indecisa

—La agendare lo antes posible ¿Que te parece para dentro de 3 días? seria un buen tiempo para unos preparativos adecuados ¿No lo crees?—

—Tienes razón, entonces te ayudare con los preparativos que sean nece— fue interrumpida abruptamente por su padre—

—No no no. Claro que no, toma estos días para relajarte— tomo sus hombros con suavidad reconfortándola —

—Esta bien padre, yo... voy a ir a dormir, descansa papá— se acerco a el y beso su mejilla antes de salir por la puerta directo a su habitación

Lavo su cara quitando el poco o mucho maquillaje que le quedara, su cama se sentía tan suave que casi de inmediato se quedo dormida y mas aun por el estrés de casarse... casarse 






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La mañana llego con un gran sol abrazador que cubrió por completo su habitación, los rayos de luz llegaron a sus ojos despertando a eso de las 9:12 de la mañana algo tarde a comparación de antes , pero su padre le había pedido que se relajara así que eso haría.

Se levanto completa y absolutamente adormilada, se dirigió al baño donde después de una ducha templada salió directo al armario donde con ropa mas cómoda salió de su habitación directo a la sala de estar donde se sentó en el muy suave sofá dejándose caer, encendió el televisor encontrando un buen programa o al menos lo suficientemente entretenido para captar su atención, paso el tiempo y al parecer el desayuno a lo que fue a la cocina donde se sentó en donde correspondía sin embargo no había nadie en la cocina mas que ella y su madre quien una vez el desayuno estaba listo lo dejo en la mesa junto con un beso en la cabeza de su hija, a lo que rápidamente salió de la cocina 

Sin entender solo comió tranquilamente, después levanto la mesa y decidido salir a la aldea por lo que necesitaría cambiarse. Unos treinta minutos después ya esta en la entrada poniéndose zapatos, llevaba lo necesario algunas kunai y dinero todo listo

La aldea se veía muy atareada mas de lo normal aunque no sabia lo que sucedía, dio algunas vueltas por los lugares, un salón de belleza se le hizo peculiar, le gustaba su apariencia normalmente no se cuidaba mucho pues prefería tomar mas tiempo para su entrenamiento por lo que se había descuidado un poco, su cabello estaba algo seco sus manos se veían muy magulladas y ya ni hablar de su bello corporal. Decidida entro preguntando si aun tenían un hueco en su agenda a lo que por suerte una clienta había cancelado su cita por que acaba de dar a luz 

Cepillos, tijeras, peines, cera depilatoria y de mas cosas sucedieron en ese salón de belleza. El costo al final fue algo alto pero valió la pena o al parecer eso sentía ella, y sin esperar fue directo a su casa. Entro justo cuando todos se reunían para pasar tiempo juntos

—Ya llegue familia, que están haciendo— estaba parada en el marco de la entrada de la sala de estar, todos la veían de forma rara— ¿Que sucede?...


La única que no es inútil (Itachixtu) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora