CAPÍTULO 2: INTENTO DE VIDA NUEVA

3 0 0
                                    


Está decididísimo, han pasado unos meses desde aquello y no aguanto más sin salir, me voy, esta misma noche, cojo mis cosas y me voy, he visto un apartamento que se alquila en la otra punta de la ciudad y además es baratito, me llega el dinero para tres meses por lo menos.

-RIN RIN

-Tía que quieres

-Raquel, no puedo dormir, estoy que me subo por las paredes.

-Normal, seguro que has vuelto a beber......

-Entretenme por favor, a ver si me duermo.

-Cuenta ovejas, yo estoy haciendo algo importante.

-¿Importante?, ¿A las tres de la mañana?

-Sí, Violeta, sí, muy importante.

-¿Qué es tan importante?

-Me estoy escapando de casa, voy a abrir la puerta.

-¿Qué dices?

-Ah, no, mierda, será graciosilla la tía.

¿Qué pasa?

-Mi madre ha cerrado la puerta con llave, si es que soy tonta, ¿para que le he dicho que me voy?

-jajaja, no sé como pretendes que me duerma contándome tus penurias tontas, me entra la risa y tengo menos ganas de dormir.

-No pretendo que te duermas y no te rías, no hace gracia, ahora tendré que salir por la ventana, menos mal que es un primero.

-¿Y todo esto porque no quieres esperar tres años a ser mayor de edad?

-A ti nunca te ha pasado esto, haces lo que te da la gana porque a tus padres les da igual lo que hagas con tu vida.

-¿Premio o castigo?, a veces es horrible ver como tu propia sangre pasa de ti y no hace caso a tus problemas, será bueno en ciertos aspectos, pero en otros no.

-Me da igual, yo solo quiero una vida más libre.

-Bueno habladora, ¿baja ya por la ventana, no?

-Ya he bajado, mientras hablaba, sé hacer dos cosas a la vez.

-Búa, si tendrá experiencia y todo la tía, yo habría bloqueado la ventana también, si es que tu madre no va más allá de la puerta.

-Siempre me escapó por la ventana, pero hoy me hacía ilusión salir por la puerta.

-Ilusión de no volverte a hacer otro esquince como en Abril o en Febrero, ¿Estás bien ahora, no?

-Sí, me has pillado, pero no volveré a hacerme más esquinces por bajar por una ventana, o eso espero.

- creo que por fin me está entrando sueño, te dejo Raquel.

-Adiós Violeta, yo tengo que buscar ahora la casa de la persona esta que la alquila.

-Suerte

-Suerte a ti mañana con la resaca.

-Ay que graciosa, a ver si ahora en vez de ganas de dormir, me van a entrar ganas de llorar. Bueno adiós.

-Adiós.

La casa de esta persona está en la otra punta de la ciudad, por una parte me alegra, más lejos del infierno en el que vivía entes, pero por otro lado, que pereza me da ir a las cuatro de la mañana por la calle sola hasta allá, pero soy valiente, o es lo que siempre he pensado.

Creo que he llegado, solo ha sido media hora y estoy aquí, llamaré al timbre.

-Ding dong.

-Hola buenas, ¿Qué te trae por aquí?

Aunque todo se vuelva imposibleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora