(( BAJO EL VELO DE LO PROHIBIDO ))

{7} Cumplir el deseo

Los gemidos que le salían de sus labios gozando de los placeres que Jungkook le estaba dando

Cómo no hacerlo, si en estos años de casado nunca sintió la boca de su esposo en sus partes, ahora sentía la boca de un chico mucho menor que él

Sabiendo que pecar estaba mal, pero como no dejar de sentirlo si esto era lo que buscaba hace rato, su cuerpo y piel pedían por esto 

 — Dios, Jungkook... __ Murió en plena acción cuando sintió las ganas en su vientre ya casi olvidando que era casado Jungkook no perdió el tiempo, se metió entre sus piernas y agarró su miembro y le alineó en la entrada de Jimin, era un hombre casado, sí, pero no tenía nada hace tiempo

Entró solo la mitad de pene, la cabeza para mejor placer, Jimin se retorció de el placer que recorrió su cuerpo ante ese dolor pero lleno de placer

No abrió los ojos porque le daba pena verlo, pero no hacía falta porque el cuerpo decía mucho con gemidos que las palabras sobran

Un poco más y se fue hasta el fondo que el pobre hombre estaba lleno y lo sentía en su estómago, deseaba más, mucho más, empezó a arañar la espalda. Lo beso tan profundo mientras empezaba a moverse de tal manera que sentía que iba a quedarse ahí Jungkook lo dejo de besar y ahora se levantó poniéndose de rodillas para agarrar las piernas de Jimin encima de sus hombros y empezar a entrar y salir de su agujero

Únicamente debía darle todo lo que quería y darse el gusto de verlo gemir a lo alto tal cual como ahora, viéndolo tan cual como ahora lo veía tan esplendoroso 

 — ¿Así te gusta, no es verdad? __ Si mover su cabeza era la idea de decir que sí, entonces estaba contento

Debía tener cuidado con su corazón, una cosa era que le gustará y otra muy distinta se enamorará de Jimin, eso era pasar a algo muy delicado, sobre todo cuando ya pasó por eso, enamorarse era feo

Pero disipó sus pensamientos en cuanto agarro los pies de Jimin y las puso contra la pared, doblándole en dos y agarrar su agujero tan jodido como un castigo

Mientras Jimin se desvaneció en gemidos llenos de placer y más el nombre de Jungkook

Era placer para los dos Jimin terminó primero, algo avergonzado por no aguantar más, pero Jungkook le bajó las piernas y lo beso con deseo, con algo de odio por hacerle sentir esas cosas que creía haber olvidó ya, no se creía un santo

Había follado con gente en sus viajes, pero era solo sexo y descargar la presión, pero esto era algo más y ya le estaba asustando, no podía creer que le gustaba besarlo tanto

Llegó a su deseado orgasmo, pero era la cosa más linda que jamás supo no siquiera con aquel infeliz

Desgarró su alma cuando sintió los brazos de Jimin en su cuello y ahora era un beso más calmado, deseando que fuera eterno por cómo se sentía los labios de Jimin en ese momento

 — Fue algo, maravilloso __ Jimin habló después de un rato al ver que este no hablo

 — Esto fue solo sexo __ No, no dolió como el infierno 

 — Si lo sé, solo que esto de ser infiel es algo... Bueno __ Se rio y empezó a salir en busca de lo que quería 

 — Perdóname, me estoy portando como un patán __ En el momento exacto

 — Jungkook, yo no te estoy reprochando nada, además sé que tienes algo, algún día me lo dirás __ Jimin dijo y ya listo salió de la casa, su hermano debía estar esperándolo

Jungkook se quedó sentado en la cama con algo en su pecho, ese que creyó que estaba muerto y con miedo se tocó ese pecho y en ese lugar 

 — No nos puede pasar... No de nuevo

Era más fácil mentirse a él mismo que tomar las riendas de lo que empezaba. A brotar en su corazón era tiempo de estar alerta, aunque creía que ya era demasiado tarde