Designios de una poetisa

ETAPA 1: ENAMORAMIENTO

CORAZÓN

Estoy sumergida en esta neblina que no me deja ver.

Estoy entre la espada y la pared.

El futuro es incierto,

pero contigo sería magnífico.

Una lástima que no pueda llamarte "amor" ni decir "te quiero",

pues sería bello poder contártelo.

Luego sueltas que no me extrañarías,

eso duele, mata y petrifica

porque yo daría por ti mi vida, el Sol y las estrellas,

todo en un mismo día.

MIRADAS

Trazo constelaciones en sus ojos,

los cuales crean magia al verlos.

Esos tonos que evocan la tierra,

el 'γη' (gi) griego que le da vida,

esa naturaleza tan suya que hechiza.

Veo en ti lo que Van Gogh veía en las estrellas,

ese pigmento de luminosidad y belleza

como aquella primera noche de agosto,

dónde apostamos todo a nada

y sopesamos el ahora o nunca.

Esas miradas indecisas

que nos lanzamos en plena oscuridad,

sabiendo que tocaríamos el punto de no retorno

provocando un eterno afecto

y un recóndito olvido.

27/11/23

Besos a medianoche,

manos entrelazadas en plena nocturnidad.

Eres tú mi perdición entre todos mis pensamientos,

ocupando la soledad que reside en mí

y tiñendo con amor mis palabras melancólicas,

las cuales son un grito ahogado que nadie más sabe interpretar,

y que nunca caerán en la negligencia

por haber sido escritas por una poetisa,

sumida en sus designios que tanto la dejan en vela.