Naruto: El Legado de Uchiha

Sacrificio

Naruto se levantó de su descanso, sintiendo que su equipo no estaba en la casa de Tazuna. Probablemente estaban acompañando al cliente para reconstruir el puente que, según él, tanto ayudaría a su aldea. "Probablemente el combate será hoy", pensó Naruto para sí mismo con emoción al pensar en enfrentarse nuevamente a Zabuza.

Naruto frunció el ceño al sentir dos firmas de chakra muy bajos, como de dos bandidos, fuera de la casa. Además, percibió la presencia de dos personas más, probablemente la hija de Tazuna y su hijo. También sintió el chakra de Kakashi en el puente, junto a Sakura, Satsuki y Tazuna. Esto significaba que Zabuza y Haku llegarían pronto.

Naruto rápidamente salió de la casa saltando por la ventana. Con su velocidad, atrapó un puñetazo dirigido hacia Tsunami, retorciéndole la mano al bandido, haciéndolo gritar de dolor. Sin darle oportunidad de respirar, Naruto le dio una combinación de golpes en puntos vitales del cuerpo, finalizando con una patada que lo mandó hacia arriba.

Naruto haria solo dos sellos para su "Katōn: Ryūka no Jutsu (Elemento de Fuego: Jutsu Fuego de Dragón)", lanzó una gran bola de fuego hacia el bandido, cuyos gritos de dolor resonaron antes de caer muerto y calcinado por el jutsu de Naruto.

Naruto sacó su katana y, con su alta velocidad, se posicionó detrás del otro bandido, quien estaba asustado y ni siquiera alcanzó a ver cuándo se había movido Naruto.

"Tu baile no es más que basura", dijo Naruto en un tono monótono antes de atravesar al bandido con su katana. Limpiándola y guardándola, se dispuso a dirigirse hacia donde se encontraba su equipo..

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Satsuki frunció el ceño cuando se encontró acorralada dentro de un montón de pilares de hielo. Pensaba en una manera de salir de esa situación; no iba a ser fácil, pero lo intentaría. Esquivó por poco unos senbon de hielo.

Lanzó kunais y shurikens que fallaron irremediablemente al chocar contra los pilares sin hacerles ni un solo rasguño. Empezó a esquivar otra lluvia de senbon de hielo, pero esta vez no fue tan rápida y fue atravesada por muchos senbon, algunos en puntos vitales.

Satsuki estaba frustrada por no poder hacer nada contra esa persona desconocida y sus pilares de hielo. Sentía que no podía moverse libremente, pensando que esto sería lo último que haría y que no podría cumplir su sueño. Odio, un odio intenso, era lo que sentía actualmente la Uchiha. Un odio hacia la persona que la hizo quedar sola, odio hacia la persona que decía ser su hermano, odio hacia sí misma por no cumplir con sus palabras y odio hacia su enemigo.

La Uchiha levantó su mirada llena de odio, con un Sharingan de dos y un tomoe visiblemente en sus ojos.

"Esos ojos... ojos llenos de odio, ojos que representan el límite de la línea de sangre de un clan. Ante mí está la última Uchiha viva, fiel a Konoha, mirándome con ese dōjutsu, esos ojos de color sangre llenos de furia", pensó Haku al ver a la Uchiha.

"Saldre de aquí y te mataré. Eres solo un obstáculo en mi camino", dijo la Uchiha con furia.

Haria rapidamente sellos de manos "Katōn: Gōkakyū no Jutsu (Elemento de Fuego: Jutsu Gran Bola de Fuego)", lanzó una gran bola de fuego hacia los pilares, creando una cortina de humo. Ella creyó que con eso bastaría para derretir el hielo, sin embargo, fue sorprendida por múltiples senbon de hielo viniendo de la cortina de humo. Gracias a su Sharingan, pudo esquivar los senbon, pero no solo eran unos cuantos. Haku comenzó a atacar con senbon desde distintas direcciones, no dejando a la Uchiha más opción que bloquear con un kunai o esquivar, lo cual ya la estaba agotando.