Lazos del Destino (Camren)

Capítulo 1

Camila Cabello caminaba por las bulliciosas calles de Nueva York, disfrutando de un raro día libre. Había decidido perderse entre los turistas de Times Square, fascinada por las luces brillantes y la energía que irradiaba el lugar. A pesar de haber vivido en la ciudad durante varios años, siempre encontraba algo nuevo que admirar en ese rincón vibrante de la Gran Manzana.

Mientras observaba una pantalla gigante que anunciaba el último éxito de Broadway, su teléfono vibró en el bolsillo. Era un mensaje de su hermana Sofía.

"¿Dónde estás? Mamá quiere saber si vendrás a cenar esta noche."

Camila sonrió y respondió rápidamente. "Sí, llegaré a las 7. Estoy en Times Square ahora."

Guardó su teléfono y continuó caminando, disfrutando de su tiempo a solas. Pero su tranquilidad fue interrumpida cuando, al doblar una esquina, chocó con alguien. Ambas cayeron al suelo, sus pertenencias esparcidas por todas partes.

—¡Lo siento mucho! —dijo Camila, recogiendo sus cosas apresuradamente.

—No, fue mi culpa. —respondió una voz suave y familiar.

Camila levantó la vista y su corazón se detuvo por un momento. Frente a ella estaba Lauren Jauregui, su amiga de la infancia con la que había perdido contacto hacía varios años. Los ojos verdes de Lauren la miraban con una mezcla de sorpresa y alegría.

—¡Lauren! —exclamó Camila, incapaz de contener su emoción.

—¡Camila! —respondió Lauren, abrazándola con fuerza. —¿Qué haces aquí?

—Vivo aquí ahora —dijo Camila, aún sorprendida por el encuentro. —¿Y tú?

—Estoy aquí por trabajo —explicó Lauren, sonriendo. —¡Es increíble verte después de tanto tiempo!

Las dos amigas se levantaron y terminaron de recoger sus cosas. Decidieron ir a una cafetería cercana para ponerse al día. Entraron a un pequeño y acogedor lugar, donde se sentaron en una mesa junto a la ventana.

—No puedo creer que nos hayamos encontrado así —dijo Camila, tomando un sorbo de su café.

—Sí, el destino tiene sus maneras —respondió Lauren, sonriendo. —Cuéntame, ¿qué has estado haciendo todos estos años?

Camila le contó sobre su vida en Nueva York, su carrera musical y cómo había logrado establecerse en la ciudad. Lauren, a su vez, le habló de su trabajo en una firma de diseño y cómo había viajado por el mundo gracias a ello.

—Entonces, ¿sigues en contacto con Dinah y Ally? —preguntó Lauren.

—Sí, las veo todo el tiempo. De hecho, Dinah se mudó a Nueva York hace poco —dijo Camila. —¿Y tú? ¿Cómo están Normani, Taylor y Chris?

—Todos están bien. Normani vive en Los Ángeles ahora, Taylor está en la universidad y Chris trabaja en una empresa de tecnología —respondió Lauren.

Mientras conversaban, ambas se dieron cuenta de que el tiempo no había cambiado la conexión que tenían. La conversación fluía fácilmente y las risas llenaban el aire. Sin embargo, justo cuando estaban recordando anécdotas de su infancia, el ambiente cambió.

—¿Te acuerdas de esa vez en la vieja casa de tu abuela? —dijo Lauren, de repente seria.

—¿Cuál? —preguntó Camila, confundida.

—La vez que encontramos ese extraño cuarto en el sótano —dijo Lauren, bajando la voz.

Camila sintió un escalofrío recorrer su espalda. Claro que recordaba esa vez. Tenían quince años y habían decidido explorar la casa de la abuela de Camila, que siempre había tenido una atmósfera misteriosa. Encontraron una puerta oculta en el sótano que llevaba a una habitación secreta. Dentro, encontraron viejas fotografías y documentos que no entendieron del todo, pero que les dieron una sensación inquietante.