𝐎𝐍𝐄𝐒𝐇𝐎𝐓𝐒──𝐋𝐎𝐎𝐊𝐈𝐒𝐌 !

❝𝐉𝐀𝐊𝐄 𝐊𝐈𝐌❞

 ❝𝐉𝐀𝐊𝐄 𝐊𝐈𝐌 𝐱 𝐑𝐄𝐀𝐃𝐄𝐑❞

TRIGGER WARNING: Menciones e intentos de suicidio. Abuso físico y verbal.

  —¿DÓNDE ESTAS?— Pregunta una voz molesta al otro lado de la línea.

  —...Estoy de camino a casa, yo...Quería respirar un poco, mamá. — Respondo más calmada, mirando el cielo oscuro sobre mi.

  — ¡Apresúrate o tendrás que dormir tarde para compensar tu clase de gramática!

  — ...No te preocupes, ya voy en camino.

  — La próxima vez, irás acompañada para evitar desviaciones. — Dicen al otro lado. No es una sugerencia, ni tampoco una recomendación. Es una orden directa que debo cumplir, me guste o no

  Así ha sido mi vida desde hace mucho tiempo, controlada por los mandatos de mi madre. Las veinticuatro horas del día, los siete días de la semana, los trecientos sesenta y cinco días del año. Mi existencia entera, planificada y orientada a sus deseos y órdenes.

  — Claro, la próxima vez..

  Recuerdo que no siempre fue así, hubo una época en donde no tenía que preocuparme por mis calificaciones o mi futuro académico, en mi niñez, cuando papá todavía estaba.

  Pero cambió el día que él ya no estaba. Fue durante una noche cuando él nos abandonó, dejándonos a la deriva mientras se marchaba con otra mujer, o al menos eso afirmó mi madre entre lágrimas de impotencia destrozando las fotos y recuerdos que teníamos con él.

  Ella me tomó de los hombros cuando ya no hubo nada más que romper y recuerdo muy bien lo que me dijo, porque sus ojos inyectados en sangre siguen grabados en mi memoria: 'A partir de ahora, te convertiré en una mujer que no necesite de ningún hombre a su lado. Te mantendrás sola para que no tengas que pasar por lo mismo que yo'.

  Al principio estaba bien, clases de ballet, inglés, canto, coreano... Eran actividades divertidas que podía disfrutar con mis amigos entre risas y juegos. Pero las risas y los juegos me quitaban tiempo para mis clases de ciencias exactas, decía mi madre, arrastrándome de regreso al auto.

  Entonces, me inscribió en un colegio privado, de esos en donde todos vivían en una jaula supervisada al igual que yo. Ninguno tenía un hobbie que no estuviera orientado a pasar el examen de admisión, todos vivían con una cadena atada a los pies, por lo que, eventualmente, me convertí en uno de ellos.

  Mi vida carecía de sentido si no estaba rodeada de libros encerrada en mi pequeña habitación durante largas horas. "Soy una buena hija y debo enorgullecer a mamá" me repetía como un mantra, para no caer en la locura.

   Aunque supongo que no sirvió de mucho, porque de ser así, ahora no estaría colgada al borde de un puente, aferrándome a la vida con una mano, mientras que con la otra conversaba con mi madre, esperando una mínima muestra de afecto que me hiciera arrepentirme de mis decisiones.