Matrimonio Forzado - Yoonmin

010: Amigos

Después de un vuelo agotador, no pudieron evitarlo, la pareja de casados regresaron a su casa y al instante se fueron a dormir.

No obstante, la noche fue corta para seguir durmiendo, sin querer, ya el gallo soltaba la ruidosa bulla, haciéndolos despertar.

Yoongi se levantó con flojera para irse a tomar una ducha. En cambio Jimin quería seguir durmiendo, la cama era suavecita, las sábanas estaban calientitas y estaba soñando con conocer a su banda favorita. En este punto, ¿Quién querría despertarse? Nadie.

Cuando Min salió del baño, ya duchado, pudo ver la sonrisa (entre sueños) de Jimin. Se veía sumamente adorable y relajado. Se acercó con cautela y acarició la cabellera suave que poseía el menor, jugó con su mechón y se indignó en pasar sus dedos por el puente de su nariz. Era tan suave.

El castaño soltó un quejido.

Yoongi sonrió, pero al darse cuenta de lo que estaba haciendo, quitó su mano de inmediato.

¿Qué le pasa? ¿Por qué tocarlo de esa manera? Incluso, ¿Por qué sonreír?

— Jimin, ya es tarde, despierta. — Removió al menor de los hombros.

— Yoonie.. — Se quejó. — Cinco minutos más.

— Prácticamente te he dado diez minutos. — Min suspiró. — Toma una ducha rápida.. estaré esperándote abajo. — Jimin asintió tallando sus ojos, con los cabellos alborotados mientras Yoongi lo hacía sentarse en la cama.

— ¿Hoy hay clases? — Bostezó sin abrir los ojos, Yoongi asintió. — Ah.. tengo mucho que igualarme. Seguramente hay mucho que hacer. — Frunció el ceño. — Y debo ducharme.

— Iré a cambiarme, te espero abajo. — Yoongi volvió a decir, saliendo de la habitación y dejando al menor ya -casi- despierto.

Los minutos pasaron, Min terminó de acomodar la mesa y solo faltaba su esposo para que desayunaran y se fueran. El tiempo corría rápido, en su reloj ya marcaba casi las siete de la mañana.

Iba a subir al cuarto matrimonial para apresurar a Jimin, sin embargo, este mismo apareció en el comedor con una sonrisa reluciente (significaba que ya había despertado) y ganas de salir a hacer algo por la vida.

— Ow. — Yoongi al ver la sonrisa del menor, también lo hizo, sonrió. — Jimin, estaba pensando.. ¿No sería buena idea colocar las fotos que nos tomamos en Hawaii y colocarlo en la sala? — Park lo vió mientras tomaba asiento.

— ¿Tenemos fotos?

— Los heladeros nos tomaron varias fotos... y.. — Yoongi tragó saliva. — Tome fotos de algunos paisajes, también a ti.

Jimin hizo un círculo con sus labios al asombrarse de tal acto del alfa. Al saber la propuesta y la razón. — Está bien. — Aceptó, sabiendo que las fotos puestas en la sala, determinarían que su relación no va tan mal para que sus padres se interpongan.

Yoongi entonces se sentó, empezó a comer su desayuno optando mucho en ver cómo Jimin disimulaba la mirada para verlo. Sabía muy bien que desde que habían partido de Hawaii, las cosas estaban un poco inestables. Y es que, el beso que tuvieron, ese beso no estaba en los planes de ninguno de los dos.

— Fue un buen viaje. — Dijo Yoongi derrepente.

Jimin asintió con las mejillas rellenas por comer grandes cantidades de comida. Yoongi se preguntaba mucho si aquello (de haberlo besado) estaba bien, una parte decía que le gustaba, pero la otra simplemente estaba en total confusión y duda.

Era sinceramente algo que no sabía cómo comprobar. Sus sentimientos.. ¿Por qué ahora se encuentran dispersos? ¿Por qué no sabe lo que quiere? ¡¿Por qué se encuentra indeciso?!