De un portazo, de nuevo se adentró aquel hombre en nuestro restaurante. Bueno, mejor dicho el restaurante de mi padre. Con cara de pocos amigos, miró con furia saliendo por sus ojos a mi progenitor mientras se acercaba a la barra con una mirada oscura e intimidante.
Intimidante para cualquiera, menos para mi padre.
- ¡Min Yoongi! - dijo el intruso mientras venía al frente de mi padre y lo miraba mientras el resto de la clientela estaba comiendo.
Mi viejo al verlo bufó dando un golpe en la mesa clavando el cuchillo en la tabla de madera donde estaba cortando el salmón que nos había llegado en la mañana. Frunció el ceño e hizo una mueca al ver de nuevo al dueño del restaurante de enfrente. Levantó su mentón sacándose los guantes, lo miró fijamente mientras se remangaba las mangas dejando ver los tatuajes de sus brazos. Se sacó el mandil que llevaba puesto y me miró, no hacía mucha falta que me dijera nada más; yo asentí y vi como mi padre le hacía un gesto al señor Kim con la cabeza señalando el almacén y ambos se encaminaron para allá.
Otra vez iban a discutir.
Yo suspiré y me dediqué a terminar de hacer los rolls de sushi que mi padre me había enseñado a hacer desde bien jovencito.
El sonido de la puerta volvió a escucharse entrando YiJeong-hyung con el casco en la mano mientras se sentaba en una de las sillas que había delante de la barra. Me saludó con una sonrisa y alzó las cejas al escuchar como mi padre y el señor Kim discutían acaloradamente.
- ¿Otra vez? - yo asentí mientras suspiraba de nuevo y le preparaba el siguiente pedido a domicilio. Mi "tío" YiJeong me miró con comprensión mientras yo le ofrecía una cerveza- Tenemos para rato Jungkookie...
¡Ah! olvidé presentarme, me llamo Min Jungkook y tengo 15 años y soy hijo de Min "soltero sexy" Yoongi (como dicen mis compañeros y compañeras de clase). Y trabajo a tiempo parcial en el restaurante de mi padre.
Mientras terminaba el pedido y lo colocaba en la bolsa para entregársela a mi tío, el señor Kim salió hecho una furia sin mirar atrás o despedirse de nosotros.
Mi padre volvió de nuevo a donde estaba mientras se ponía un moño para amarrar el pelo largo que tenía. No dijo nada bajo la atenta mirada que teníamos sobre él, se lavó las manos y sin decir más retomó lo que estaba haciendo en un silencio sepulcral.
Miré al amigo de la infancia de mi padre mientras este intentaba preguntarle algo y mi padre lo fulminó con la mirada. Sin siquiera pronunciar palabra Yijeong hyung me miro y moviendo las cejas me guiñó un ojo para despedirse después. Cosa que en ese momento no entendí.
El sonido de la puerta se escuchó de nuevo mientras entraba un nuevo cliente, sonreí al saludarlo y fui rápidamente a atenderle mientras mi padre se lavaba de nuevo las manos. Mientras estaba tomando notas de la consumición, escuché como mi padre salía por la puerta mientras sacaba un cigarro y lo ponía en su boca.
Al volver de vuelta detrás de la barra, vi por la ventana como mi padre y el señor Kim se encontraron frente a frente mientras fumaban en silencio a cada lado de la calle.
Quien diría que esos dos en su momento fueran novios en el instituto...
¿Increíble verdad?
Pero esa historia, os la contaré en otro momento.
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¡¡Hola de nuevo!!
Me encuentro de nuevo por aquí para traer otra historia que lleva tiempo en mi mente rondando.
En esta historia, el punto de vista de la narrativa va a ser desde la perspectiva de Jungkook. Hace mucho tiempo que no hago este tipo de narrativa, con lo cual puede ser que me lleve un poquillo más de lo normal actualizar los siguientes capítulos. Esperemos que no, pero por favor tened paciencia ☺️
Lo que sí, en este caso sí va a ser un TaeGi (Taehyung TOP⬆️ y Yoongi BOTTOM⬇️). Lo dejo ya aclarado ☺️
Pues con esto, os doy la bienvenida a todxs a mi nueva historia.
¡¡¡Muchas gracias por leer!!!💜
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SUSHI MASTERS - TaeGi
FanfictionMin Yoongi es un cocinero especializado en Sushi que regenta el Sushi Bar heredado de sus padres. Le va todo genial en el barrio donde él vive de Daegu, pero un nuevo negocio abre delante del suyo, mucho más moderno y con un dueño que acapara todas...