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Derrepente la puerta tocaban, ella lentamente se acercaba para abrir, iba despacio para no hacer ruido.

— siete – ella dice seriamente.

— cinco – responde una voz masculina.

Abre la puerta sigilosamente para que el individuo entre al apartamento.

Huele el lugar – con quién estabas?

— con Jeongin.

— si y yo soy estúpido – se acerca – dime quién mierda estuvo aquí – serio.

— no te voy a decir, eso no te acontece – dice firme.

Ríe – valla pero si te estás alzando – ríe por segunda vez – claro que sí porque soy tu hermano mayor.

— hermanastro – sonríe.

— sigue dejándote llevar de las patrañas de ella y vas a llegar a loca, eres hija biológica de mi padre y mi hermana.

— de todas maneras no estoy para estar dándote explicaciones de mi puta vida – seria.

La agarra por el cuello bruscamente haciendo que ella intente zafarse de su agarre – eres una maldita mocosa de mierda, escuchaste? – le escupe en la cara.

ojalá te mueras pronto  – susurra.

Ríe — estúpida – dice para lanzarla al suelo y patearla.

{Ojalá y te mueras pronto maldito, dices quererme y me tratas como un animal}

Cada vez que salía por esa puerta supuestamente a “trabajar” siempre viene en ese estado, si no es de embriaguez es drogado o los dos.

Ella ya estaba acostumbrada a ese tipo de vida, no tenía a donde ir, sólo el apartamento que le pertenecía a él.

Después de haberla pateado hasta hacerla sangrar por la boca se detuvo para mirarla fijamente y sonreír cínicamente.

— sabes, serías perfecta para ser la novia de Hyunjin – ríe – él será un buen chico para tí, te tratará como una princesa – dice con tono de burla la última palabra.

púdrete – susurra con sus pocas fuerzas.

Agarró su teléfono y buscó un contacto para llamarlo por medio de este.

En menos de tres segundos en individuo contesta.

hola?

— hey bro, tengo a la chiquilla que te mencioné, es algo grosera , sólo que tienes que darle sus respectivos golpes y ella se acomoda – dice sonriente mientras miraba a ella.

— puedo pasar a buscarla?

— con gusto, sólo que ella tiene que irse mañana a la escuela, te llevas sus cosas y la traes cuando quieras.

— me la puedo quedar?

— considéralo un regalo antes de Navidad – sonríe.

— estás seguro? Porque siempre dices eso cuando te drogas y no me dejas echarle un polvo a tu hermana.

— Ash olvídalo, sólo ven por ella antes de que se la dé a Han.

— está bien, paso enseguida.

— está bien te espero – dice y cuelga la llamada.

Ella negaba lentamente mientras estaba en el suelo, lloraba silenciosamente.

— eso te pasa por andar de putita, espero que aprendas la lección.

— somos hermanos – dice débil.

— ahora sí soy tu hermano verdad? – ríe – bueno, como no somos hermanos al cien porciento te dejaré con hyunjin.

— ese es un cínico, ese hombre casi me viola – llorando.

— pero eres tan fuerte, mira la paliza que te di y aún puedes hablar, valla pero si me sorprendes más.

— te odio, mi madre se va enterar de esto y vas a lamentarte – llorando.

— pero si ella se fue con su patrón y te dejó abandonada, dejó una carta para tí, pero como me preocupé por tí la escondí – ríe.

— no..– empieza a llorar más.

Unos toques interrumpió la conversación, el mayor de fue a abrir la puerta dejando pasar al pálido.

La peor pesadilla de ella, ella juraba que su propio hermano iba a ser incapaz de semejante cosa pero demostró todo lo contrario.

— ahí está – dice entrando a la sala señalándola.

Se preocupa y va corriendo hacia ella para auxiliarla – oye estúpido, estás bien? Casi matas a tu propia hermana.

— suéltame, prefiero morir desangrada antes de ser salvada por tí – dice seriamente con poca fuerza.

— muñeca, cálmate, yo te voy ayudar, no te voy a hacer daño sí?

— púdrete.

. .


Su mirada estaba en el retrovisor, observaba cada movimiento de ella mientras que está estaba silenciosa.

— nena quieres algo?

— déjame en paz – seria.

— pero no quieres nada? Si quieres algo no dudes en avisarme sí?

— púdrete.

Ríe y sigue conduciendo – en mi casa vas a estar mejor, no te preocupes.

— si como no, y casi me la entierras mientras el otro estaba en el baño.

Ríe – como querías que me aguantara a tu lindo cuerpo.

— estúpido, ni siquiera estaba te seduciendo – enojada.

— pero tenías tu lindo uniforme de colegiada – dice sonriente.

— esa puta falda me llega a las rodillas – se enoja más.

— de todas formas ya no soy el mismo de antes, cambié para volver a tener confianza con Changbin  – sonríe y coloca una mano en el muslo izquierdo de ella – se te ve bonito ese short, y la camiseta, pero se te verán mejor mi ropa puesta en tí.

— iluso – refunfuña.

— y si te llevo a un restaurante para que comamos algo o comemos pizza en mi apartamento – dice mientras conducía.

— ....

— linda, a donde quieres ir?

— púdrete – seria.

Ríe – muñeca pero donde quieres ir?

— donde sea, menos contigo – malhumorada.

— entonces te llevaré a casa.

LovelyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora