-Nara... -escuche la voz de Saira, una compañera de aula- ¿Que te pasa?¿Estás bien? -levante mi cabeza y al verme su rostro mostró tristeza-
La conocia desde pequeña, la conocía y ella me conocía a mi, ella me abrazo consolandome y yo me desboder en sus brazos.
¿Lo había perdido? ¿Porque termine todo? Y otra vez mi estupidez ganó y actuó, eso fue algo estúpido, no quería terminarlo, pero ¿Por qué no me podía entender? Trataba de cambiar, intentaba dar lo mejor que podía y ¿No le basto? ¿Nunca seré suficiente? Todo fue una pesadilla, no lo volví a ver ese día, y el vacio que antes se habia llenado, volvio y se sentía aun mas peor. Las horas pasaban y cada segundo era una tortura en mi cabeza, su rostro y expresión aparecían en mi cabeza una y otra vez, era desesperante.
Llegó la hora de ir a casa, y pedía a Dios, para que mi abuela no me hiciera sentir peor, ya mucho tenía con Josh taladrando mi cabeza. Llegué y no había nadie, además de mi hermana que se preparaba para salir.
-Hola Nara ¿Cómo te fue hoy?
-Termine con Josh...- ella solo me miraba y yo no hacía nada, solo me lancé a la cama y trate de contener las lágrimas-
-La verdad, no sé que decirte...pero habrá otro que te hará olvidar al anterior, solo tienes que esperar...con el tiempo llegara -dijo para luego irse, yo no me sentía yo misma, sentía que al irme dejaba un pedazo de mi en sus manos-
El ambiente era pesado y frío, todo se volvió un poco oscuro y salí a la pequeña terraza, se había nublado y parecía que el cielo se caería. Segundos después las gotas de agua comenzaron a caer, algunas salpicaban mi cara por la brisa que las atraía y sentí frío...por primera vez sentí el frío en mi cuerpo, antes no lo sentía tan intenso, pero todo mi cuerpo parecía un cubo de hielo sólido. Me senté y admire los colores neutros y oscuros en el cielo nublado, el sonido de la lluvia me tranquilizaba mas, pero no me olvidaba que todo seguia igual.
Todo se había acabado...
Josh D' angelo
-¿Cómo esta ella? -pregunto a mi amiga frente a mi-
-Volví a ver la misma mirada de ante Josh -dijo Ari con preocupación y tristeza- Mira que yo no le ruego a nadie, pero por favor habla con ella aunque sea como amigos, ella era mas feliz estando contigo
-No sé si pueda ser solo su... Amigo... -lleve mi vista a mis piernas no podía dejar de moverlas con rapidez-
-Ella puede cambiar, yo lo sé, también sabía que esto iba a pasar y preferí no meterme en sus asuntos...pero es mi hermana y no me gusta verla así, por primera vez su luz volvió a brillar...
-No lo sé Ari, lo intentaré, pero no prometo nada -dije un poco serio, ella se alejo y si lo hizo fue por una razón, talvez no me quería y solo se burlaba de mi, pero algo dentro de mi me dice que vaya por ella y no la suelte más...solo que no podía-
Ari se había ido hace unos minutos, y después de un rato llegó Matteo, se que quería hablar sobre Nara, y no me agradaba la idea.
-Hola Josh ¿Espero que estés bien después de la desicion que tomaste? Que bien tomaste mi consejo
-¿De que hablas Matteo? -dije un poco fastidiado-
-De que terminaste con esa niña, me enteré que la vieron llorando como bebé
-¿Cómo dices? -estaba confundido ¿Me quería o no?- Yo no termine con ella, ella lo hizo conmigo
-No importa, lo que importa es que ya se acabó todo
-Hablamos luego -me levanté y me fui, era irritante tener que escucharlo hablar de ella de esa manera-
Mientras más escuchaba su nombre, más me dolía, más quería ir a abrazarla, pero no podía, tenía mis dudas, ¿La molestaba? ¿Me quiere? ¿Solo jugo conmigo? O ¿Quiere verme? Eran muchas las dudas.
Estaba lloviendo, y por mi cabeza solo pasaba la imagen de nosotros acostados, abrazados calentando nuestros cuerpos, y aunque nunca pasó, ese es mi sueño. Correr con ella bajo la lluvia y poder abrazarla con todas mis fuerzas, era mi sueño frustrado.
. . .
UNA SEMANA Y MEDIA
Había despertado, eran las 3 de madrugada, mamá se había ido ayer, y volvería en varios días, mi hermana se habia ido a dormir a casa de Winny, solo estaba yo y mi cama fria, habia llovido mucho desde aquel dia en el balcón y el frio era cada vez mas fuerte, sus calidos brazos me hacian falta. No podía volver a dormir por más que intentará, me levanté y mire por la ventana, todo el cielo estaba totalmente oscuro no se veían ni las estrellas. Salí de casa, cerrando con llave y camine, pero frené de golpe al verlo frente a mi todo empapado.
-¿Que haces aqui? -todo mi cuerpo ya se había empapado por completo, y sentí como algo en mi estómago se calentó, mis mariposas tenian una fogata-
-Nara... Perdón, no sé si te molesta verme ahora, pero no puedo estar sin ti, estas en mi cabeza y no te puedo sacar...
-Josh, yo...-de pronto senti sus labios encima de los míos y fue tan...real, hasta que desperté bajo la lluvia-
Estaba todo oscuro a mi alrededor, mientras las gotas caían sobre mi, todo era un sueño, solo fue un sueño y lo senti tan real, ese es mi castigo, por no darle el amor que él se merecía y por terminar todo, está es mi condena, pensarlo en el día y soñarlo en las noche.
Por alguna razón estaba en el parque cerca de casa, mi cuerpo no reaccionaba por un rato, no me podia mover, hasta que las gotas ya no caían mas y vi una sombra alta detras de mi, voltee y frente a mi estaba Josh con un expresión seria y un paraguas en sus manos. No quería hablar, no quería míralo, no quería que fuera un sueño otra vez. Empecé a caminar pero aquella sombra me seguía despacio, ya al pasar unos minutos decidí voltear un poco enojada.
-Ya déjame en paz!! ya no quiero que estés en mis sueños!! -grite-
-Esto no es un sueño Nara, soy yo...
ESTÁS LEYENDO
BLANCO Y NEGRO
Romance"Si lo amas, dejalo ir" Amar no se trata de soltar y olvidar aquello que algún día nos hizo felices, sino, de no dejar morir esa llama aún cuando la distancia los separa, luchar por eso que amamos de verdad. ¿Es natural querer soltar todo cuando ya...