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Jaehyun estaba sentada en la sala con su mirada perdida, tronando sus nudillos cada segundo mientras su cabeza daba vueltas y vueltas

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Jaehyun estaba sentada en la sala con su mirada perdida, tronando sus nudillos cada segundo mientras su cabeza daba vueltas y vueltas. Y aunque no quisiera su mente no podía concentrarse del todo en la situación que se encontraba.

Justo ahora le debería de ser más importante su hermana, pues aún no habia llegado a casa y al parecer nadie más ha sabido algo de ella. Pero su mente regresaba una y otra vez a JunHo, como repentinamente se disculpó y bajó del autobús. Eso no era común en él, espero que se negara y la siguiera hasta su casa hasta dejarla frente a su puerta, pero esta vez la habia escuchado y hecho justo lo que ella le pedía.

Sacudió su cabeza sacando de su cabeza la imagen del chico concentrándose en su alrededor. Sus padres se encontraban sentados en el sofá, su madre principalmente molesta mientras su padre estaba preocupado.

En el momento en que volvió a tronar otro de sus nudillos recibió una mala mirada de su madre, viéndose obligada a bajar sus manos hasta sus muslos en busca de mantenerlas quietas.

Ahora no era el momento en jugar con la paciencia de la señora Hong, suficiente habia tenido con el regaño que se llevó al llegar a casa. Pues era claro que Jaehyun se habia saltado clases, y tambien quedo muy en claro que se habia metido en una pelea por los golpes en su rostro.

Ahora el enojo de la señora habia empeorado, pues Jugyeong no regreso a casa temprano y sobre todo porque encontró su tarjeta de registro para una academia de belleza. Y ahora solo se encontraba esperando a que su hija menor llegara a casa.

—Papá, ¿puedo irme a dormir?— Pidió Jaehyun cansada de las malas miradas de su madre y los repetidos comentarios que habia estado haciendo hacia solo unos minutos, los cuales podía apostar que no tardaban en regresar.

—Claro que si, ve a descansar.— El señor puso una pequeña sonrisa en busca de hacer sentir mejor a su hija.

—¿Por qué irías a descansar si ni siquiera fuiste a clases?— Soltó la señora con molestia. —Te quedarás ahí hasta que tu hermana regrese.— Ordenó cruzando sus brazos manteniendo su entrecejo fruncido mientras miraba los papeles de la academia de belleza aún puestos en la mesa.

Jaehyun se quedó mirando a su madre, cada vez más molesta por su forma de tratarla. Abrió la boca lista para decir algo, pero antes de que siguiera pudiera soltar algo el ruido de la puerta la interrumpió.

—Ju-Jugyeong, estás en casa.— Murmuró con nerviosismo el señor llevando su mirada a la entrada.

Jugyeong entro a la casa con su mirada baja sin decir ni una palabra caminando hacia las escaleras lista para ir a su habitación. Pero antes de que siquiera lograra llegar su madre decidió hablar.

—Tú. ¿Dónde has estado todo este tiempo con el teléfono apagado?— Soltó la mujer desde el sofá.

—La biblioteca.— Soltó Jugyeong desganada comenzando a caminar de nuevo.

Second Lead • Han SeoJun [Edited]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora