Capitulo VII.

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Después de quince minutos, parecía qué todos habían olvidado lo que pasó esa mañana y continuaron las clases con total normalidad, aún así, inosuke evitó a toda costa la mirada de sanemi, aún se sentía incómodo pero no dejaría que tal sentimiento le perjudicará aunque las tontas caras de sus amigos no ayudaban.

Las clases con el matematico terminaron y el trío de amigos se dirigieron a lo que sería su siguiente clase.

- el amor es una mágia, una simple fantasíaaa...- cantaban al unisono sus amigos mientras iban caminando por los pasillos de su escuela.- es como un sueñoo y al fin lo encontré...- cantaban mientras reían por las caras de su afeminado amigo.

- okey, ya, maduren plis.- dijo inosuke volteando a ver a sus amigos con los ojos entre cerrados y con una expresión de fastidio en el rostro.

- jama bb, sabes, no pence que fueras tan intensa para venir tan temprano y ser el primero en decirle buenos días a tu profesorsito.- decía el rubio en un tono juguetos para enfadar a su amigo.

- si, aparte, nisiquiera nos habisaste que vendrías más temprano, te llamamos y no contestaste, ¿Que cosas tan ilegales anduviste haciendo con el profesor sanemi?.- reclamo tanjiro mirando a su amigo.

- okey, girls no, tienen toda su boca llena de cosas incorrectas y difamación, que feo que sean así, mi teléfono siempre está en silencio y vine temprano solo para no tomarme al idiota de douma tan temprano y jamás me metería con ese profesor tan fastidioso, dios; vivir cada día es más complicado.- dijo inosuke soltando un gran suspiro de fastidio.

- puras excusas.- comento zenitsu.

- oh, sobre eso, tu comportamiento con tu padr- con douma es algo agresivo, inosuke, deberías de darle una oportunidad...- comento tanjiro con nerviosismo, quería ayudar a su amigo.

- si bb, bájale tres rayitas.- comento el rubio.

- Aah, ustedes también, me tiene algo cansado ese tema, solo pito amor y comprensión.- dijo sarcastico. -pero hay les avisó si ocurre un milagro y de pronto me empieza a caer bien el idiota de douma.-

Zenitsu solo suspiro y tanjiro lo vio con preocupación, su amigo jama estaría en paz si no acepta en su vida al novio de su madre y eso también lo sabía inosuke pero eso solo lo hacía detestarló aún más.

- bien, aquí está el salón de clases, es artes.- mencionó tanjiro entrando al salón mientras a un  rubio le recorría un escalofrio por toda su espalda.

Entraron por completo al salón de clases y se sentaron en sus respectivos lugares, el rubio estaba algo nervioso por el primer encuentro que habia tenido con el profesor de artes, aun tenia sospechas de que fuera el o tal vez no, aquel dia todo paso tan rápido. había escuchado unos rumores de que el profesor de artes estaba saliendo con una alumna de último año, aunque solo eran eso, rumores, lo tenía algo nervioso por la clase de persona que seria aquel profesor con el que estaba obligando a compartir todas sus tardes de lunes a viernes, sus pensamientos fueron interrumpidos por la llegada de el profesor, zenitsu lo miro con terror.

- Buenos días! Soy uzui Tengen y  Seré su profesor de artes.- se presentó aquel albino tan alto que inquietaba al rubio.

Emepzo a impartir su clase con motivación y dedicación cosa que emocionaba a sus alumnos y cautivaba al rubio quien lo veía con admiración.

- okey, como primera actividad harán algún dibujo, lo que ustedes quieran, quiero ver quienes son los más llamativos en arte de está clase.- dijo con sonrisa en su rostro que hizo chillar a varias chicas.

El rubios saco los materiales que Hiba a utilizar, miro por unos segundos se oja en blanco; no sabía que dubujar así que solo empezo a trazar lineas esperando a que en algun instamte agarren forma. Se dejó llevar, no noto que el profesor estaba pasando por cada haciendo de sus alumnos revisando su dibujo, hasta que llego al rubio que todavía no se percatana de su presencia y seguia coloreando con una sonrisita en el rostro mientras tarareaba.

-¿Gatitos con... Sombreros?.- dijo con un tono jugueton en su voz, mientras miraba al rubio con una sonrisita igual de juguetona.

- ¿ah?.- el rubio se sobresalto un poco por apenas percatarse de la presencia del profesor, reaccionó y tapo su oja con sus brazos mientras un tono rojizo carmesí se apoderaba de sus mejillas.

- no, está bien, son bastantes tiernos jajaja.- comento el profesor tomando una de sus manos para apartarla la oja y apreciar bien los trazos y firmar su trabajo.- tienes buen pulso.- algo al rubio mientras lo miraba divertido por el sonrojo de sus mejillas, le sonrió y revolvió sus cabellos. - sigue mejorando.- y con eso se retiró de su lado, el rubio parpadio varias veces y parecía que su cara se ponía más roja con cada segundo que pasaba, ¿Que acababa de pasar? Se preguntaba el rubio.

- okey, gracias por prestar atención en la clase, nos vemos la siguiente clase.- se despidió de sus alumnos el profesor.- ah cierto, agatsuma zenitsu tu todavía no saldrás.- se dirijo al rubio con una expresión tranquila.

El rubio se asustó, se había olvidado de su papel como asistente del club de artes; se sentía sofocado, no sabía si el profesor recordaba su primer encuentro, eso lo tenía aún mas nervioso.

- nos vemos rubia.- se despidió inosuke.

- no te alteres tanto, suerte.- se despidió con una sonrisa tanjiro.

El salón de clases había quedado basio, a excepción de el y el profesor, claro, se acercó nerviosos al escritorio del profesor donde estaba sentado.

-s-si? Profesor.- pregunto tragando saliva un muy nervioso zenitsu con un leve sonrojo en sus mejillas.

- que mi aspecto desalíneado no te pongas tan nervioso niño, tu serás mi asistente, cierto?.- el profesor no quitaba esa sonrisa, pareciera que se estaba burlando de él, claramente no era el caso.

Su sonrojo se intensificó con aquel comentario, pensaba que encerio no recordaba su primer encuentro, volvió a tragar saliva y respondió.- ah, si, lo soy y por lo otro, encerio lo ciento, no quise jugarlo de esa manera.- se disculpo zenitsu con evidente vergüenza.

El albino se deleitó con aquella imagen tan pulcra que le estaba dando el rubio, en tan solo un instante analizó las facciones del rubio, sus labios fruncidos en un leve puchero, sus ojos color miel tan brillantes, sus mejillas rojizas y sus increibles cabellos rubios un poco despeinados.

- está bien, solo personas inseguras se ofenden ante comentarios como esos.- comento con seguridad el albino mientras volvía a revolver aquellos cabello tan suaves y sedosos que parecía que lo llamaban.- solo te llamé para conocerte, no pence que fueras tu mi asistenta.- volvió ese tono juguetón en sus palabras.- espero nos llevemos bien, zenitsu.

Zenitsu lo miro sorprendido, despidió ignorar lo de "asistenta" y le sonrió amable.
así es, el albino ya le había echado el ojo al rubio...


...


No sé, me gusta la idea de que uzui corteje a zenitsu jsjsj sería lindo. :3


El profe. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora