Cuando intentan secuestrar a la hija de un senador imperial, se le asigna a Anakin Skywalker protegerla.
ANAKIN SKYWALKER se deja seducir por el lado oscuro y por una joven princesa, Evangeline.
EVANGELINE ORGANA no dejará solo al amor de su vida, a...
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El inicio
Evangeline caminaba apresuradamente por las calles de Coruscant, alguien la estaba persiguiendo así que ella intentaba escapar. No era fácil de distinguir, pues una capucha cubría su rostro y el cielo oscuro no permitía la buena visibilidad.
Ella se asustó cuando la persona por fin se atrevió a tocarla, pero no duró mucho ya que otra persona atravesó su cuerpo con un sable de luz.
— Princesa Organa, he venido a buscarla — dijo un chico rubio cuando el cuerpo de la persona que la perseguía cayó al suelo ya muerto.
— ¿Quién eres? ¿Cómo se que no quieres hacerme daño? — preguntó Evangeline que también sacó su sable y aún sin encender le apuntó al chico.
— Mi nombre es Anakin Skywalker y soy padawan de Obi-Wan, seguro lo conoce — Evangeline se relajó al escuchar ese nombre, Obi-Wan.
— ¿Por qué Obi-Wan manda a su padawan y no viene él mismo? — dijo Evangeline confundida, pero bajando el sable de luz.
— ¿Sí sabe que eso está roto, verdad? — respondió Anakin desviando el tema y tomando el sable de Evangeline.
— Supongo que eres de confiar, Anakin Skywalker — hizo un énfasis en su nombre.
— Claro que si — dijo con un sonrisa de lado.
Ahora ella se sentía a salvo con él, aunque tenía una cara de enojado, pudo sentir toda la bondad en Anakin. Él guardó el sable de luz de la princesa y tomó su mano para guiarla a una pequeña nave e irse. Evangeline quería hablar un poco más con Anakin, pero se veía muy serio y como si no quisiera interactuar tanto con ella.
Se resignó a no hablar durante el viaje, pero Anakin no era discreto al mirarla, cosa que Evangeline quería ignorar, pero era una mirada intensa por parte del muchacho.
— Gracias por venir a buscarme, Anakin Skywalker — le sonrío.
— No hay de que, princesa.
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