Tal vez algún día

CAPITULO 4

5 de Marzo 2021:

Camino rápidamente hacia la biblioteca, hoy nos juntaríamos con Franco, Ámbar y el idiota de Dante a terminar el trabajo de historia que tenemos que entregar en dos semanas y como no era sorpresa para nadie, estaba llegando tarde. Hoy no tuvimos clases en la mañana y decidimos que nos juntaríamos en la tarde a terminar este tedioso trabajo.

Hacer este trabajo fue lo mas estresante de mi vida, Dante no me dejo en paz ni un solo segundo desde que empezamos a hacer y todo lo que decía estaba mal para el, siempre me llevaba la contra. Y tampoco me voy a hacer la victima, yo también lo he molestado, ¡pero el mas!.

Mi móvil sonó avisándome que había un mensajes nuevo, pare en la puerta de la biblioteca para leerlo, lo cual no fue la mejor idea porque alguien choco conmigo causando que casi se me cayera el móvil. 

Me di la vuelta para pedirle disculpas a la persona pero calle lo que iba a decir al darme cuenta de que era Dante, el rodeó los ojos y entro a la biblioteca, lo mire mal y entre tras el sin siquiera saludarlo.

—Miren quienes han llegado tarde, que raro de ustedes—brome Franco.

—Lo lamento, tuve que ayudar a mi hermana en algo—me excuse, Dante en cambio no dijo nada, solo se sentó al lado de Ámbar.

A veces me caía tan mal, ¡no fue capaz ni de disculparse por llegar tarde!. Antes de que pudiera sentarme al lado de Franco alguien me abrazo levantándome del suelo causando que me asustara.

—¡Hola!—saludo Valentino bajándome.

—Idiota, me haz asustado, casi grito del susto—los demás rieron menos Dante.

—Que suerte que no lo haz hecho sino nos echarían de la biblioteca para siempre... Pensándolo bien, hazlo, así no volvemos nunca mas aquí—bromeo, negué y me senté al lado de Franco.

—¿Que hace el aquí? Ni siquiera es de nuestro grupo—pregunte.

—Perdona, estoy aquí, puedo oírte—reí—. Solo vengo a dar apoyo moral, corazón—miro tras el a una chica un poco mayor a nosotros.

—Pues, en ese caso leerás esto—le pase el libro que Ámbar tenia en sus manos.

—¿Enserio?—me miro horrorizado.

—Si, en la biblioteca se viene a estudiar y leer, no a buscar chicas.

—¿Como puedes creer eso de mi, Oli?—puso una mano en su corazón dolido—. Solo intento ser buen amigo y ayudarlos, nada mas.

—Ya, claro—ironice y los demás rieron.

Nos pusimos a estudiar y como era de esperarse, Valentino no pudo leer ni siquiera una pagina entera antes de dormirse arriba del libro. Los demás si leímos e hicimos nuestra tarea, no era tan difícil pero lo complicado era leer demasiadas cosas y mas si no te gustaba leer, como a mi, lo único que había leído era toda la saga de Harry Potter y tarde casi tres años en terminarla.

—Oli Oli...—me llamo Ámbar con una sonrisa inocente distrayéndome de mi lectura.

—No te hago ningún favor—advertí.

—¡Pero si ni siquiera sabes lo que voy a pedir!—chillo causando que Valentino se despertara a su lado.

—¿Que sucede?—pregunto adormilado.

—Olivia es una mala amiga y no quiere hacerme un favor—rodee los ojos.

—Haber, ¿Qué quieres?—pregunte, ella sonrió alegre.

—Como tu ya sabes en una semana es mi cumpleaños...

—Si, ¿y que con eso?.

—Pues, quería pedirte... pedirles, en realidad—nos miro a mi y a Dante—. Si podrían llevarse sin ese día, por mi, por favor.