Al día siguiente desperté con el sol reflejando en mi ventana fue mi alarma para despertar, quise dejar este día para mi sin salir solo yo, poner música a todo volumen, quise intentar el baile que hizo Tom Cruise de poder ir en toda la casa bailando, tomar un tiempo de ducha, opte por la ducha me relaje pensando en encontrar un trabajo, tal vez deba vender mis cuadros, debo luchar por lo que me gusta, salí de bañarme y decidí disfrutar de la música cantando a lo alto me dejé llevar sin escuchar nada, fue hasta que detuve la música para tomar agua que escuché el timbre.
—Hola, una... disculpa es que no escuche —dice abriendo la puerta—..... él —se da cuenta—
—Hola, anoche... olvidé mis gafas, están aquí verdad.
—Ah, si pasa ya los traigo.
—Ah gracias —nota que esta solo con una camisa que la cubre dejando a la vista sus piernas—
—Aquí están —observa como evita el contacto— ¿que sucede? —pregunta extrañada—
—Ah... — carraspea, señalando la parte de abajo de la camisa—
—¿Que? — mira hacia abajo y se da cuenta— lo siento lo olvidé me pondré un pantalón.
—Esta bien solo necesito... y se fue.
!Que vergüenza como se me pudo olvidar¡ como podría bajar ahora sabes que olvídalo solo baja, no le di los lentes.
—Lo siento por... todo —expresó avergonzada—
—Está bien —responde con una amable sonrisa—
Tocan la puerta.
—En un momento, tomé sus gafas.
—Gracias, ah... me puedes dar agua.
—Si claro —se va a la cocina por una vaso con agua—
—Gracias —toma el vaso—
—Hola —abre la puerta—
—Así que tu eres la nueva —comento —
—Ah, sí? —respondió extrañada—
—Eres muy hermosa, tal y como lo habían dicho... me podrías dejar pasar? —señaló viéndola de arriba abajo con una sonrisa desvergonzada —
—Disculpa no te conozco así que... —intenta cerrar la puerta—
—No te preocupes me puedes conocer mejor —declaró abriendo más la puerta—
—!!Oye¡¡ —exclamó—
Que le sucede a este tipo.
—Solo quiero conocerte... —ve a Richard quien lo observa con una mirada fulminante— veo que tienes visita en otro momento vendré, ya me tengo que ir preciosa —anuncia guiñandole—
—Me alegro... digo que le vaya bien —sonrie—
Vi cómo se fue, el miedo cruzó por su rostro ¿que hizo que se fuera?, pero que bueno que se fue creo que me estaba coqueteando.
—Ah, me tengo que ir muchas gracias por el agua y mis gafas —habló, cortésmente—
—Fue un placer...quiero decir de nada —lo mira a los ojos— que raro.
—¿Que ocurre? —pregunto extrañado—
—¿Sus ojos, creí que eran color miel pero ahora los miro oscuros, usa lentes de contacto?
—Eh...nop —sugirió nervioso— es por el reflejo de la luz —parpadeó varias veces—
Me tengo que ir... muchas gracias de nuevo...—declaró nervioso y distante— adios —se va—
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Una lucha sedienta
VampireAlguna vez has sentido tanta sed que no puede esperar a saciarse, alguna vez lo experimente pero de agua claro, ¿o alguien mas lo quizo de otra cosa que no fuera agua?