prologo

515 20 0
                                    

Se podía ver a un hombre moribundo, todo ensangrentado. Sus ropas estaban rotas y se le podían ver heridas muy graves.

Él estaba de rodillas, sosteniéndose con su espada.

Todo a su alrededor estaba completamente destruido; también se alcanzaba a ver un montón de cadáveres, todos ensangrentados y mutilados. Aquella gran cantidad de cadáveres creaba charcos de sangre en todo el lugar.

Los cadáveres se contaban por miles; eran tanto de demonios, ángeles, dragones, ángeles caídos, youkais, entre otros.

Aquel sujeto se puso de pie, mirando todo a su alrededor con una mirada vacía y sin emoción alguna.

Todos estos seres sacrificaron sus vidas solo para terminar con él, pero de hecho lo lograron, pues ya estaba a punto de morir.

Él suspiró y sonrió fríamente. "Sabes, asquerosa basura, lograste lo que querías, pero ¿a qué precio? Sacrificando la vida de toda tu gente y hasta la tuya".

Lo dijo mirando al bastardo, el cual estaba tirado en el suelo, casi ya muerto.

Este tipo fue el causante que empezó todo esto.

El tipo que permanecía aún de pie le sonrió burlonamente. "¿Qué se siente que todo lo que hiciste haya sido en vano, pues no ganaste nada?

Estás a punto de morir sin haber podido cumplir tus metas. Jajajajaja.

Aunque yo no sé exactamente cuáles son tus objetivos, no sé por qué hiciste todo esto. No creo que fuera solo por el odio hacia mí, que ni sé por qué me odias.

Además, exactamente, ¿para qué querías este orbe?". Él había sacado un orbe que desprendía un hermoso brillo azul.

El tipo que estaba muriéndose en el suelo intentó tomar el orbe desesperadamente, pero no pudo, pues su cuerpo ya no le respondía.

"Sabes, supe que esta cosa al parecer era muy importante para ti. Fue por eso que hice todo lo posible para obtenerlo antes que tu gente. Aunque me costó mucho lograr conseguirlo, lo logré antes que ustedes.

¿Sabes por qué lo hice? Pues quería joderte por todo lo que me has hecho pasar, y parece que logré lo que quería.

Pero bueno, ahora dime, ¿para qué sirve esto exactamente, hermanito?".

Pasó un momento y no hubo respuesta.

"Mmmm, hey, responde", lo dijo mirando al tipo en el suelo.

Clavó su espada en el tipo, pero no hubo sonido ni movimiento alguno.

"Haaa, parece que ya te moriste. Quería hacerte sufrir más, pero parece que ya no se podrá. Tú no merecías una muerte así. Debiste sufrir más antes de morir. Te salvaste, asquerosa basura".

Él suspiró y, caminando lentamente, sosteniéndose con su espada, llegó a una zona no muy lejos de donde estaba su hermano y se sentó recargado en la roca.

"Parece que este es mi final. Terminé igual de lamentable que la vez anterior, pero por lo menos esta vez no se salieron con la suya.

Me pregunto cómo funciona esto", lo dijo mirando el orbe, el cual brillaba de un color azul.

"Qué cosa más extraña. Siento un enorme poder, pero no sé para qué sirve. Por lo menos, antes de morir, debió decirme su uso. Me esforcé tanto en conseguirlo, moriré sin saber cuál es su función.

Pero bueno, nada me impide tratar de usarlo. Además, no pierdo nada si trato de activarlo. A lo mucho podría matarme si no se activa de ese modo, pero no importa, pues estoy por morir.

Además, no creo que suceda algo peor que eso, ¿verdad?".

Él procedió a probar varias formas de activarlo. Colocó su sangre, trató de crear un enlace, transfirió su energía y varias formas más, pero nada funcionó.

"Me rindo, nada funciona. Tampoco me mató ni nada. Bueno, al menos lo intenté".

Mirando todo a su alrededor, suspiró. "Este mundo terminó hecho un desastre. No creo que sobre ningún ser vivo en este lugar. En nuestra batalla, mucha gente inocente murió por nuestra culpa.

No es que me esté lamentando, pues no me arrepiento de nada de lo que hice, pero si saldría victorioso y vivo, no querría vivir en un mundo devastado.

Pero bueno, ya no importa. Nadie ganó en esta batalla, todos perdimos. Hasta yo".

"Mierda, creo que ya llegó mi hora. Qué feo lugar para morir. Ya he experimentado la muerte, pero no me gusta esto".

Poco a poco, el sujeto dejaba de respirar. Su cuerpo cayó recargado en la roca, perdiendo la vida y dejando este mundo.

"Mmm, yo morí, ¿no es cierto? Entonces, ¿qué es esta situación tan familiar?"

Miró todo el lugar, reconociendo de inmediato el lugar.

"Reconozco este lugar. No quiero admitirlo, pero es mi mundo original.

Él estaba sentado en el suelo con un uniforme de secundaria, todo golpeado y sucio. Además, era joven nuevamente.

Esto me trae muy malos recuerdos. Estoy en el pasado.

¿Cómo pasó esto? Algo con el poder de hacer esto... mmm, ya veo, fue el orbe. Esa cosa es capaz de eso, estoy seguro. Además, creo que de algún modo logré activarlo. No pensé que esa fuera su función.

Pero no estoy feliz ni nada por esto. Creo que la muerte era mejor, pues por fin descansaría.

La verdad, no quiero volver a vivir o repetir todo lo que viví en este mundo.

No vale la pena.

Pero lamentablemente, no puedo hacer nada. Ya estoy aquí otra vez.

Además, suicidarme o matarme no me gusta.

¿En qué año estoy?

Mmm, si mal no recuerdo, estoy cursando el segundo año de secundaria. Tengo 14 años. Soy un debilucho sin agallas, no soy capaz ni de defenderme.

Ya me han sucedido muchas cosas malas, lo cual creó un trauma en mí que no he superado. Por eso no soy capaz de avanzar.

Soy completamente un inútil en este momento.

Aún no he cometido la tontería de unirme al clan Gremory, en donde me sucedieron muchas de mis peores desgracias. Eso es bueno.

¿Qué más? Creo que faltan cosas, pero no me acuerdo. Lo dejaré para después.

Tendré que aceptar esta situación, no puedo hacer nada para cambiar esto. Ya retrocedí y no hay nada que hacer.

Tendré que volver a vivir esta vida.

Pero esta vez será diferente, muy diferente a la primera vez.

No me llevó a nada ser un hombre bueno. No obtuve nada por ser una buena persona. Solo me pisotearon, utilizaron, pasaron por encima de mí, se aprovecharon de mí, hasta traicionarme. Esas perras se aprovecharon de mí, todos solo me usaron.

Esta vez no será así.

Si mal no me acuerdo, a los 15 años ese poder despertará, pero el problema fue que al tener un cuerpo tan débil casi me muero.

Primero tendré que fortalecer mi cuerpo al límite para que no se repita lo de esa vez. Además, teniendo un recipiente más resistente, podré ser capaz de usar mi poder mucho mejor y no me estaré destrozando a cada rato.

Me acuerdo de la primera vez. La alegría que sentí al despertarlo fue mucha, pues así le demostraría a mi madre que no era un inútil. Eso fue lo que pensé en ese momento, pero ahora no hay necesidad de eso.

Además, aunque lo desperté, mi madre nunca me vio con buenos ojos.

No necesito la aprobación de nadie para sentirme bien.

Yo, Issei, cambiaré mi destino. No dejaré que suceda lo mismo que la primera vez.

El regreso del heroe caidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora