La alarma sonó y por fin pude despertar de aquel terrible sueño, podía escuchar los gritos de mis hermanos por la mañana pero yo apenas si podía respirar, desde que nos tuvimos que mudar de ciudad por el trabajo de mis padres he estado teniendo terribles pesadillas en las cuales siempre algo viene tras de mi, grito y grito pero nadie me ayuda.
Levantándome de mi cama me miro en el espejo, mis ojeras son cada vez más y más notables, y los gritos de mis hermanos no ayudan para nada con mi mal humor de la mañana, tienen 24 y 26 años pero aun así se siguen comportando como un par de niños, peleando por nada más y nada menos que por quien comerá el ultimo trozo de pay de manzana.
Rápidamente entro al baño para poder prepararme para mi primer día en la nueva universidad, una vez preparada bajo hacia el comedor para desayunar.
-¿Quieres café, cariño?- pregunta mi madre, yo solo me limito a asentir ya que estaba en mi mundo tratando de recordar mejor que es lo que me persigue en aquella pesadilla que me ha estado siguiendo las ultimas noches. Una vez terminado mi desayuno voy por mi mochila para poder salir de la casa camino a la escuela. -Solo falta Luke... !LUKE, NO QUIERO LLEGAR TARDE EL PRIMER DIA¡- Grite desde el auto, como si ser la nueva no fuera lo suficientemente malo, ahora llegaré tarde. Es mi segundo año de universidad y no deseo ser más el centro de atención ya tuve suficiente de hipocresías, bullying y esas cosas.
-Pequeña, se que es el primer día no debes de recordármelo. Tenemos mas que tiempo suficiente no te preocupes- me dijo Luke, al fin subiendo al auto para dirigirnos hacia la escuela. Y tal y como lo pensé llegue tarde por lo que me senté hasta atrás sola, no era suficiente con ser la más pequeña en casa también lo seria en clase puesto que tomaría algunos cursos avanzados. El tiempo paso volando en clase y cuando ya iba a la mitad abrieron la puerta.
-Señor Zacharius, de nuevo tarde nos honra con su presencia. Solo pase y tome asiento- menciono el profesor. Entonces comenzó a caminar hacia mi, solo puedo decir que el era hermoso, cabello tan negro como la noche, piel bronceada, barbilla bien definida, ojos perfectamente oscuros, de gran musculatura y complexión, era un hombre, un hombre hipnotizante. Aparte mi mochila del asiento de a lado, pero el solo me paso de largo dándome una sonrisa burlona ¡que vergüenza!
-Para la siguiente actividad será en equipos de dos, sus compañeros de banco, solo será para repasar conocimiento anterior y recién aprendido- nos dijo el profesor, por lo usual no me gusta hacer trabajos en equipo ya que tiendo a ser perfeccionista y termino rehaciendo la parte de mi compañero, en cambio si lo hago sola me aseguro que este bien desde el inicio. Justo cuando pensé que me salve de hacer equipos, siento una mirada sobre mi y es cuando escucho una gruesa voz -¿Profesor si yo no tengo compañero puedo estar con la chica nueva?-.
-Claro señor Zacharius, de hecho podría mostrarle el campus a la señorita Roshmakova y conocerse, ya que este trabajo lo llevarán a cabo en sus casas- dicho esto yo solo pude dejar caer mi cara en mis manos ¿qué más me podría pasar?
De acuerdo esto no puede ser peor-Muy bien chica nueva ¿por donde quieres iniciar? Tranquila no muerdo... a menos que tu me lo pidas.
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Livet I Blodet
VampirEn la oscuridad y en la penumbra me acecha pues mi vida el desea. ¡Advertencia! +18 Escenas de sexo explicitas.