Capítulo 4: No eres la única persona en el mundo

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La alarma suena y me levanto con poco ánimo como todos los días, me coloco mi ropa y como alguna que otra comida chatarra que tenga antes de ir al colegio, Anon se encuentra de buen humor pese a todo por la posible amistad que se genere con Stella, ya que estuvo pensando sobre ello en la noche, la chica pese a todo lo raro que es ella lo trata bastante bien, entendió mis gustos e incluso intenta que acepte mis propios gustos no como una falla, es extraño que tome en cuenta las opiniones de otra persona más de una chica como ella.

"Supongo que debo dejar de ser tan mierda en general" *suspira, mientras camino.*

El resto del día es como siempre, en clases compartiendo con Fang aún no me acostumbró a usar pronombres neutros, pero ya es cada vez más normal en las charlas, en la hora de almuerzo nuevamente me encuentro con Rosa y Stella, por algún motivo Stella se ve menos alegre de lo normal, Rosa se ve un tanto preocupada por ella, pero decido no preguntar más allá, simplemente decido saludar.

"Hola chicas" *saludo con una sonrisa.*

"Hola Anon" *Stella saluda, su rostro era menos alegre de lo normal, pero aun así mantenía su sonrisa.*

"Hola Anon" *Dice Rosa con una sonrisa pero aún preocupada por Stella.*

*Colocaba mi almuerzo en la mesa* "¿Cómo va su día?" *preguntaba con un tono alegre para intentar relajar el ambiente.*

"Como siempre con clases y manejando el club de jardinería" *Decía la Anquilosaurio con tono alegre.*

"Bien, simplemente en clases" *respondía la Estegosaurio con un tono un poco decaído.*

"Verla así es un poco deprimente, ugh me odiaré por lo que dire, pero supongo que funcionara para animarla" *decía para sí mismo en sus pensamientos* "Oye Stella, ¿y si me vuelves a leer las cartas? Ya pasaron unos días, quizás dicen algo nuevo" *decía con una sonrisa, no podía creer que pidiera semejante cosa, sobre todo por esas estúpidas cartas, pero supongo que la animará.*

*Los ojos de Stella brillan y se abren, su cola demuestra alegría también* "¿de verdad quieres que te lea las cartas?."

Rosa sonríe al verla animada y me mira con una cara de agradecimiento por alegrar a su amiga.

"Claro que sí" *respondo con una sonrisa.*

"Entonces comencemos" *saca su mazo de cartas con fundas de Sakura Card Captor y comienza a sacar 3 cartas* "La primera carta menciona que tus decisiones van por buen camino, la segunda que aún te quedan muchas decisiones importantes para tu futuro y puede que también para el de alguien más y la tercera se repite nuevamente mencionando la cercanía de un amor, pero que cada vez está más cerca" *sonríe con confianza por su lectura*.

"Así que tus cartas persisten en que encontraré el amor" *Dice con un tono burlón* "de todas maneras, gracias por la lectura" *pese a tener una sonrisa, sigue pensando que es una idiotez creer en ellas.*

Después de esto el almuerzo fue más tranquilo y alegre, hablando sobre las clases, el club de jardinería, como este era usado los sábados para castigo para los alumnos problemáticos o castigados. Pensar en perder un sábado en esa actividad era algo que no me parecía agradable, Rosa me ofrece si quiero ayudarlas a las dos un sábado, a lo que me niego de manera amable.

"Oh vamos Anon, ayudar a mover sacos de abono y sacar plantas podría ayudarte a ir ganando fuerza para ser más como saitama" *Decía Stella con una mueca burlona.*

"Stella tu maldita...." *La miraba con molestia.*

*Rosa miraba perdida sin entender de qué hablan a lo que pregunta con duda* "quien es ese Sai-algo."

¿Una carta decidió mi destino o fui yo?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora