Capítulo 8: Inicio de algo bello

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El camino a la casa de Stella fue tranquilo, lleno de miradas que se cruzan, sonrojos y sonrisas, nuestras manos nunca se separaron en lo que duro el resto del camino. Es una sensación extraña para mí, este calor en mis mejillas y nerviosismo, al llegar a su casa decidimos ir a su habitación, era como me lo imaginaba, con algunas figuras sobresale una muy detallada de Genos, posters de anime de distintos tipos, un cubrecama de doraemon y una alfombra con los signos zodiacales.

"Wow tienes bastantes cosas increíbles" *mi voz era sincera, pero al mismo tiempo aún siento esa sensación de cringe a todo lo otaku*.

"Oh gracias me gusta coleccionar cosas de las series que me gustan bastante" *decía ella sonriente con su cola enrollada en su pierna*.

Así decidí simplemente hacer a un lado esa sensación estúpida de cringe, quiero disfrutar esta tarde con ella, me mentalizo y ambos comenzamos a ver el anime de One punch Man, la tarde pasa tranquila, ambos bastante cerca uno del otro, ella apoyaba su cabeza en mi hombro, nos sujetamos de las manos, conversábamos y cantábamos el opening. Luego de pasar gran parte de la tarde viendo la serie, decidimos preparar algo para comer, una vez listo nos sentamos y comenzamos a conversar.

"La estoy pasando bastante bien contigo, no tengo mucho problema para simplemente sentarme y ver anime una tarde entera, si es contigo" *sonrió de manera genuina*.

"¡Yo también! Lo he pasado genial contigo, tu compañía ha sido muy grata" *se sonroja, juntando sus dedos índices*.

*Te miro directamente a tus ojos* "sabes Stella sobre el beso del otro día, deberíamos hablar de eso."

*Veo a Stella mirando al suelo y un poco apenada* "sí... Bueno debo disculparme por eso, fue impulsivo y me dejé llevar, yo de-."

"Tranquila Stella, no estoy molesto, solo quería conversar sobre ello porque, ese fue mi primer beso" *decía apenado y acariciando mi cabeza calva*.

*Ella me mira con sorpresa y se sonrojaba* "¿espera... acaso yo te robé tu primer beso?."

En ese momento la abrazo, no sé por qué hice eso, mi cuerpo se movió por sí solo.

"Sí, pero estoy agradecido que fueras tú...porque de verdad que tú me...." *Mis palabras no salían, aun pese a todo lo que ya paso me sigue costando decirlo* "me gustas Stella."

*Ella se sonroja, me mira con sus ojos brillantes* "yo..." *ella mira a otro lado y suspira, luego me mira otra vez* "¿podríamos tener un beso de verdad esta vez?."

Me congelaba, me quedaba ahí unos segundos, era una pregunta que sabría qué pasaría en algún momento, pero aun así me sorprende.

*Me sonrojaba, mis palabras salían con dificultad* "yo.. Claro que....ugh si me gustaría."

Ella me mira sonrojada, lentamente coloca su cara cada vez más cerca de mí, su respiración agitada golpea mi cara y mis labios, se detiene unos segundos antes de que ella junte sus labios con los míos, en un beso algo complicado, pero que poco a poco encontrábamos la forma más cómoda, nos abrazamos en un beso suave y romántico. Una vez que el beso se rompe, ambos quedamos respirando algo pesado, pero con una sonrisa en nuestros rostros.

"Este si cuenta como mi primer beso contigo" *me rio levemente aun abrazándola*.

*Ella sonríe de vuelta aún sonrojada* "supongo que sí, este es nuestro verdadero primer beso" *su cola me envuelve por la espalda* "supongo que ahora somos pareja, ¿no?."

Aún quedaban un poco para que me fuera, decidimos seguir viendo el anime de One punch-man, ahora con leves interrupciones en las que ella me daba alguno que otro beso o abrazo, cuando queda un poco para retirarme sentimos la mamá de Stella, por lo visto llego más temprano del trabajo que su padre.

¿Una carta decidió mi destino o fui yo?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora