Alana Garza Müller, hija de un ex famoso pianista Fernando Garza y una famosa empresaria Frida Müller.
Alana y sus hermanos Albert e Ingrid vivían con su padre desde que el matrimonio se separó perdiendo contacto con su madre.
Alana ama la música de...
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Países Bajos / Zandvoort
El día de la carrera había llegado y vaya que era un mundo de personas, estaba impactada en la cantidad de personas que llegaban a ver 20 autos correr y 20 personas tratando de no matarse en la pista, el primer día de carreras libres no entendí nada, estaba tratando de ocultarme de la prensa y sali perdiendo pero mi alivio era que nadie me había reconocido así que el día de Qualy me permiti aprender más del deporte y entendiendo su punto de competencia.
Hoy era el tercer día, la carrera final en todo ésto, aquí se decidía quien iba a ganar el GP de Países Bajos y los aires apuntaban a Max quien en la mañana ni siquiera tocó su desayuno, así que con mucho cuidado me acerque a su auto donde el ya estaba listo para competir
-Si yo estuviera en tu lugar ya hubiera vomitado el auto. Maldita suerte que no desayunaste nada -dije viendo a Max aún con los lentes oscuros puestos y llamando su atención
-Si que estás loca. No me ayudes -dijo Max rodando los ojos y fijando su vista a la pista
-Hey, estaba jugando y todos dicen que vas a ganar, así que no hagas que pierda mi dinero -dije viendo a Max para ponerme a mi altura con una sonrisa triunfante
-¿Apostaste por mí? ¡Alana eso no se hace! -dijo Max viéndome alarmado lo cual me confundió un poco
-No entiendo. Entonces voy a perder mi millón -dije viendo a Max confundida a lo que el se quedó mudo por unos minutos
-Maldita sea Alana, siéntate y no hables con nadie que no sea conocido para tí. No, mejor no hables con nadie -dijo Max estresado ante mis palabras, uno de los ingenieros le dió una señal a lo que me separé del auto y camine hasta las pantallas a ver a Max, quien se posiciono en primer lugar y esperaba que siguiera en eso.
-Esto es para escuchar a Max -dijo Victoria llegando a mi lado y pasandome unos auriculares
-Gracias -dije sonriendo mientras me los colocaba y no perdía de vista las pantallas Leclerc y Hamilton le iban pisando los talones a Max, pero este no daba su brazo a torcer y dudaba mucho de que quisiera perder la carrera de su casa.
-Sabes, eres la primera chica que lleva a casa después de Kelly -dijo Victoria después de un rato llamando mi atención para quitarme un auricular
-¿Puedes hablarme de ella? El no lo hace -dije viendo a Victoria quien se debatía en decirme o no
-Kelly es su ex novia de hace ya varios años -dijo Victoria dejándome asombrada de que Max dejara a una mujer, por lo poco que lo conozco se con mucha seguridad de que a el no le gusta perder a las personas valiosas de su vida
-Eso está claro Vick, pero necesito más detalles -dije viéndola curiosa de lo que estaba a punto de contarme
-Lo dejo con una simple carta, una carta donde decia que iba a volver con el padre de P. Max la busco, le lloro y le rogo tanto para que le cerrará la puerta en la cara. Max empezó a caer en chicas, fiestas y alcohol. No le estaba dando una buena imagen a la escudería así que Christian le puso un alto y dejó de hacerlo. El que te haya llevado a casa y traído al trabajo dice que encerio te tiene un aprecio -dijo Victoria explicando un poco de la ruptura de Max y hasta a mí me dolió eso, la tal Kelly se había pasado de la raya, lo mejor era que le dijera las cosas en la cara y no en una maldita carta. Estaba tan metida en mis pensamientos que lo único que me sacó de ellos fueron los gritos de celebración
