Solo mátame(Arlefuri Omegaverse)

La Llorona( capitulo 4)

Furina había comenzado a llorar en medio de aquella sala del trono. No podía creer que estaba embarazada, era imposible, su maldición se lo impedía, estaba segura de eso. Entonces por que estaba embarazada? Por que lloraba? Frustración? Alegría? Tristeza? Miedo? Desesperación? Ni ella sabía, eso frustró sus planes, pero también la hacía muy feliz, pero ella merecía eso? pero también significa que Arlecchino la podía desechar como si juguete ¿Quien quisiera jugar con una Omega embarazada? Nadie, o al menos eso era lo que pensaba furina.

Arlecchino: furina, que pasa?- dijo mientras limpiaba los labios de su Omega con la manga de su camisa-  por que lloras?

Furina: buaaa!! Quiero volver a casa!!!

Arlecchino: entiendo- dijo para cargar a furina de manera nupcial- lamento tener que retirarme ahora, pero MI Omega necesita atención, si me disculpan.

Pierro: no pienses que te salvaras tan fácilmente- Arlecchino le lanzó a la zarina algo rápidamente pero pierro lo atrapó como si nada- un ataque? Esto se puede considerar una traición.

Arlecchino: tómalo como quieras, yo le llamo cumplir mi deber- comenzó a caminar para salir del palacio- ya volveremos a casa, no te preocupes.

Pierro iba a detenerla, pero algo llamó su atención, lo que le había lanzado a la zarina no era ni más ni menos que la Gnosis Hydro. Eso sorprendió aún más a la zarina y a los heraldos, se suponía que la gnosis Hydro estaba siendo custodiada por Celestia, Arlecchino había omitido eso en su reporte? Era lo más probable. Después de todo Arlecchino era capaz de hacer lo que sea para conseguir lo que quiere. Al menos había cumplido con su misión y realizaba todos sus deberes, ya no tenían nada para poder reclamarle algo.

Arlecchino: ya dejaste de llorar?- pregunto y no recibió respuesta alguna- furina?

La Omega se había quedado dormida, no la culpaba, lo que acababa de ocurrir sumado a que la noche anterior fue especialmente intensa, furina debía estar realmente cansada. La Omega estaba aferrada a la ropa de Arlecchino. Que habrá pasado por la cabeza de furina al momento de enterarse que estaba embarazada? Sabía que una noticia así podría causar diversas reacciones, generalmente alegría y emoción. Tanto le disgustaba a furina la idea de tener un hijo con Arlecchino como para llorar? No podía quejarse, sulos plan habia salido a la perfección, instintos maternos de furina serían más grandes que su ambición de morir, además... Le estaba excitando la idea de ver a su pequeña, frágil y llorona Omega con el vientre abultado y lleno de sus cachorros.

Arlecchino: que tan grande te pondrás?

Furina: no me abandones...- dijo entre sus suelos- por favor, no me abandones.

Arlecchino: es por eso que lloraba? Pensaba que la iba a abandonar por que estaba embarazada? Que linda.

Al salir se encontraron con fréminet y Lynette, que ya habían encontrado un restaurante. Pero ya no iba a ser necesario, Arlecchino volvería a casa y se tomaría una semana libre. Por eso mismo tuvo que liberar a lyney, este se encargaría de reemplazarla toda esa semana. Cuando llegaron a la mansión lo primero que Arlecchino hizo fue dejar a furina en su habitación. Se acostó junto a ella y espero hasta que despertara, ya le había dicho a Lynette que se encargará del orfanato.

Furina: uh? Donde estoy? Fue todo un sueño?

Arlecchino: ya veo que despertaste, mi pequeña llorona.

Furina: Arlecchino!! Ya volviste!? Debí haberme quedado dormida!!Se me olvidó calentar la comida!!- ve la ventana- uh? Aún es de día? Por que estás aquí? No tienes que estar en el orfanato?!

Arlecchino: vamos, cálmate- dijo mientras acariciaba el vientre de furina- puede que sea malo para el bebé.

Entonces furina chocó contra la realidad una vez más, de verdad estaba embarazada y por que Arlecchino se preocuparía por ella? Antes de poder siquiera pensar, furina había vuelto a llorar. Arlecchino se preguntaba seriamente si ese era su modo predeterminado.

Arlecchino: por que lloras?

Furina: por que ya no me quieres como tú juguete!! Me voy a poner gorda y fea!! Buaaa!!! Y tú me vas a dejar en la calle!! Buaa!!

Arlecchino: mi pequeño juguete- Dijo mientras la abrazaba por la espalda y seguía acariciando el vientre de su Omega- estés gorda, flaca, rellenita, herida, destrozada, yo siempre voy a querer jugar contigo.

Furina: de verdad? No estás mintiendo?

Arlecchino: bien, para que entiendas, eres mía!- dijo para pegar contra su cuerpo a la Omega- no dejaré que nadie más te tenga! Solo yo puedo jugar contigo.

Furina: Entonces no me abandonaras?

Arlecchino: no, por que eres mi juguete más preciado... Pero... Si quieres seguir a mi lado... Tendrás que hacer algunas cosas...

Furina: lo que sea!! Pero por favor no me abandones!! Ni a mi hijo!!

Arlecchino: cariño, que te hace pensar que me detendré solo en uno?

Furina: eh?

Arlecchino: después de que nazca, lo seguiremos haciendo hasta que tengas al siguiente, y lo haremos una, y otra y otra vez, hasta que ya no puedas tener más hijos.

Furina: creo que estoy en peligro....

Notas del autor: como están? Espero que bien.

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