Una Segunda Oportunidad •Soukoku•

⁠✿⁠ 6⁠ ⁠✿

Habían pasado casi 6 meses desde que ambos chicos se habían reconciliado.

Dazai había comenzado a quedarse a dormir en la casa de Chuuya más seguido, con la condición de que al día siguiente el pelirrojo lo llevara en su moto hasta la agencia.
De todas formas ya no importaba si alguno de los detectives los veían, ya que, "misteriosamente" (Rampo) habían descubierto la relación de ambos chicos.

Flashback:
En los últimos meses Dazai había estado haciendo su trabajo en vez de estar molestando como habitualmente lo hacía, esto asombraba y a la vez asustaba a algunos miembros de la agencia.

Especialmente a Kunikida, quien le exigió más de 15 veces a Yosano que le hiciera estudios para ver si estaba sano.

La doctora al principio también estaba un poco preocupada pero después de comprobar más de 15 veces que Dazai estaba sano, decidió dejarlo.
Por otra parte Rampo solo veía la situación desde su escritorio mientras comía dulces y se reía de la confusión de Kunikida, quien al notarlo fue a encararlo.

-Qué es lo que sabes Rampo?- habló molesto apoyando ambos brazos en el escritorio del azabache.

-Yoo?.. nAdA- mintió descaradamente con una voz que decia que obviamente estaba mintiendo-

-Rampo, tú sabes algo?...- Habló la doctora cruzandose de brazos. Ella también quería saber por qué Dazai estaba tan alegre y trabajador últimamente.

-Nop.- aseguró mientras giraba su silla para darles la espalda. -auuun quee, tal vez recuerde algo con algunos dulces- dijo mientras giraba su silla nuevamente para mirarlos.

La doctora y el de anteojos se miraron, al principio se negaron, pero su curiosidad era mas grande así que después de un rato aceptaron.-
-De acuerdo.- dijeron ambos a la vez.

-2 bolsas de caramelos y una caja de donas a cambio de la información. ¿Trato?- dijo estirando ambas manos para sellar el trato con ambos.

-Trato.-respondieron los otros dos y salieron en busca de la paga de Rampo.

Al volver, dejaron las bolsas de dulces y la caja de donas sobre el escritorio del azabache.

-mmmm bien- Tomó una de las bolsas y la abrió metiéndose unos cuantos caramelos a la boca. Miro la caja de donas y sonrió. -estas seran para mas tarde cuando vaya con Poe- dijo guardando la caja en un cajón.

-Bien, estamos esperando, que tienes por decir? - lo apuró la doctora.

-Bien, Dazai esta muy trabajador porque se reconcilió con su ex compañero de la Port Mafia-

-Ex compañero de la Port Mafia?... te refieres a..-

-Sisi, el bajito, que siempre usa sombrero, ése ése.- Lo corto Rampo antes de que el rubio pudiera terminar la oración. -Y deduzco que ahora son novios.-

-Pensé que el Chuuya odiaba a Dazai... nunca imaginé que terminarían siendo pareja- dijo la doctora.

-Dazai y el del sombrero elegante son pareja?- habló un pequeño rubio.

-Kenji tú cuándo llegaste!?-

-estuvimos aquí todo el tiempo- respondió una niña de cabello azul.

-oigan está mal escuchár las conversaciones ajenas!- Los regañó Kunikida.

-Pero.. Kunikida-kun..tampoco parecía ser una conversación secreta.- Habló el albino que estaba sentado en su escritorio junto a Tanizaki y Naomi, los cuales estaban escuchando atentamente.

-Yá, todos vuelvan a sus trabajos!!- gritó el rubio haciendo señas raras.

-Entonces es por éso que está pidiendo salir antes todos los días?- pensó en voz baja un hombre albino que escuchaba desde detrás de la puerta de su oficina.