Nuestra historia

capítulo 6

A buena mañana, Kira y Hyuu salieron del Centro Pokémon con dirección a la ruta 4. Allí tendría lugar el enfrentamiento entre ella y el científico que creían era del Equipo Plasma.

La ruta 4 se encontraba al norte de Ciudad Porcelana, era el área desértica de la región de Teselia. La mayor parte del año ocurrían tormentas de arena y, por lo que habían escuchado en las noticias, hace poco tiempo los obreros habían terminado de construir las edificaciones de hace 2 años, pero debido a las condiciones climáticas rápidamente se convirtieron en ruinas.

Para fortuna de los chicos, ese día no había ni un rastro de la tormenta de arena por lo que se alegraron, no tendrían problemas con atravesar la zona pero tampoco podían confiarse. Estaban por llegar a las ruinas cuando fueron detenidos por Acromo.

–Me alegra que hayas llegado hasta aquí.

–Sólo acepté tu idea de combatir –Kira trató de poner su mejor cara seria posible.

–Que descortés resultaste ser –murmuró para sí mismo– hablando del combate, recuerdo que la invitación te la hice a ti, no a él –Acromo señaló con un dedo a Hyuu.

–No tienes de que preocuparte, Hyuu vino como mi acompañante –miró de reojo a su amigo para que le siguiera la corriente.

–Así es –afirmó poniendo una mano sobre su corazón– Kira me comentó que eres científico y me picó la curiosidad –Hyuu estaba hecho una furia por dentro, jamás de los jamáses diría un cumplido tan cursi a alguien.

–En ese caso, no veo más inconvenientes –se ajustó los lentes mientras se hacía a un lado del camino– ¿acaso no les da curiosidad lo que hay aquí detrás? –dijo sonriendo a la vez que seguía con la mano sobre sus anteojos.

–Pues rocas, ¿qué más van a ser? –Hyuu respondió de manera altanera y con un poco sarcástico.

–Me temo que no son rocas, mi querido amigo –les dirigió la vista de una manera bastante arrogante– lo que están viendo no son nada más que unos crustle.

–Entonces no podremos pasar de aquí, los crustel no son fáciles de movilizar.

–Hay una forma de moverlos, joven campeona –Acromo le dirigió la palabra a Kira para posteriormente sacar un artefacto de uno de sus bolsillos.

Kira y Hyuu se vieron de reojo completamente confundidos, ¿qué rayos acababa de decir ese loco? Los crustle tenían fama por ser unos cabezas duras y no abandonar los lugares donde se paraban a descansar, si se encontraban con 1 lo mejor era tomar otro camino.

–Con mi máquina, que acabo de desarrollar, es posible moverlos.

Acromo extendió la antena del aparato electrónico, tecleó varios botones y en menos de 1 minuto los crustle se alejaban dejándoles el paso libre por el sendero. Tanto Kira como Hyuu estaban boquiabiertos ante tal espectáculo, ¿cómo los pudo controlar con ese cachivache?

–Bueno, pasadas las presentaciones. Es hora de nuestro combate.

Kira se colocó en posición y ambos lanzaron una pokeball al mismo tiempo. El primer pokémon de la chica era su sawk, Oak. El de Acromo era un magnemite que resultó ser más veloz que sawk al hacer el primer movimiento con suma destreza.

–¡Usa fuerza! –ordenó Kira.

El pokémon hizo caso a la petición de su entrenadora y atacó de manera habilidosa logrando que el adversario retrocediera. En seguida Kira volvió a indicarle a su sawk que atacara esta vez con punta pie logrando hacerle bastante daño al contrincante. Acromo chasqueó la lengua ante los movimientos que acababa de presenciar, no esperaba que ella fuera tan buena peleadora. Con otro movimiento fuerza, Oak derrotó al magnemite enemigo.