Capítulo XXXI

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Desperté a en la madrugada, sudando y temblando de miedo, había soñado que Voldemort me ordenaba matar a Hermione, a Ron, a Ren, Futaba, Ryuji y todos mis amigos traidores de sangre y muggles

Por suerte, no había despertado. Salí de la cama, saque una guitarra acústica que mi papá me regalo, me senté en el escritorio que había y empecé a tocar la guitarra mientras veía la ventana

Estaba perdida en mis pensamiento, tocando notas que ni sabían que cuáles era. Posiblemente, ya eran las 7 o 7:30 am, estaba tan perdida en mis pensamiento que ni sabía que hora era

- ¿A que horas despertaste? -Pregunto una adormecida Hermione

-No dormí-Le contesté-No pude dormir, estúpido Voldemort-Toque una nota un poco fuerte-Estúpidos sueños-Toque otra nota más fuerte que la anterior, me levante de la mesa- ¡Estúpida Umbridge!

Antes que pudiera hacer alguna estupidez... Lo cual era romper la guitarra contra una pared, Hermione me abrazo por la espalda

-No rompas la guitarra y cálmate-Me pidió Hermione-Se que este año no es lo mejor, pero no hagas otra locura

-Bien, bien. No haré mas locuras-Dije, Hermione me dio un beso en la mejilla

Paso una semana exactamente y dejé de usar la máscara, obviamente. Dolores al verme me dijo que el castigo de esta semana será peor

Y vaya que lo fue, Harry, Draco y yo volvimos a escribir con esas estúpidas plumas «No debo decir mentiras» Cuando ya íbamos a salir cuando Dolores me detuvo

-No, no. Señorita Black ¿Podrías quedarte? -Pregunto la misma con una voz «dulce» rodee los ojos y mire a los chicos

-Vayan a la casa de Ravenclaw cuando el prefecto pregunten por qué andan ahí, digan que necesitan a Futaba-Dije, ambos asistieron y se fueron, me gire a ver a Dolores- ¿Qué quieres?

-Oh, solo quiero recordarte el hecho que hayas escapado de tu castigo. Pero, primero un té-Dijo Dolores, la miré confundida

-Es una trampa-Dije, ella negó- ¿Truco? -Volvió a negar-Ok... Voy a aceptar tú te

Me senté al frente de ella, me sirvió él te, olí él te primero para que no tuviera nada raro para luego darle un sorbo y que el líquido pasara por mi garganta. Note un sabor raro, mire mis brazos que tenía cicatrices, poco a poco desaparecieron

- ¡Lo sabía! -Exclame mientras me levantaba de la silla-Bien, ya me canse ¿Cuál es la otra cosa para que me dejes ir?

-Oh, es solo escribir algo con la misma pluma-Dijo Dolores

Un rato después salí de la oficina de Dolores con el brazo derecho sangrando, ella me obligó a escribir «No debo escapar de la autoridad» y «No debo dudarle nada a la profesora»

Me fui corriendo a donde estaba ubicada la sala común de Ravenclaw, donde estaba Harry, Draco y Futaba en la entrada a la sala

- ¡Futaba, ayuda! ¡Ima! ¡Watashi wa kega o shita! (¡Ahora! ¡Estoy herida!)-Exclame mientras me acercaba a ella rápidamente

- ¡Vaya! Primero ¡¿Qué carajos?! -Señalo mi rostro-Segundo, las clases de japonés sirvieron

-Futaba-Dije ya frustrada-Luego hablamos, y con ustedes dos tambien-Mire a Draco y a Harry que estaban impresionados al verme

-C-claro-Dijeron ambos y se fueron

Entre a la sala común de Ravenclaw y, wow. Era mas grande que la sala común de Gryffindor ¡Hasta tenían una estatua de Rowena Ravenclaw! Las grandes ventanas arqueadas estaban muy decoradas, y las paredes están decoradas con tapices color azul y bronce. El techo abovedado está pintado como el cielo estrellado, esta decoración se repite de igual forma en la alfombra del suelo color azul marino.

Lo Único Que Quiero Es Verte Al Salvo (En Edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora