vENGANZA O AMOr {kookmin}

Complicado

Cuando las cosas pasaron de mala idea a una demasiada complicada, solo que nunca imaginó que fuera a ser demasiado. Cuando Namjoo los dejó solos a él y su 'jefe' en aquel lugar fue tan estresante como estar en el infierno 

 — Eres muy hermoso _ Le confesó y Jimin solo empezó a morderse el labio para no decir cualquier estupidez

Pero aun así miraba a cualquier parte para encontrar algo y poder clavarla en el pecho, cuello, ojos, algo, lo que fuera, pero estaba nervioso para hacer algo 

 — ¡Hueles rico! _ Diablos, se asustó tanto que Jimin brinco porque al estar metido en sus pensamientos no se dio cuenta cuando el enemigo estaba tan cerca de él, muy cerca diría él

Las manos del sujeto en verdad necesita hacer algo porque de lo suaves que se sentían en su piel era tan desgraciadamente difícil para él no suspirar

Lo sujeto de su cintura y sintió el calor de su pecho en su espalda y más en su culo, lo que las chicas tanto deseaban, eso ya le asustó por demás, pero no hizo nada, se obligó a dejarlo sin nada en su mente 

 — Vas a disfrutar _ Era una pregunta o estaba aseverando lo que pasaría

En eso entró a Namjoo y camino a donde estaba el parado como un bobo, sintiendo algo en pecho, pero se estaba llamando al mismo que fuera indecente y bien jodido 

 — Llévalo a su habitación y que ponga cómodo _ Dijo las palabras mágicas, Namjoo le agarro del brazo y lo sacó de aquel lugar _ Nos veremos en la noche, bailaras solo para mi _ Eso fue todo y empezó a caminar con el tipo alto y buen parecido 

 — Lo tienes muy alegre _ Confesó _ Pero cuidado, él es un mal si se encabrona 

 — ¿Eso qué quiere decir? _ Lo pensó mejor, pero respondió

 — Eres el único hombre que trae a vivir en su casa, en su cercanía y sin seguridad _ Eso resumía todo en la mente de Jimin, ¿acaso lo tenía donde lo quería?, ¿acaso su belleza le aseguro su muerte? 

 — Solo es algo de... suerte, creo _ Se podía dar ánimos, pero su mente estaba maquinando la muerte de este bastardo 

 — Sí que lo creo, solo ten cuidado, nunca lo vi tan animado con alguien menos que le quiera dar el mundo entero sin nada a cambio _ Algo ya no le cuadro en esa aseverada palabra, pero callo y no dijo nada, eso de preguntar cosas solo lo hacen los encubiertos y él estaba buscando matarlo

Llegaron a la escalera que subía por la entrada, Jimin miró de nuevo todo ese glamour y camino subiendo la misma hasta la punta que era la parte central y caminaron a la parte sur de la mansión, de ahí miró el pasillo

Todo era más caro que un palacio tan jodido que no sabía si estaba viviendo un sueño de algún tipo de locura o algo así, pero lo dudaba en parte

Llegaron a una puerta blanca y era distinta a las demás y eso ya dio otra luz para él, miró mientras Nam le abría la misma, su boca no podría estar más que abierta que nada

La habitación era prácticamente más grande que su casa y eso que era grande, las ventanas era tan iluminadas que daban al jardín trasero, su vista era magnífica

Entró y vio todo como en un palacio, la cama era tan grande que sólo parecía para nadar en ella y no se diga de la pequeña sala que tenía ahí mismo, el balcón le encantó, entró al baño y esa fue la respuesta a su mente

El tipo perdió la cordura 

 — ¿Te gustó? _ Nam preguntó viéndolo lo asombrado que estaba

 — De ley, pero... _ Se detuvo sus palabras y ya— No sé cuál sea tú 'pero' _ Se rio al verlo a la cara 

 — ¿Todo esto por dejarme follar? _ Preguntar era tonto en sí, pero igual lo hizo 

 — No me gustaría ser tú _ Y salió de ahí

Jimin se quedó parado viendo a la nada y no era solo viendo, estaba pensando que tal vez la habitación tendría cámaras o micrófonos para saber qué hace o dice, todo debería pensar y no en cómo lo va a follar y a dejar después de ese acto

Ya estaba dos pasos delante del jefeEl jefe, regresó a su escalofrío que sintió cuando estaban juntos y más cuando lo tomó con manos de seda llenas de suavidad extrema

Se dejó caer en aquella cama y miró el techo, las molduras y el lienzo que estaba pintado en ellas, debería tener un gusto de la patada si tenía eso pintado en señal techo de la habitación, nada concordaba ya 

 — Sé en olvidada decir que a las siete debes estar listo _ Lo miró desde donde estaba acostado 

 — ¿Listo para qué? _ Jimin se preocupó porque ya vio la cosa bien real 

 — Hoy vendrán a verte y con cualquier ropa que elijas de las que tienes en el clóset listo para él _ Joder cada vez lo ponían peor de nervioso 

 — Bueno _ Dijo todo enojado por tal palabra

Pero cuando se detuvo a ver lo que le dijo, hoy bailaría para él ya le dio una idea de todo lo pasaría y se le estremeció la carne de solo imaginar hacer algo a tan bajo precio, todo valga la pena porque él de aquí no saldría si no era lleno de venganza y eso pasaría cuando lo matará con sus propias manos

Así que dejo todo de lado y empezó a caminar al clóset, se detuvo otra vez a ver lo hermoso que era, viendo que había ropa de cualquier color y marca cara que podía reconocer, pero le llamó la atención ver que era su talla y algunos eran sus gustos

Le dio miedo pensar y preguntarse cosas, una de ellas era

¿Hasta dónde estará obsesionado con él?

Solamente lo vio ayer y ya le tenía todo esto, no, algo se le pasó, tal vez el tipo ya lo había visto mucho antes y se encargó de hacer de averiguar su vida

Eso era otro problema que tal si averiguo mucho más allá de lo que debía y supo toda su verdad, diablos y más diablos porque ahora tenía sentido las palabras de Jin

Nada es lo que parece

Como las odiaba y eso ya era algo para ponerse a pensar

Camino a las puertas que había ahí y todo estaba bien menos una foto de él, está solo estaba en su foto dizque que era la que puso Jin con su expediente falso, cada célula de su cuerpo se estremeció porque nada bueno salía de ahí

Se despabiló obligándose a no pensar en ello y sin pensar que tal vez Jin este ahora con una bala en la cabeza por sapo y mentiroso, así los trataban a los agentes de investigación, los narcos eran los buenos

Debía tranquilizarse sí, porque hoy, desde hoy, todo acabaría, ya que él lo mataría con sus propias manos y ...

No sabía si saldría vivo de ahí, pero no importaba porque mataría al maldito que le quitó todo, todo su amor y lo más preciado, su hijo