Capítulo 1

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Mi nombre es Jeny Thomson y tengo 16 años.

Empezaré por contar les un poco sobre mi:

Mido 1.68, se podría decir que soy alta.
Soy delgada, debido a que no como mucho.
Mi cabello es despeinado, ya que no lo cuido como debería, es oscuro y liso llega hasta por debajo de los hombros. Tengo piel pálida y ojos color miel.

Nunca me considere hermosa ya que siempre soy la que pasa desapercibido, la que es invisible.

Mi madre y yo vivimos en un departamento bastante acogedor en la ciudad de Nueva York. Vivimos en el cuarto piso, departamento 7B.

Ustedes dirán: «esta chica es completamente normal»

¿Han escuchado esa frase de las apariencias engañan? Por supuesto que sí y esta no es la excepción.

A los pocos meses de vida, mi 'padre' si, entre comillas porque el nunca estuvo, para mi está muerto.
En fin, como la mayoría de los hombres:
-Conoce a la chica
-La enamora
-La ilusiona
-La abandona

Según mi madre, cuando mi 'padre' supo que yo venía en camino, decidió irse con otra puta y dejar a mi madre para que se las arregla ras sola.

En ese tiempo, vivíamos en otro departamento mucho más caro y mi padre era el que pagaba el alquiler, la comida, etc.

Cuando se marchó le dejo a mi madre todo ese peso y por falta dinero -ya que mi madre no trabajaba- nos tuvimos que ir.

Tuvimos que buscar refugio en otro lado y rápido.

Mi madre encontró una casa que estaba alquilando cuarto, la casa era de una pareja de ancianos tal vez de unos 68 años.

Con el poco dinero que mi mamá tenía, sólo nos ajustaba para alojar nos un mes.

En ese lapso de tiempo, mi madre encontró trabajo de mesera en un restaurante que quedaba a unas cuadras de la casa donde nos alojamos.

Para ese entonces todavía no había nacido.

Cuando mi madre reunió suficiente dinero en todo ese mes, sé mudó al actual departamento donde vivimos hoy en día.

Para ese entonces, mi madre tenía 7 meses de embarazo

Siguió trabajando de mesera, ocupándose del departamento y de mí. Por eso admiro a esa mujer.

Hasta el día de hoy, no sé cómo fue que nací, si un hospital, en casa...En fin, eso no es nada importante.

Creerán que las cosas fueron mejorando, que la casa se llenó de felicidad el día de mi nacimiento, pues no fue así...fueron de mal en peor.

La Historia de JenyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora