🤍Rodolfo "Rudy" Parra🤍

224 9 0
                                    

Era el día más especial de mi vida...

Puesto a que justamente era el plazo del tercer aniversario de mi noviazgo con Rodolfo Parra, como lo suelo apodar "Mi Vaquero", el sargento mayor de la unidad "Los Vaqueros" del país mexicano.

Tan solo la forma en la que me tomaba de la mano, transitando por aquella calle donde nos conocimos por primera vez, en el sitio que justamente expresó lo que sentía por mi, cuando le dije el si definitivo, iniciando nuestra bella relación.
...

-¡Au!- Hize un quejido al tropezar, cayendo al suelo con alguien accidentalmente.
-¡Perdón señorita! ¿¡Se lastimo!?-Preguntó aquel hombre vestido de militar con un rifle en una de sus manos, preocupado ofreciendo su mano para levantarme del suelo.

Era alto, de cabello negro y liso que era acomodado con un gel especial, piel trigueña, ojos ligeramente rasgados, barba recién afeitada, y su mirada que trataba de mostrar intimidacion.

Maldita sea que guapo hombre, pensé.

...

Era ya el anochecer de un largo día, Llevaba en mis manos un extravagante ramo de mis flores favoritas, unida a una caja de chocolates al sabor licor que tanto disfrutaba mi paladar, un regalo tan especial para mí. Mientras el mantenía una placa colgada a su nuca personalizado a su nombre, haciendo juego con un reloj de pulsera plateada que a mi gusto le quedaba muy masculino. Su calidez, gentileza con algo de perversidad me llenaba por completo de felicidad, realmente parecíamos la pareja más maravillosa del mundo, cada uno de esos besos que daba en mis labios y mejillas, me demostraba lo mucho que me amaba, a lo que yo correspondía con una risita devolviéndole un beso más apasionado que el anterior.

El me dirigió hacía su pequeño departamento que estaba a unas cuantas calles del lugar, según me tenía una sorpresa lo que me hizo emocionarme, la desesperación de lo que podría ser me consumía, además de que era muy impaciente, el siempre era muy detallistas que sabía que está ocasión no sería la excepción.

-¿Ya puedo abrirlos?-Preguntaba curiosa ya desesperada por saber que era.

-Solo un poco más, no te agobies tan rápido Princesa-Me respondió con mi título en su típico acento mexicano, me fascinaba como me apodaba.

La guía de sus manos me sostenían hasta llegar al edificio, a lo que parecía su departamento, escuchando como abría la cerradura de su cuarto, para sujetarme, adentrandome hacía la habitación, tratando de no tropezarme con cualquier objeto que talvez el desordenado de Rudy haya dejado por hay.

-Listo-Pausó-Ahora abre los ojos.-

Fue cuando me lleve la mano a mi boca por la impresión en la forma en que decoró su apartamento solo para mí, más de mis flores favoritas en el piso, globos en formas de corazón por doquier, caminando por todo un sendero de velas que guiaban hacía su cuarto.

Cada que me acercaba hacía el cuarto mis ojos se iluminaban más hasta ver su recamara, la que siempre solía tener destendida, ahora tenía sábanas completamente blancas acompañadas con pétalos de rosas formando un corazón, una botella de champagne con dos copas a un lado de la mesita de noche, fruta picada en un recipiente elegante, más chocolates, hasta un pequeño sombrero de vaquero negro a un lado de este.

-¿Te gusta?-Me preguntaba rodeando sus sobresalientes brazos morochos por mi cuerpo y posando su barbilla en mi hombro.

-Rudy...-Fueron las únicas palabras que salieron de mi boca sorprendida ante lo bello que decoró, tenía mejor gusto de cualquier diseñador de interiores.

Me volteó hacía el sosteniendo mis manos por sus hombros con una gran sonrisa en mis labios, enserio iba a llorar.

-Enserio no debiste molestarte-Casi pequeñas lágrimas se asomaban por mis ojos.

Call Of Duty MW x Reader (One Shots +18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora