Sueños y Pesadillas

Capitulo 3 - Maren

~ Semanas Después ~

No puedo dormir.

Estoy emocionadísima, el cosquilleo que me recorre el cuerpo solo confirmo más el nerviosismo que me carcome.

Es hoy.

Hoy 26 de septiembre a las 3:00 tomare el vuelo que me llevara a Cartmel, en donde se encuentra la mansión Lennox.

Me levanté, cuatro de la mañana y apenas e podido pegar el ojo en toda la noche.

Salí de mi cuarto y voy por el pasillo que llevaba a las escaleras.
Justo cuando pretendo bajar las escaleras, note que la puerta del estudio de mi padre estaba entre abierta, y podía ver que le luz estaba encendida.

¿Estaría trabajando a estas horas? -pensé, mientras me asomaba.

Al hacerlo, me di cuenta de que el estudio no habia nadie.

Seguramente se habia quedado hasta tarde trabajando y se le había pasado apagar la luz al salir.
Seguramente estaba preparando los ultimos detalles del proyecto que pronto se llebaria a cabo en su trabajo.

Apage la luz y cerre la puerta, baje las escaleras y llegue a la primera planta, fui a la cocina a por un vaso con agua. Pase por la puerta que daba al patio trasero, iba a volver a mi cuarto para intentar volver a dormir, y no se por que, pero de pronto me apetecia tomar un poco de aire fresco. Avance a la puerta corrediza, la abrí y salí.

El aire me dio de lleno en la cara, agradecí haberme puesto una sudadera antes de salir, de lo contrario habría muerto congelada ahí mismo.

Me senté en el sofa que estaba cerca de la piscina. El agua estaba tranquila, apenas se altero cuando una pequeña hoja cayo, seguramente era de una de las flores que haba plantado mamá, no se que le había dado estos días con querer "ponerle vida a la casa" -como ella misma decía- había mandado a plantar unas flores, también un árbol, pero al final no le gusto por lo que mando a quitarlo y decidió encargarse ella misma. Lo único que dejo fue el árbol.

Tanto mi padre como yo le dijimos que había quedado muy bonito, -que no era mentira- pero nos ahorramos el detalle que había dejado exactamente igual que al principio.

Pero al menos a ella, ahora si, le había gustado.

Estaba tan sumergida en mis pensamientos, que no me di cuenta de que mi madre se había sentado a mi lado.
-No te puedes dormir ¿Verdad? -me pregunto, con la mirada fija en la hojita que flotaba en la superficie de la piscina.

-Si, lo es -respondí esbozando una pequeña sonrisa- estoy emocionada, apenas y puedo creer que en unas horas subiré a ese avión para ir a la mansión Lennox como candidata.

Ella paso su brazo por mis hombros para abrazarme y pasar su mano por mi cabello oscuro, igual al de mi padre.
-Pues ya somos dos, se que no soy yo quien ira, pero me alegro mucho por ti. Aun que debo de admitir que también estoy algo triste por que no te veré en diez semanas ¡Diez!

Yo me pegue mas a ella y repose mi cabeza en su hombro.

-Tranquila, que estaré en contacto con ustedes tanto como pueda.

-Se que así será, pero tampoco quiero que te distraigas por eso, tu concéntrate en las pruebas, se que encontraras tiempo para hablarnos y ponernos al corriente. De lo contrario ten por seguro que me presento ahí para ver que aun vives ¿de acuerdo?

Las dos reímos.

-De acuerdo -exclamé.

No la podía ver, pero sabia que sonreía.