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Fabio poco a poco iba perdiendo la cordura,hasta el punto que no sabía ni que hora era, ni como se llamaba .

Estaba tan desquiciado que hubo un día,que todo termino.

Aquel día,Fabio fue a buscar a esa cosa por su casa.

—¿Donde estás?—Decia Fabio mientes se reía como un maníaco.

Estuvo buscando por horas pero no lo encontró, entonces se puso serio de verdad y fue a la habitación de sus padres,y cogió la escopeta que tenía su padre que era de su abuelo,y fue a buscar a esa cosa otra vez.

—Tengo una sorpresita para ti,solo sal de donde estés ,no te voy a hacer daño.— Decía cada vez más desquiciado.

Fabio pasó horas buscando,esas horas acabaron en días,pero nada ,Fabio no encontraba ni el más mínimo rastro ni indicio de aquella criatura que mató a su familia y a su mejor amigo.
Fabio ,como no podía más , agarro la escopeta, disparo a todas partes dando la casualidad de que la criatura que le estaba acechando recibió 3 disparos en puntos vitales,volandole el pecho entero y la cabeza.

Cuando Fabio se dió cuenta, grito de alegría. Pero eso duró poco ya que no tenía a nadie más,así que víctima de la soledad a los pocos días en casa de Fabio se escuchó un disparo,y la ventana de Fabio se torno roja con manchas de tonos de ese mismo color ,y después no se escuchó nada más dentro de aquella casa. La cual fue investigada de arriba a abajo pero no se encontró a nadie dentro,el paradero de la familia Pinto fue desconocido.

DaemoniumDonde viven las historias. Descúbrelo ahora