Mi historia comienza hace unos ocho años, cuando tan solo era una niña.
Todo comenzó un día de primavera, me encontraba en el campo con toda la familia, ya que, solíamos pasar todo el domingo juntos. Ese día, decidí llevarme a una amiga, y junto a ésta y mi prima, correr una de las mayores aventuras que jamás se hayan conocido.
A pesar de nuestra corta edad, osamos adentrarnos en un mundo, al cual considerábamos mágico, ese mundo, era un bosque cercano a donde se encontraba mi campo. Sabía que tenía algo raro, porque cada vez que iba con mis padres, notaba esa sensación extraña sobre aquel lugar y sentía que algo se escondía entre aquellos gigantes con ramas que parecían protegerlo con gran resistencia y poder.
Cuando era pequeña, solía ir a menudo a ver a estos gigantes que me fascinaban con su grandeza y su belleza. A veces, me sentaba en las pequeñas piedras que lo rodeaban para contemplarlo en todo su esplendor, viendo cada detalle de su interior, mientras los pájaros hacían de él su refugio más seguro.
Recuerdo, en pequeños fragmentos, que me perdí, pero algo tuvo que pasar para que en mi mente no existiese tal recuerdo, y mis padres sólo me contaban trozos de historias para que me quedase tranquila, aunque si podía recordar unos ojos verdes, pero no conseguía poner una cara para ellos, todo estaba borrado por alguna causa que sinceramente desconocía y nadie me ayudaba a recordar.
A veces, mi abuelo me contaba historias que decía que habían pasado, éstas, estaban llenas de grandes aventuras, de seres increíbles y lo que es más, de mucha imaginación y fantasía. Con los años,aquellas historias fueron cobrando menos importancia para mi, cada vez le hacía menos preguntas sobre como sobrevivían unos o de cómo podían luchar pueblos vecinos por una comida o cosas que con esa edad necesitaban una explicación, aunque mi abuelo lo contaba con una emoción muy fuerte como para creer que esos relatos eran mentira.
Así pues, a los pocos años, decidí emprender un viaje hacia lo desconocido, para hallar respuestas sobre lo que me ocurrió en aquel paraje, sin saber las consecuencias que ello me acarrearía.Lo habíamos preparado todo, para que una vez hubiésemos terminado de comer, coger nuestras mochilas y una tienda de campaña para las tres y comenzar nuestra andadura por el bosque que rodeaba la montaña del lobo.
Aquello tenía buena pinta al principio, por la ilusión que teníamos, pero yo iba con otra intención, recordar mis recuerdos y saber que ocurrió en realidad y por qué mi abuelo solo me contaba ciertas historias a mí y no al resto de mis primos. Necesitaba comprender ciertos aspectos de todo lo que me rodeaba y saber que quería decir con todo aquello que me contaba de aquel bosque encantado.
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VIAJE HACIA EL ARCO IRIS
FantasyEs la historia, del viaje de tres chicas en busca de una aventura, donde, sin darse cuenta, se adentran en un mundo mágico, en la que una de ellas tiene un vago recuerdo del príncipe de aquellos bosques y en el que encuentran una pequeña ciudad que...