HYBRID BNHA

FAIRY IIDA TENYA

Tipo: Medieval – Hadas - Caballeros

Situación: El rey Todoroki, es codicioso y competitivo. No podía soportar ser monarca de un reino inferior al de su competencia. Por ello, procuraba albergar tesoros poco comunes dentro de sus murallas. De esos elementos, le faltaban las alas de un hada. Por ello, pidió a su oficial general del ejército real cumplir con la terea...

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En el reino de Aralon, gobernaba un monarca codicioso y competitivo. Le enfurecía no llegar a ser el país #1 y ser reconocido como tal. Él sabía que era el segundón y así seguiría siendo a menos que trabajara en contra de ello. Por eso, su reino era próspero y ameno para todos sus habitantes. Pero ese factor no era realmente un buen diferencial contra su competencia que tenía los mismos indicadores.

Una noche, fría de otoño, Enji estaba observando hacia el bosque, que albergaba las más extrañas criaturas jamás vistas. La relación con estas criaturas era vaga. Se basaba en un sencillo principio de si tu no me tocas, yo no te toco. Pero nada más.

Mientras Enji se encontraba englobado maquinando en su mente que otras acciones podrían llevar a Aralon a la gloria, su reina Rei, se acercó por detrás colocando suavemente sus manos detrás de su espalda. – Deberías venir a la cama – Susurro, contra la espalda de su esposo – Debería seguir trabajando para superar al rey Toshinori. No tengo tiempo para cosas tan banales – Dijo con ira contenida. Rei observaba con cautela el mismo lugar que su marido observaba. Amaba todas las rarezas que él tenía esparcidas por el castillo, con el único objetivo de mostrar ante sus compañeros y visitantes. Solo con el fin de ganar en algo. – Tal vez te hace falta algo vivo – Dijo Rei con franqueza -Todo lo que posees es muy bonito. Pero, todo esta frío y muerto – Termino dándose la vuelta y volviendo al interior de la habitación. Pero esa conclusión, solo había logrado hacer que Enji tuviera insomnio.

Tenya Iida, era el oficial general de la guardia real, había ganado su puesto allí gracias a su devoción, rectitud y cumplimiento de metas. Antes de que fuera llamado con urgencia a la habitación del trono, estaba entrenando algunos nuevos reclutas que a su parecer eran llorones y desesperantes. Pero ahora se encontraba casi trotando debido a la urgencia del llamado.

Al llegar, encontró al rey sentado en su habitual trono, dando instrucciones a las líderes de las criadas, posiblemente un nuevo baile para fortalecer alianzas entre reinos. Cuando el rey se percató de la llegada del oficial. Permitió su entrada con un ademan afirmativo. Tenya con pies de plomo, se posó frente al trono y postro una de sus rodillas en el suelo y colocando su mano derecha en un puño sobre su corazón. – Mi señor – Saludó firmemente. – Necesito que realices un encargo de suma importancia- Empezó - Quiero las alas de un hada para mi colección personal- La mención de semejante petición dejo a Iida frío como una piedra - Solo esas alas, con su belleza y rareza, podrán adornar mi salón de trofeos- Iida no daba crédito a lo que escuchaba – Como es de esperar, desafortunadamente también necesito al hada. O las alas, simplemente dejarán de existir con ella – Dijo con indiferencia – Es necesario que la misión se cumpla lo más pronto posible. Presentaré mi nuevo trofeo tan pronto como lo tenga en mis manos- Finalizó con una sonrisa casi maquiavélica.

Iida asintió, ocultando su desconcierto ante tal demanda caprichosa. ¿Quitarle las alas a un hada? Ya de por si la relación del reino con ellas no era la mejor, y menos sería si lastimaban a una de ellas. ¿Sería una incitación a la guerra? Probablemente....

Sin embargo, con convicción y determinación, Iida decidió correr el riesgo y cumplir con su trabajo. Aquel que tanto le había costado conseguir —Haré todo lo posible, su majestad. Traeré las alas de hada. –