Debí haberte dicho... One shot CDM [Kentin x Sucrette]

Regalo de aniversario [Extra Pt 2]

PERDÓN EN SERIO POR LA DEMORA! ESTA PARTE ESTABA LISTA DESDE HACE EOOONES PERO LA DEJÉ EN BORRADOR PORQUE SOY LA PERSONA MÁS DESPISTADA EVEEEEEEEER. 

Gracias por leer, en serio <3 

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*PoV Ken*

Había llegado el día. Ya lo tenía todo listo, unos videojuegos, una reserva en un restaurante y un mensaje de texto que decía "Feliz primer año. Te amo, Su."
Todo se sentía incorrecto, como si ni siquiera lo estuviera intentando.
Al menos hice la reserva en el restaurante más caro y demandado de la ciudad, tomé todos mis ahorros para estar seguro de que mi novia y su buen apetito quedaran satisfechos en la cena. Simplemente no podía dejar de darle vueltas a la idea de que no era suficiente, de que hasta en un mes cualquiera todo se había sentido más... yo. Tan poca atención estaba prestando a la cháchara incesante de mi mamá que mi padre terminó agitando su cuchara frente a mi nariz. 

- Soldado, préstele atención a su madre, sus consejos no son tan malos -. Gruñó, infeliz de ser el único que estaba realmente escuchando a mamá. Atisbé un poco del contenido de su monólogo, hablaba sobre cómo no debía estar tan nervioso por salir con Sucrette cuando, de todas maneras, llevábamos más tiempo juntos del que muchas parejas de nuestra edad se soportarían. Sobre cómo a veces nos esforzamos demasiado tratando de que el amor sea perfecto cuando no debe ser lo ideal, sino lo indicado. 

Y comprendí a qué se refería al ver cómo la miraba mi papá. Como si ella fuese la condecoración más valiosa que él hubiese ganado en toda su vida, ella y él, siendo tan diametralmente distintos lograban no ser perfectos juntos, sino simplemente indicados el uno para el otro. Le envié el mensaje a Su mientras mis padres se inclinaban uno con el otro y se daban un beso rápido. 

  "Feliz primer año. Te amo, Su. Iré a tu casa a las siete." Enviar.

Ser masculino, ser el chico de la relación. La reserva estaba programada para las ocho y más me valía no arruinarlo todo o este bien podría ser nuestro primer y último aniversario. 

  *PoV Sucrette*  

Aterrada era poco. 

Ojalá fuese más como Lysandro y pudiese tener siempre las palabras adecuadas para expresar mi sentir. En vez de tener la palabra perfecta para describirme, me tengo que limitar a enumerar varias que podrían dar una idea: ansiosa, temerosa, estresada, irritable, agradecida, nerviosa, feliz... treméndamente feliz. 

Porque jamás creí que pudiese ser tan feliz. Kentin era todo lo que yo podía pedir en una persona y aún más, vivía y moriría por mí y era sorprendentemente agradable tener la certeza de que yo lo haría por él, pero aún así... yo quiero más. Quiero más cada que me rodea con sus fuertes brazos y siento cada músculo tensarse contra mí. Quiero más cuando salgo a correr con él y veo cómo el sudor le empapa la playera y le marca el torso. Quiero más cuando me besa como si estuviésemos diciéndonos adiós para siempre aunque sólo nos vayamos a separar unas horas y todo mi cuerpo se tensa ante la anticipación de algo que nunca llega. 

Porque si por Kentin fuera no habríamos llegado ni a segunda base. 

Mi celular vibra y veo un mensaje de él: "Feliz primer año. Te amo, Su. Iré a tu casa a las siete." ¿Qué demonios? Pienso y lo vuelvo a leer. Es solamente una línea, algo muy impropio de Ken, y eso de venir a mi casa hasta el final del día es lo que más me preocupa ya que después de todo eso dejaría muy poco tiempo para mi plan. Arrojo mi celular contra mi cama y sigo buscando algo qué ponerme ya que por una vez Rosalya se quedó corta de ideas y se concentró solamente en lo que NO SE VE de mi outfit. Ahora habría que agregar una palabra más a la lista: molesta.