Más Allá Que Una Simple Imagen

Capitulo 2:

Al salir él me vio, mi hermana todavía no me prestaba atención. Ni a mis pasos, no podía mantener la cabeza levantada, sabia que él me seguía viendo. Hasta que me acerque lo suficiente a ellos para que ella me notara.

-Hermana, ya esta la comida

-Si, si ya voy

-Emma, cómo estas? *Lo ignoro

-Emma, te habla. No seas irrespetuosa

-No te preocupes, ella es así. Desde que llegue noto como me mira desde la casa *Me mira fijamente

-Emma!

-Lamentablemente nunca pudimos hablar bien

-Disculpa, hablare con mi madre de esto

Agarre del brazo a mi hermana para que entremos.

-No le creas hermana, solo entremos!

-Bueno, veo que tienen apuro. Tengo que hacer cosas, hablamos después si quieres.. esa de allá es mi casa por si te gustaría tomar un café

-Me encanta.. *Interrumpida

-No, gracias. Estaremos ocupadas

Solo agarre a mi hermana fuertemente y la lleve a adentro.

Al entrar mi hermana se soltó de mi agarre y me hablo con enojo, no dije mucho. Realmente no dije nada, ella solo suspiro y se fue hacia la cocina a buscar agua.

El almuerzo estaba riquísimo, mi madre estaba contenta. Recuerdo cuando mi hermana puso un poco de música para que nos levantemos a bailar mientras mi madre ayudaba a mi abuela a comer, nos reímos mucho ese día.

El día siguiente fue casual, con una mañana tranquila. Decidí salir al parque como todos los viernes, entrenar un poco y relajarme de paso.
El parque estaba a unas 5 cuadras de la casa, pero antes de eso mi madre me detiene para pedirme un favor. Tenia una tarta en sus manos y con ella un papel de bienvenida.

-Es para el nuevo vecino, llevárselo y disculpa te con él de paso.

Me retracte al instante, pero al paso de los minutos tuve que ir. Llegue a la casa, no había ruido y el auto estaba, pero no sabia si estaba él. Lo malo era que no tenia timbre, y tampoco sabia como se llamaba.
Tuve que golpear la puerta hasta que me atendiera. Después de eso no recibí respuesta, entonces decidí irme.

-Si?

El tipo abre la puerta de repente, encuerado con el cabello desarmado y con voz áspera. Ya tenia ganas de irme, pero sin pensarlo le hable. Aunque la tarta se veía deliciosa no iba a ser mala con mi madre, además ella siempre fue muy bondadosa y quería que nosotras fuéramos igual. Algo que no era lo mismo para todas, pero tenia razón. Que tenia de malo este hombre? Que ocultaba? Por qué parecía una persona rencorosa con él? Si ni siquiera lo conocía

-Te puedo ayudar en algo, Emma?

-Le traje una tarta *le muestro la misma y se sonríe

-Y esa amabilidad?

-La hizo mi madre para usted por su bienvenida

-Que generosa por traerlo *Agarra la tarta tocando mis manos

-Bueno, solo era eso *Intento salir de la situación

-No te vallas, espera! *Me agarra del brazo

Ahora que? Este tipo me agarro como si me conociera y poco a poco se acercaba a mi sosteniendo la parte superior de mi cuerpo.

-Te invito un café, para una mañana linda como esta, esta para tomar uno

-No tomo café

-Té?

-No, ya desayune.. gracias

De repente su mano paso de mi hombro a mi cintura y suspiro marcando su abdomen. Saque su brazo y le dije: "Espero que le guste la tarta" mientras me iba

Los paseos solitarios hacían que reflexione sobre mi vida, mis problemas y lo demás. A mis hermanas nunca les intereso salir conmigo, mi madre comprendía perfectamente que necesitaba mi espacio. Desde que nuestro padre se fue, siempre mi madre se sintió frustrada. Mis hermanas estaban con ella, pero ya empezaban a salir más allá de la casa, los trabajos y deseos que tenían no se les podía negar.

Siendo la menor me quede con ella y mi abuela, la ayude mientras estudiaba en la universidad y buscaba un trabajo de medio tiempo para pagar algunos gastos. Pero no todo era tan fácil en ese entonces, el mundo empezaba a cambiar y cada vez mi madre empezaba a tener problemas de salud.

Mi abuela con todas sus fuerzas seguía de pie hasta un suceso en el año 2011. De repente las pastillas no le hacían efecto, la esquizofrenia la consumía con la poca brevedad del tiempo que tenia. Tuvimos que llevarla a un psiquiátrico y antes de eso a un hospital por todas las marcas que se hacia, poco tiempo murió. 

Su funeral se hizo al siguiente día, mi madre se desplomó en el sillón de la casa. Lloro hasta llegar a dormirse, intente calmarla antes de eso pero no funciono. Quería estar sola, el mes siguiente agarro la compostura.

-Supe del fallecimiento, tu madre estará dolorida seguro

-Si, pero ella se recuperara.

-Ten, esto es para ella. Me presto plata y no pude devolvérselo después de un año

-Gracias, Amanda

La vecina estuvo más de 15 años con nosotros, nos vio crecer. Nosotros vimos crecer a sus hijos y vimos como perdió familiares, entendía lo que pasaba mi madre